Kenya, mujer trans, busca justicia. Vio en 2016 cómo asesinaron a su amiga. Ella misma se salvó ser víctima porque al agresor se le encasquilló el arma. Su historia es recuperada por el diario El País.
Ciudad de México, 12 de diciembre (SinEmbargo).- Era 2016. Un sujeto se aproximó a Kenya y Paola en calles de la Ciudad de México. Abrió fuego contra Paola y la asesinó. Luego trató de matar a Kenya, pero el arma se le encasquilló.
“A pesar de que el suceso fue grabado y había numerosos testigos, el hombre quedó en libertad al día siguiente ”, detalla la periodista Seila Montes, de El País.
De acuerdo con su información, el sujeto que asesinó a Paola continúa hoy en libertad. “Kenya, además de tratar de hallar justicia para su compañera trans, busca resolver otros casos de homicidios de personas LGTB+ en México”.
Kenya “pudo ver la cara del asesino y mirarlo a los ojos, pero el equipo fiscal que se hizo cargo del caso la descartó como testigo de la investigación y concluyó que no había pruebas suficientes para inculparlo”, escribe Seila Montes en el texto La lucha de Kenya, la trans que sobrevivió a un ataque mortal. “Yo estaba ahí, pero me pusieron como curiosa del lugar, sin la calidad de testigo ni de víctima indirecta”, relató la mujer a la periodista de El País.
Según Kenya, la familia de su amiga Paola no quiso hacerse responsable del cuerpo, por lo que ella y otras conocidas organizaron el funeral en aquel 2016.
“El rostro de Kenya saltó a los medios a los dos días, cuando decidió transportar junto a otras compañeras el cadáver de su amiga por el mismo lugar donde ocurrió el crimen, y colapsó con una carroza funeraria una de las principales avenidas de Ciudad de México”, describe Seila Montes.
“Yo ya lo he hecho todo, he parado el tráfico, he cerrado locales, catedrales... Todo para exigir justicia a las autoridades”, dice la mujer en entrevista con El País.
Kenya fundó una organización civil llamada Casa de las Muñecas Tiresias, y el primer albergue en la Ciudad de México para personas trans, el Hogar Paola Buenrostro.
“Kenya es conocida como la mujer que entierra a trans, pero no solo ayuda a este colectivo, sino que también se hace responsable de personas en situación de calle o inmigrantes sin familia ni recursos en el país. Ella se encarga de encontrar los medios para darles un entierro digno”, detalla Montes.
De acuerdo con la organización Letra S, en los últimos cinco años, de 2015 a 2019, al menos 441 personas de la comunidad la comunidad lésbico, gay, bisexual y trans (LGBT) fueron víctimas de violencia homicida, con el último año como el más violento del lustro con 117 asesinatos.
