La candidata y los candidatos a la Jefatura de la Ciudad de México se preparan para el tercer debate chilango, donde uno de los temas que se abordarán es la seguridad. El candidato de la alianza PRI-PAN y PRD, Santiago Taboada, ha centrado su estrategia en criticar a los gobiernos de Morena por la inseguridad y la oposición insiste en culpar a estos grupos. Sin embargo, datos muestran que el mayor repunte en la inseguridad ocurrió durante el mandato de Miguel Ángel Mancera, abanderado de su coalición.
Ciudad de México, 12 de mayo (SinEmbargo) .- Uno de los temas centrales del tercer y último debate chilango será la seguridad, así como la planeación del desarrollo inmobiliario y urbano, dos temas en los que tanto Clara Brugada, de la coalición Sigamos Haciendo Historia, como los aspirantes Santiago Taboada, de Fuerza y Corazón por la CdMx, y Salomón Chertorivski, de Movimiento Ciudadano, han enfocado parte de su campaña.
La inseguridad en la Ciudad de México es uno de los principales temas explotados por el candidato de la alianza PRI-PAN y PRD durante su campaña, tanto para criticar a los gobiernos de Morena como para presumir y asegurar que su programa Blindar Benito Juárez es un ejemplo a nivel nacional.
Desde su gestión como Alcalde de Benito Juárez en la Ciudad de México, Taboada asegura que la inseguridad en el país y en la capital han sido producto del desgobierno y la desatención del Presidente López Obrador y los gobiernos de Morena. Ahora, como candidato, ha perpetuado dicha acusación.
“Simple y sencillamente es el resumen de 27 años en donde la gente ni vive más segura, ni tiene mejor calidad del agua, ni tiene mejor Metro, ni hay un sistema de salud que funcione”, insistió el candidato de la oposición en una entrevista con diversos reporteros apenas el pasado 7 de mayo.
La narrativa promovida por el candidato de la oposición ha insistido que los grupos políticos que ahora son parte del partido Morena son los responsables de arrastrar a la capital hacia problemas de seguridad. Sin embargo, una mirada detallada a las tendencias históricas en materia de seguridad en el Distrito Federal, ahora Ciudad México, revela que el mayor repunte en materia de inseguridad en la capital del país se vivió en el periodo en que gobernó Miguel Ángel Mancera, político aliado a Taboada, quien sigue en PRD y actualmente es candidato a Diputado federal por parte de la oposición.
Durante el mandato de Mancera, los índices de homicidios dolosos experimentaron un incremento constante. El año en que fue elegido, el 5 de diciembre de 2012 recibió la ciudad con una cifra de 749 carpetas abiertas por homicidios dolosos, las cuales se presume que incluían también feminicidios, delito que en ese año no se desglosaban o contabilizaban aparte. En su primer año completo como Jefe capitalino el número de carpetas de investigación creció a 854 y para su último año de gestión, en 2018, la cifra ascendió a 1 mil 411 carpetas de investigación entre homicidios dolosos y feminicidios.
En contraste, la administración de Claudia Sheinbaum, la sucesora de Mancera, si bien arrancó con la cifra más alta de homicidios dolosos y feminicidios, 1 mil 468 en el 2019, esta tendencia durante su gestión fue a la baja, ya que en el último año que gobernó, 2023, la cifra de las carpetas abiertas por ambos delitos disminuyó a 838.
Además, al examinar los gobiernos de políticos individualmente desde 1997 hasta la fecha, se observa que el año con menor incidencia de homicidios fue durante el mandato completo del exsecretario de derechos humanos, ahora colaborador de Claudia Sheinbaum, Alejandro Encinas Rodríguez, en 2006, con 649 casos registrados.
Pero no solo en materia de homicidios dolosos, sino también en cuanto a las carpetas de investigación abiertas por el delito de secuestro, uno de los crímenes de alto impacto más sentidos por la sociedad, se registró un fuerte repunte en el año 2018, durante el gobierno compartido entre Miguel Ángel Mancera y José Ramón Amieva. En ese año, los secuestros se dispararon a una cifra de 280, un incremento del 366 por ciento en comparación con los 60 secuestros registrados en el primer año de gobierno en 2013.
