Ciudad de México, 22 de diciembre (SinEmbargo).– Diputados y Senadores del Partido Acción Nacional (PAN) exigieron al Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera Espinosa, que "deje de darle vuelta al caso" del presunto tráfico de influencias del Jefe Delegacional de Iztapalapa, Jesús Valencia, e investigue todas las irregularidades que se "destaparon" a raíz del "borrachazo" del Delegado.
Los Senadores Mariana Gómez del Campo, Javier Lozano y Roberto Gil Zuarth, y el Diputado capitalino Fernando Rodríguez Doval no dudaron que exista un evidente conflicto de intereses por parte del Delegado Jesús Valencia, quien estrelló una camioneta de lujo, propiedad de la empresa Amexire S de RL que ofrece servicios a la demarcación, la cual pudo haberse beneficiado de la relación personal con el servidor público.
Los panistas exigieron que la Contraloría del Gobierno del Distrito Federal investigue los contratos que la empresa Amexire pudiera haber celebrado con el propio Gobierno central y con otras delegaciones capitalinas.
“Nos parece también escandaloso e indignante el silencio del Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, teniendo en cuanta además que las delegaciones no tienen autonomía presupuestaria, por lo tanto los contratos con esta empresa se realizaron desde el gobierno central, por lo tanto Mancera no puede permanecer callado”, sostuvo el Diputado capitalino Fernando Rodríguez Doval.
¿CONTRATOS EN MÁS DELEGACIONES?
En el marco de la primera reunión de la Comisión Permanente, los panistas entre los que se encontraba los Senadores Mariana Gómez del Campo, Javier Lozano y Roberto Gil Zuarth, demandaron que se abra la investigación para conocer las redes de complicidad que pudieran haberse gestado desde el Gobierno del Distrito Federal.
“Le vamos a pedir concretamente al Jefe de Gobierno y haremos las solicitudes de información que así convengan, para investigar si esta empresa está trabajando en las demás delegaciones o en el Gobierno del Distrito Federal. No nos parecería extraño encontrar que no nada más son estos dos contratos sino que hay una relación más intensa profunda con el gobierno central y a partir de allí tomaremos la definiciones legales”, adelantó la también capitalina Mariana Gómez del Campo.
Acción Nacional dijo que no se conformará con la renuncia de Jesús Valencia, pues sus legisladores sostuvieron que se trata de un caso de probable conflicto de interés que debe ser investigado y sancionado.
“Nosotros no vamos a permitir que la renuncia del Delegado Valencia eluda o evada la responsabilidad que tiene Miguel Ángel Mancera en este caso. Es absolutamente claro que el modelo de gasto, asignación de obras, la asignación de los recursos públicos se hace a través de las oficinas centrales del Gobierno del Distrito Federal”, detalló el Senador Roberto Gil Zuarth.
Los panistas adelantaron que esperaran ver cómo se desarrolla la investigación de la Contraloría capitalina, pero advirtieron que en caso de que se intente “tapar” el caso, buscarán crear una comisión investigadora en cualquiera de las dos cámaras, para evitar que el caso se quede en el olvido.
“Que el Jefe de Gobierno asuma su responsabilidad política frente a Jesús Valencia, pedirle a él [el Delegado] que actúe con honestidad y rectitud es como pedirle peras al olmo, pero sí esperamos que quienes lo rodean y lo han apapachado en tantas cosas, también hoy den la cara”, explicó el Senador Javier Lozano.
La Contraloría General del Distrito Federal investiga al Jefe Delegacional de Iztapalapa, Jesús Salvador Valencia Guzmán, por los contratos firmados entre su administración y la empresa Amexire, de la cual el Delegado dice no recordar su nombre.
La Contraloría capitalina indagará si existe un presunto conflicto de intereses entre Valencia Guzmán y Amexire, de quien se dio a conocer tiene contratos por al menos 48 millones de pesos con la delegación Iztapalapa, luego de que el pasado miércoles el Delegado impactara una camioneta propiedad de esa empresa contra un auto estacionado al sur de la Ciudad de México.
