Un nuevo estudio publicado el 6 de octubre en la revista científica Nature Communications llamado “The global and regional air quality impacts of dietary change” investigó la relación entre nuestra dieta y la contaminación del aire. Descubrieron que las dietas basadas en plantas podrían conducir a una reducción significativa de las emisiones de contaminantes tales como el amoníaco y el metano.
¿Por qué se habla especialmente de estos gases? El metano es un hidrocarburo que puede ser producido por animales rumiantes criados para consumo durante la digestión, este es un potente gas de efecto invernadero, mientras que el amoníaco está compuesto por nitrógeno e hidrógeno y se genera cuando se aplican estiércol y otros fertilizantes a los campos de cultivo.
La exposición parcial a contaminantes como el metano pueden alterar el ritmo cardiaco, el equilibrio, la respiración así como provocar entumecimiento del cuerpo y la pérdida del conocimiento. Si la exposición es continua o más prolongada, incluso puede causar la muerte. En el caso del amoníaco, la inhalación de concentraciones más bajas puede provocar irritación en las vías respiratorias, mientras que la exposición más prolongada puede resultar en ardor en los ojos y vías respiratorias, también puede resultar en ceguera, daño pulmonar o la muerte.
Debido a que la mayoría de los contaminantes relacionados con los alimentos se generan al momento de producir forraje y productos de origen animal, el equipo de ciencias encargado de este estudio analizó tres tipos de enfoques dietéticos: la alimentación vegana, la vegetariana y la de una persona flexitariana con el objetivo de conocer los posibles efectos sobre la contaminación del aire.
Los hallazgos demostraron que una alimentación completamente basada en plantas (vegana) podría resultar en una reducción de entre el 84-86 por ciento en las emisiones, mientras que la alimentación vegetariana tendría una reducción del 69-70 por ciento y finalmente las dietas flexitarianas un 44-48 por ciento. Puede haber variaciones según la ubicación geográfica y la actividad ganadera de las regiones. Las reducciones potenciales más importantes se muestran en países con mayor índice de emisiones provenientes directamente de la ganadería.
Estos resultados son de importancia ya que la reducción de estas emisiones resultaría en una notable disminución de la mortalidad temprana relacionada con la contaminación del aire. Se estima que las dietas completamente basadas en plantas o veganas previenen alrededor de 236 mil muertes anuales a nivel mundial. No sólo tendría beneficios en la salud humana y en la calidad del aire, también la deforestación podría reducirse a la mitad, ahorraríamos más agua, la distribución de alimentos enteros podría llegar a más personas y estaríamos evitando obligar a animales a nacer para ser explotados y asesinados.
Pequeños cambios son mejores que ningún cambio. Si deseas darle una oportunidad a la alimentación basada en plantas a tu propio ritmo, puedes unirte a nuestro programa gratuito en línea el Semanario Vegano. En este programa vía correo electrónico estarás recibiendo 1 correo por semana durante 10 semanas que incluye información nutricional escrita por un profesional, recomendaciones de productos, recetas, consejos prácticos y más. También tendrás acceso a un grupo de apoyo en línea conformado por una comunidad dispuesta a acompañarte en este camino sin importar cual sea tu objetivo. Inscríbete aquí: veganoutreach.org/10W-KR