GOBIERNOS DE LA CAPITAL
La Ciudad de México, antes Distrito Federal, solía ser gobernada por políticos designados directamente por los Presidentes de la República hasta 1997. Además, el Congreso de la Unión tenía la facultad de legislar sobre todo lo relativo al Distrito Federal. Sin embargo, esta situación comenzó a cambiar en 1987, cuando los capitalinos eligieron una Asamblea de Representantes del Distrito Federal. Las verdaderas transformaciones iniciaron en 1993 y 1996, cuando se modificó la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y a partir de 1997 los ciudadanos del Distrito Federal comenzaron a elegir al Jefe de Gobierno de la Ciudad y al primer grupo de legisladores de la Asamblea Legislativa. Desde el año 2000, también fue posible elegir a los Jefes delegacionales.
Óscar Espinosa Villarreal fue el último priista que gobernó la Capital, desde 1994 hasta 1997. Cuauhtémoc Cárdenas, hijo del expresidente Lázaro Cárdenas y fundador del Partido de la Revolución Democrática (PRD), que tenía ocho años de ser conformado, fue elegido primer Jefe de Gobierno de la Ciudad de México. Sin embargo, Cárdenas solo ocupó la jefatura hasta septiembre de 1999 cuando dejó el cargo para contender por tercera vez por la Presidencia de la República. En su lugar, quedó en entonces era su secretaria de Gobierno, Rosario Robles Berlanga, quien concluyó la administración hasta el año 2000. Andrés Manuel López Obrador fue electo como Jefe de Gobierno del DF de 2000 a 2006, pero en julio de 2005 dejó el cargo para buscar la Presidencia de la República, por lo que la Asamblea Legislativa del Distrito Federal eligió al entonces Secretario de Gobierno, Alejandro Encinas Rodríguez.
Posteriormente, Marcelo Ebrard Casaubon fue electo y gobernó desde diciembre de 2006 hasta diciembre de 2012, siendo sucedido por Miguel Ángel Mancera del PRD, quien estuvo a cargo desde diciembre de 2012 hasta marzo de 2018, momento en que dejó el cargo y José Ramón Amieva asumió como Jefe de Gobierno. Claudia Sheinbaum fue electa como Jefa de Gobierno de la Ciudad de México para el periodo 2018-2024, dejando el cargo en junio de 2023 para participar en la encuesta que la definió como candidata presidencial de Morena. Desde entonces, su Secretario de Gobierno ha ocupado el cargo.
TENDENCIA EN SEGURIDAD
En el análisis de la tendencia de la seguridad en la Ciudad de México es fundamental examinar cómo han evolucionado los principales delitos durante cada una de las administraciones gubernamentales, con base en las cifras proporcionadas por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, que representan los datos con mayor tiempo de registro.
Bajo la administración de Cuauhtémoc Cárdenas, los homicidios dolosos experimentaron una disminución progresiva. Sin embargo, los secuestros y las extorsiones mostraron una tendencia opuesta, con un notable aumento durante ese mismo periodo. Cuando Cárdenas ganó la elección, con 977 carpetas de investigación por homicidios dolosos, se observó una disminución en este delito a lo largo de su mandato. En el primer año, los homicidios descendieron a 947 en 1998, y continuaron a la baja con 880 en 1999. En contraste, los secuestros y las extorsiones experimentaron un aumento, pasando de 66 a 141 carpetas de investigación por secuestro y de 158 a 222 por extorsión en el año 2000.
La gestión de Andrés Manuel López Obrador, aunque enfrentó un repunte inicial en los homicidios dolosos, logró estabilizar y reducir estas cifras a lo largo de su mandato. Lo mismo ocurrió con los secuestros, mientras que las extorsiones mostraron un incremento constante. En el primer año completo con AMLO como Jefe de Gobierno se registró un aumento del 13.82 por ciento en las carpetas de investigación por homicidios dolosos, pasando de 709 en 2000 a 807 en 2001. Sin embargo, es importante destacar a lo largo de su mandato, la tendencia fue a la baja, incluso por debajo de los registros de la administración previa. En el año 2002, la cifra disminuyó a 748, continuando la tendencia descendente con 715 en 2003, 710 en 2004, y llegando a 698 en 2005, último año de su gobierno.
En el año 2006, cuando Alejandro Encinas asumió como Jefe del Distrito Federal, el número de carpetas de investigación por homicidios dolosos alcanzó su punto más bajo desde 1997, con 649 casos. En cuanto a los secuestros, se registró un descenso significativo, pasando de 148 carpetas en 2001 a 92 en 2006. Sin embargo, las extorsiones mostraron un aumento durante este periodo, con un total de 469 casos en 2005 y 382 en 2006.