Este fin de semana Valencia aseguró que renunciará “inmediatamente” a su cargo si la Contraloría de la demarcación determina que ha cometido una falta. El Delegado escribió la mañana del sábado en su cuenta de Twitter [@Valencia_Guzman]: “Como es de conocimiento público la Contraloría iniciará una actuación de oficio si su servidor cometido una falta renunciaré inmediatamente".
A pesar de que el viernes pasado se dio a conocer que la camioneta Jeep Cherokee 2015 en la que se accidentó la madrugada del pasado miércoles el Jefe Delegacional es propiedad de la empresa Amexire y que el mismo Valencia confirmó que pertenecía a uno de sus amigos contratista de la empresa, esta mañana el diario Reforma difunde una breve entrevista en la que el Delegado afirma no recordar su nombre.
"La empresa a la que se ha referido [...] ni el nombre me sé bien. Sí es constructora de la delegación: eso sí lo sé [...] de cuánto es el contrato, cuándo se lo dimos, eso sí son documentos que debo tener el documento en la mano, que no lo tengo (sic)", dijo el funcionario al diario.
SALUDAN CON LA IZQUIERDA Y COBRAN CON LA DERECHA
El Senador panista Javier Lozano advirtió que su partido no permitirá que el caso se quede como un escándalo mediático más, sino que exigirán una investigación exhaustiva para desenmascarar la “red de complicidades” y la “hipocresía” de los gobernantes de izquierda en al capital.
“Imagínense nada más del tipo de hipocresía que estamos viendo, esta supuesta izquierda progresista que saluda a la gente con la izquierda, pero cobra con la mano derecha”, dijo el legislador por Puebla.
El Senador Lozano recordó que hasta el momento el Delegado Valencia no ha dado una explicación puntual sobre qué es lo que pasó en el presunto “borrachazo”, en que él quiere disfrazar como un accidente por el influjo de un medicamento, así cómo detalles de los contratos celebrados con la empresa antes citada.
“Lo más grave es que estos hipócritas que se dicen progresistas, que se dicen cercanos a la gente, en la delegación más pobre [del DF] vivan en el Pedregal de San Ángel, en una casa que dice que vale nueve millones de pesos -yo no conozco una casa de esas características en San Ángel que cueste esa cantidad-“, puntualizó.
Este lunes, la prensa capitalina informó que la Contraloría del DF solicitará a la delegación una copia de los tres contratos que firmó con Amexire, especialmente con el que se le concedió la construcción de viviendas con recursos del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social (FAIS), cuyo dinero proviene de la federación, el cual se signó por un monto menor de 19 millones de pesos y un máximo de 48 millones de pesos.
La Contraloría dio a conocer que verificará que no se haya violado el artículo 39 de la Ley de Adquisiciones del Distrito Federal, principalmente en el aspecto de no restringir la participación de otras instancias en el proceso de licitación, con lo que se determinaría si hubo o no alguna intención directa para beneficiar a Amexire.
También informó que revisará los otros dos contratos que firmaron con esta compañía, que suman 350 mil pesos, para proveer a la delegación de impresoras y diversos artículos de computación.
Antes de ser Delegado, Valencia Guzmán fue policía en el Centro Histórico y funcionario en la Central de Abasto. Con la llegada de Ebrard Casaubón al GDF, Valencia se convirtió en director del DIF-DF, cargo que según otros perredistas ocupó para promover a precandidatos del grupo Izquierda Unida en Iztapalapa.
Fue también coordinador de la campaña de Ana Gabriela Guevara en la Delegación Miguel Hidalgo, pero también fracasó. En 2009, por segunda ocasión, buscó sin éxito convertirse en Diputado local y tuvo que conformarse con la Secretaría General del PRD-DF, cargo que obtuvo gracias a una nueva intervención de Marcelo Ebrard, y hasta quiso la dirigencia nacional del PRD.
Su pareja, Margarita Darlene Rojas Olvera, asumió la Presidencia de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje del Distrito Federal, con el aval del Presidente Enrique Peña Nieto.