Ciudad de México, 3 de diciembre (SinEmbargo/ElDiario).– Una pareja que permaneció encarcelada más de un año acusada de portación de droga y violación a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos recibió una sentencia absolutoria.
Luego de dos peritajes, Vicente Martínez Jiménez y su esposa Silvia Hidalgo Castillo pudieron probar que la mariguana les fue “sembrada” por agentes de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM) de Ciudad Juárez, Chihuahua, entonces a cargo de Julián Leyzaola Pérez.
En uno de los estudios se estableció que el estupefaciente que le encontraron a Vicente Martínez Jiménez, y que se probó fue sembrado en su vehículo por agentes de la SSPM, era parte de un cargamento que días antes de su detención fue abandonado en un automóvil.
En el segundo se documentaron los destrozos que los uniformados causaron en la casa familiar de donde fue sacada Silvia Hidalgo Castillo, informó el abogado de ambos exonerados, Óscar Orozco Alemán.
De acuerdo con la información que la Policía Municipal dio a conocer, en septiembre de 2013 la pareja circulaba a bordo de un automóvil Honda Accord blanco, modelo 1990 y llevaba una escopeta calibre .12 con dos cartuchos útiles, así como un revólver .38, una escuadra .9 milímetros y una pistola de postas.
Además se les acusó de tener en su poder tres cartuchos de calibre .12; otras 32 balas de calibre .38; 20 más de 7.62 por 39 milímetros; dos de .357 y 10 de calibre .45.
También de poseer un envoltorio con cocaína y 122 paquetes envueltos en cinta canela conteniendo mariguana, en la cajuela del automotor.
El litigante explicó que todo fue falso ya que Vicente, de 33 años, fue detenido en el cruce de Libramiento Independencia y Talamás Camandari, Ciudad Juárez, a bordo de su vehículo y únicamente tenía en su poder una dosis de cocaína porque es consumidor. Sin embargo fue sometido y obligado a proporcionar sus datos personales.
Los agentes irrumpieron en la casa del matrimonio. De ahí sacaron a Silvia, de 32 años, junto con su hija recién nacida y otro niño, afirmó el abogado.
“Reventaron la chapa de un mueble donde guardaban el dinero de la venta de una casa. Se robaron unos 20 mil pesos y reportaron otra cantidad similar para decir que Vicente Martínez les había ofrecido dinero para que lo dejaran en libertad”, dijo.
Añadió que “también quebraron un vidrio, voltearon la casa al revés, dejaron todo revuelto, trastes tirados por todos lados. A Silvia la sacaron junto con sus hijos, todos en calidad de detenidos”.
Orozco Alemán indicó que como pruebas al juez Noveno de Distrito se le presentaron dos peritajes elaborados sobre la droga, uno efectuado por un perito de la Procuraduría General de la República (PGR) y otro de un particular.
Los estudios pudieron determinar que la mariguana era parte de un cargamento localizado en la cajuela de un automotor Volkswagen abandonado al suroriente de la ciudad unos días.
En el segundo estudio se llamó a los policías municipales para tomarles sus huellas dactilares y compararlas con las recuperadas en la casa.
Al cotejarlas no se estableció a quién pertenecían las huellas localizadas en el domicilio, pero se pudo probar que los elementos irrumpieron en la vivienda sin orden de cateo, indicó el abogado.
Al emitir la sentencia absolutoria la semana pasada, se determinó que había serias contradicciones en el parte informativo.
Únicamente Silvia, quien inicialmente fue recluida en un penal de Tepic, Nayarit, recobró su libertad, pues Vicente está acusado en el fuero común del delito de promoción de conductas ilícitas por el presunto ofrecimiento de dinero a los elementos.