La Corte otorgó la suspensión solicitada por Donald Trump, ya que quieren considerar los argumentos del expresidente para impedir la entrega de los registros; una jueza ya había anulado el bloqueo.
Por Nomaan Merchant
WASHINGTON, 12 de noviembre (AP).- Un tribunal federal de apelaciones bloqueó temporalmente el jueves la entrega de los registros que solicitó una comisión de la Cámara de Representantes que investiga la insurrección del 6 de enero en el Capitolio federal, a fin de darse tiempo para sopesar el pedido de emergencia del expresidente Donald Trump.
La Corte Federal de Apelaciones del Circuito del Distrito de Columbia otorgó la suspensión administrativa que pidió Trump. La medida es con el objetivo de darle al tribunal tiempo para considerar los argumentos del exmandatario para impedir la entrega de los documentos, la cual estaba programada para el viernes.
La orden aplaza hasta el final de mes la entrega de los registros. La corte de apelaciones fijó los argumentos en el caso para el 30 de noviembre.
La Cámara Baja ha pedido los registros telefónicos de Trump, los borradores de discursos y otros documentos relacionados al 6 de enero. El Congreso quiere acceso a los registros para entender de mejor manera el ataque contra el Capitolio, en el que simpatizantes del exmandatario irrumpieron en el recinto y provocaron que los legisladores que certificaban la derrota de Trump ante Joe Biden en los comicios de 2020 se resguardaran.
Biden renunció al privilegio ejecutivo sobre los documentos. Trump recurrió a los tribunales para argumentar que, como exmandatario, aún tenía el derecho de ejercer privilegio sobre los registros y que su difusión perjudicaría a futuros presidentes.
La Jueza de distrito Tanya Chutkan rechazó el martes dichos argumentos, destacando en parte que “los Presidentes no son reyes, y el demandante no es Presidente”. Un día después rechazó también la moción de emergencia presentada por Trump.
En sus documentos ante el tribunal de apelaciones, los abogados de Trump escribieron que sin una suspensión, el expresidente “sufriría un daño irreparable mediante la negación de facto de un derecho constitucional y legal a ser escuchado por completo en un desacuerdo grave entre el expresidente y el mandatario en funciones”.
Los argumentos del 30 de noviembre se llevarán a cabo ante tres jueces nominados por Presidentes demócratas: Patricia Millett y Robert Wilikins, quienes fueron postulados a la banca por el exmandatario Barack Obama, y Kentaji Brown Jackson, nombrada por Biden.
El jueves, la Casa Blanca también le notificó al abogado de Mark Meadows, exjefe de despacho de Trump, que Biden renunciaría a cualquier privilegio ejecutivo que evite que Meadows coopere con la comisión investigadora, según una carta a la que The Associated Press tuvo acceso. El panel citó a comparecer a Meadows y a más de una veintena de personas más como parte de su pesquisa.
El abogado de Meadows, George Terwilliger, emitió un comunicado en respuesta, señalando que su cliente “sigue bajo las instrucciones del expresidente Trump de respetar los añejos principios del privilegio ejecutivo”.
“Ahora parece que serán los tribunales los que tendrán que resolver este conflicto”, indicó Terwilliger.