Los ingredientes autóctonos como el maíz, el chile habanero, el achiote y el cacao desempeñan un papel central en la preparación de los platillos.
Ciudad de México, 12 de noviembre (SinEmbargo).- La gastronomía yucateca es un verdadero tesoro culinario de México. Con raíces profundamente arraigadas en la cultura maya, esta cocina es una celebración de sabores auténticos, tradiciones ancestrales y una rica historia que ha evolucionado a lo largo de los siglos.
Los ingredientes autóctonos como el maíz, el chile habanero, el achiote y el cacao desempeñan un papel central en la preparación de los platillos. La cocina yucateca también lleva consigo el legado de la época colonial, incorporando elementos de la cocina española y caribeña que se han fusionado con maestría para crear una gama diversa de sabores y texturas únicas.
Grupo Mesones, a través de su chef ejecutivo Elio Xicum, salvaguarda la rica gastronomía yucateca a través de platillos imperdibles como los siguientes:
Cochinita pibil. Tiene su origen en la época prehispánica de las tierras mayas. Tradicionalmente sólo se cocinaba del 31 de octubre hasta el 2 de noviembre durante el Hanal Pixan, que significa comida de almas, y se preparaba con carne de faisán; en cambio, ahora es un platillo que se disfrutarse todo el año y se utiliza carne de cerdo. Se presenta de diferentes formas, en tacos, panuchos, tortas y tostadas, entre otros.
Sopa de lima.Tiene origen maya y ha formado por siglos parte de la alimentación yucateca. Nació en las antiguas haciendas donde se cultivaba este fruto que es, precisamente, el ingrediente principal.
Guayaberas. Sofrito de chaya con recado rojo, jitomate, especias, queso de bola, aguacate y tostadas de pepita loca. Es un platillo que habla de la zona de Tekit, donde los artesanos se especializan en la elaboración de estas prendas.
Si visitas Valladolid, puedes hospedarte en los hoteles Oriundo Luxury Nature Villas o Mesón de Marqués, donde disfrutarás de su cocina, donde predomina el respeto por las tradiciones culinarias. En ambos lugares el menú se prepara con los insumos que provienen de su propio huerto, práctica les permite ser respetuosos con el medio ambiente y mantener un enfoque sostenible; el resto de los ingredientes se adquieren con productores locales.