La administración de Marcelo Ebrard coincidió con el periodo de Felipe Calderón, cuya estrategia contra el crimen organizado generó un repunte en la violencia a nivel nacional. En ese periodo, la Ciudad de México mostró una tendencia fluctuante, con ligeras alzas y bajas, pero manteniendo las cifras en un rango entre 700 y 800 carpetas de investigación de homicidios dolosos. Por ejemplo, en el año 2007, primer año completo de Ebrard, los asesinatos se situaron en 714; para el 2008 la cifra bajó a 713, pero en 2009 subió ligeramente a 747, y en 2010 a 811, pero para el 2011 bajó a 779, cifra que se repitió en el 2012.
En cuanto al sexenio de Miguel Ángel Mancera, a diferencia de otros, aunque arrancó con un ligero descenso en los homicidios dolosos, la tendencia fue al alza de manera constante. Para el año 2015, año en el que ya se empezaron a desglosar los feminicidios aparte, la violencia creció al menos un 14.01 por ciento, registrándose al menos 854 carpetas por homicidios dolosos y feminicidios; para el año 2016 la cifra se elevó a 952 carpetas de investigación y en 2017, la cifra se disparó a 1,085 carpetas de investigación.
Es importante destacar que las cifras de homicidios dolosos analizadas hasta 2015 pueden incluir feminicidios, ya que en ese periodo no se desglosaban o clasificaban aparte. Por lo tanto, para lograr un comparativo histórico más preciso, a partir del año 2015, se sumaron las cifras de homicidios dolosos y feminicidios, ya que antes de esa fecha no se desglosaban estos últimos.
Durante esa administración, los secuestros también experimentaron un aumento significativo. En el primer año de la gestión de Mancera se denunciaron 60 casos, mientras que en el segundo año se registraron 62. Aunque en los años 2016 y 2017 se observó una tendencia a la baja con 46 y 40 casos respectivamente, en 2018 la cifra se disparó dramáticamente hasta alcanzar los 280 secuestros.
Y es que el incremento de la violencia iba a la par de las denuncias y reclamos de la presencia de grupos del crimen organizado en la Ciudad de México, sin embargo, precisamente Miguel Ángel Mancera fue Jefe de Gobierno de la Ciudad de México negaba tajantemente la presencia de grupos del narcotráfico en la capital a pesar de informes, detenciones de capos y eventos de alto impacto que se registraban en la capital. El ahora Senador perredista insistía en que la capital del país no era “centro de operaciones” del crimen organizado incluso aún después de la detención del presunto capo sinaloense Dámaso López Núñez en la colonia Nueva Anzures, de la entonces delegación Miguel Hidalgo, en el año 2016.
Sin embargo, mientras Mancera trataba de ocultar la presencia e incursión de los grandes cárteles de la droga; desde el extranjero, en el año 2015, un informe de la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA por sus siglas en inglés) ya identificaba a cinco cárteles de la droga en la capital: Los Beltrán Leyva, el Cártel del Golfo, Los Zetas, el Cártel de Sinaloa y células restantes de Los Caballeros Templarios.
Robos a mano armada, secuestros, robos de vehículos, fraudes con tarjetas de crédito eran parte de las principales preocupaciones que destacaba el gobierno de Estados Unidos.
La narrativa impulsada por el entonces Gobierno capitalino, que se extendió desde el 2015 hasta el final de su mandato, generó en su momento la indignación y rechazo de varios sectores, quienes reclamaban que no reconocer los problemas en la capital mexicana solo acrecentaba el problema.
A la par, crecían las denuncias ciudadanas, detenciones de capos, ejecuciones y actos violentos, como el “levantón” de 13 jóvenes del bar Heaven en 2013, el asesinato de cinco personas en la colonia Narvarte en 2015, entre otros, evidenciaban que los grupos del crimen organizado estaban presentes en la Ciudad de México.
Fue hasta que José Ramón Amieva, quien ocupó el cargo de Jefe de la Ciudad de México por al menos ocho meses en 2018, luego de que Miguel Ángel Mancera pidiera licencia para integrarse a la campaña presidencial de Por México al Frente, que reconoció que los grupos de narcomenudistas tenían potenciales alianzas con cárteles de la droga asentados en los estados de Jalisco, Morelos y Guerrero.
