En los 100 puntos de Gobierno que presentó Claudia Sheinbaum el pasado 1 de octubre, planteó 10 puntos relacionados con la atención a la salud de las personas en diferentes momentos de su edad y que apuntan más a la prevención de enfermedades a la par de la construcción de más clínicas.
Ciudad de México, 12 de octubre (SinEmbargo).- El Sistema de Salud mexicano aún se encuentra sumido en una crisis luego de décadas de abandono durante los gobiernos neoliberales. Basta un recorrido a cualquier clínica u hospital para corroborar las carencias que han llevado a la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo a enfocar una serie de sus políticas de Gobierno en este sector.
No sólo eso. Con tan solo revisar las cifras oficiales, se puede constatar que cada vez más mexicanos optan por acudir a clínicas privadas para atender distintos padecimientos pese a que tienen una buena percepción de su salud, de acuerdo con lo que reporta el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Pero más allá de la percepción, el sector salud y todos los servicios que se derivan de éste, muestran un gran reto para la administración de Sheinbaum Pardo.
Al menos en su lista de 100 compromisos, estableció las líneas de su Gobierno en materia de prevención y nuevos servicios para la atención a grupos vulnerables.
Destacan el programa de atención a la salud casa por casa a los adultos mayores, que arrancaría en enero con 20 mil enfermeras, enfermeros, médicas, médicos; se buscará que las escuelas públicas sean espacios de prevención de la salud, incluyendo salud mental, prevención de las adicciones, salud bucal; que desde el nacimiento, todas y todos los mexicanos tengan acceso a vacunas, cuidados preventivos, atención médica, estudios y laboratorios, cirugías y medicamentos gratuitos para hacer efectivo el derecho a la salud con la consolidación del programa IMSS-Bienestar.
También se buscará fortalecer el programa de abasto y distribución de medicamentos con el programa de Farmacias para el Bienestar, que estarán ubicadas junto a los Bancos del Bienestar, para distribuir de manera gratuita medicamentos básicos, principalmente para los adultos mayores, mientras que se buscará generar un sistema para que haya tomas de muestra de laboratorio en la gran mayoría de los centros de salud.
Se impulsará un programa de cuidados para los primeros mil días de vida con las mujeres embarazadas para que acudan a sus visitas prenatales y se les garantizarán los suplementos vitamínicos a los recién nacidos y sus tamizajes.
A la par, se continuará con la modernización de la infraestructura y el equipamiento de hospitales y unidades de salud; se inaugurarán 16 unidades del IMSS-Bienestar, siete unidades del IMSS y cuatro unidades del Issste; para 2025 se implementará un programa amplio de cirugías. En las escuelas, centros de trabajo, espacios públicos habrá programas para reducir obesidad, hipertensión y diabetes.
El sistema de salud en México está separado en distintas instituciones y cada una debe destinar presupuesto a tareas de infraestructura, personal, material, conservación y hasta gastos personales. La desatención de los servicios de salud en las últimas décadas puede evaluarse a partir de las cifras del Inegi sobre el incremento de los servicios privados en la población mexicana aunque se tenga acceso a un servicio público.
De cada 100 establecimientos particulares en México, 90 son de categoría de “hospital general” y en 2023 brindaron 4 millones 848 mil 577 consultas para esos fines y 2 millones 165 mil 911 para urgencias. Sobre los ingresos hospitalarios, la principal causa de internamiento fue el embarazo y parto, lo que evidencia que las mujeres –que son las que más recurren al sector privado– prefieren este servicio. La otra rama que destaca es la odontología.
En el otro extremo está el otro servicio privado pero enfocado en personas con menos ingresos o menos tiempo para atender su salud, que son los consultorios adyacentes a farmacias.
La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut), también del Inegi, muestra que desde el año 2006 este servicio tiene un claro aumento mientras que de ese año al 2023, la proporción de la población que acudió por atención al sector público pasó de 34 a 46 por ciento.
Para 2022, del 48.8 por ciento de la personas que solicitaron un servicio privado, el 19.2 por ciento lo hizo en un consultorio adyacente a farmacia.
De acuerdo con datos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), cada mexicano debe visitar al médico al menos una vez al año para garantizar un diagnóstico oportuno de cualquier enfermedad; no hay un dato que sostenga que eso se cumple. Para 2022, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), sostiene que el 39.1 por ciento de los mexicanos afirma no tener acceso a los servicios de salud, que es el equivalente a 50.4 millones de personas.
En los últimos diez años, el presupuesto destinado a la salud ha tenido fluctuaciones derivadas de las distintas estrategias para recuperarlo.
Por ejemplo, en 2014 se muestra en la Cuenta Pública que a salud se detonaron 130 mil 264 millones de pesos, monto que fue incrementando hasta 2022, cuando recibió 182 mil 681 millones de pesos, lo que muestra un aumento del 40 por ciento. Pero, el monto para 2023 –que muestra el impulso al programa IMSS Bienestar– quedó en 105 mil 425 millones de pesos, una disminución del 24 por ciento de un año a otro; es además el menor presupuesto destinado en la última década al sector salud.
La mayoría del dinero se destina a los Servicios Personales. En el mismo periodo analizado, en ningún año el monto ha disminuido: en 2014 absorbió ese fin 22 mil 020 millones de pesos; en 2019, 26 mil 536 millones de pesos y para 2023 se ubicó en 40 mil 871 millones de pesos.
En lo que respecta a la Inversión Física, la Cuenta Pública muestra que en promedio, el Gobierno ha destinado 6 mil 695 millones de pesos en los últimos 10 años. Sin embargo, destacan el año 2018 en que se invirtieron sólo 4 mil 717 millones de pesos y 2023, que ese rubro registró 3 mil 78 millones de pesos.
Finalmente, otro rubro que muestra Hacienda es el llamado Fortalecimiento a la atención médica. Arrancó en 2015 con 4 mil 113 millones de pesos pero al año siguiente bajó a 347 millones de pesos; recuperó un poco de nivel en 2022 con 827 millones 202 mil 234 pesos pero bajó de nueva cuenta en 2023 a 510 millones 492 mil 387 pesos.