En lo que respecta a la gestión de Miguel Ángel Mancera, también existen señalamientos respecto al crecimiento descontrolado del sector inmobiliario en la Ciudad de México. Ernestina Godoy Ramos, actual candidata al Senado y la exfiscal General de Justicia de la capital que lideró la investigación que sacó a la luz la complicidad entre constructoras y autoridades en el desarrollo de proyectos inmobiliarios, afirmó en una entrevista en el programa de Los Periodistas el pasado 9 de mayo que el surgimiento del llamado “Cártel Inmobiliario” en la ciudad se debió en gran medida a la colaboración del exjefe de Gobierno con este grupo, conformado por destacados funcionarios panistas de la Alcaldía Benito Juárez.
Cuando se le preguntó sobre la responsabilidad de Miguel Ángel Mancera en este asunto, Godoy Ramos señaló un abandono significativo y una connivencia evidente. Esto refleja una situación preocupante en la que las autoridades electas para velar por el interés público parecían favorecer intereses privados en el sector inmobiliario.
Además, Godoy Ramos coincidió que desde que la Ciudad de México comenzó a elegir a sus gobernantes en 1997, ha sido gobernada principalmente por la izquierda, con la excepción de un periodo de seis años durante el cual Miguel Ángel Mancera estuvo en el poder. Durante este tiempo, según la exfiscal, no solo se deterioró la seguridad, sino que también se produjo un auge inmobiliario en colaboración con el grupo mencionado.
“En seis años se nos descompuso no solamente el tema de la seguridad, el boom inmobiliario se da en ese momento en connivencia con este grupo”, afirmó la exfiscal capitalina.
La investigación liderada por la Fiscalía capitalina bajo el mandato de Godoy Ramos sigue en curso y ha resultado en el procesamiento de al menos 30 funcionarios y exfuncionarios, incluyendo al exalcalde panista Christian Von Roehrich y a Nicias Aridjis, quien fuera director de Obras y Desarrollo Urbano de la Benito Juárez.
LA BAJA DE HOMICIDIOS
En cuanto a la administración de Claudia Sheinbaum Pardo, ésta arrancó con repunte en los homicidios dolosos y feminicidios, alcanzando la cifra de mil 411 en el año 2019, la más alta desde 1997. Sin embargo, a lo largo de su administración, se observó una tendencia a la baja, llegando a niveles comparables con los del inicio del siglo. En el año 2020, las carpetas de investigación por homicidio doloso y feminicidio disminuyeron a 1,206; en 2021 descendieron a 989, en 2022 a 784 y al momento de dejar el cargo en 2023, se situaron en 838.
En cuanto a los secuestros, desde el inicio de la administración se evidenció una disminución, ya que en 2019 los casos de plagio disminuyeron un 35.71 por ciento, registrando 180 carpetas en comparación con las 280 del año anterior. En 2020, esta tendencia continuó con otra reducción del 20 por ciento, llegando a un total de 68 casos. En 2021, se produjo otra disminución a un total de 48 secuestros, y en 2022 descendieron nuevamente a 27. En el año 2023, se registraron 29 carpetas de investigación por secuestro.
Sobre la presencia del crimen organizado en la capital, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) ha identificado al menos 13 grupos de delincuencia organizada que operan en la Ciudad de México, así como las principales rutas para el trasiego de droga y la presencia de “narcotienditas”, las cuales se ubican cerca de escuelas y estaciones de policía, lo cual, se reveló hasta el año 2022 cuando se dieron a conocer los documentos hackeados por Guacamaya Leaks al archivo de la Sedena. Con respecto al panorama delictivo en la capital del país, el Ejército ubicó que las bandas delictivas que operan en la capital, las principales rutas de trasiego de drogas y las zonas más peligrosas se concentran principalmente en tres de las 16 alcaldías: Cuauhtémoc, Iztapalapa y Gustavo A. Madero.
“La Unión Tepito”, “Fuerza Anti Unión”, “Cartel de Tláhuac”, “Los Rodolfos”, “Los Canchola”, “G.J.N.G.”, “Ronda 88”, “Güero Fresa”, “Los Molina” ,“Los Maceros”, “Los Tanzanios”, “El Maestrín” y “Juan Balta” son las principales bandas delictivas que operan en la Ciudad de México, según reportó el Ejército.
También identificó a los principales líderes de las bandas delictivas, de los cuales al menos cuatro ya han sido detenidos, Rafael Contreras Galindo “El Fantasma”, líder de la banda delictiva “El Güero Fresa”; Juan Baltazar “El Balta”, líder de la banda “Juan Balta”; Lenin Jonathan Canchola Martínez, líder de la banda “Los Canchola”, y César Rodríguez Morales “El Negro”, de “Los Rodolfos”. Además de Maximiliano López, líder de la banda “El Maestrín”, quien fue asesinado.
