Ciudad de México, 27 de noviembre (SinEmbargo).– La hormona conocida como la hormona del amor que producen los humanos también la segregan los perros y los gatos. ¿Cuándo ocurre esto? Los perros liberan esta hormona cuando son acariciados por los humanos, e incluso cuando llegan a sostener miradas, como si se enamoraran de las personas con sólo verlos.
Por eso dicen que los perros aman incondicionalmente a sus dueños, porque está comprobado que desarrollan la misma hormona que hace a los humanos sentirse felices y complacidos.
En realidad, la buena relación que los humanos tienen con sus mascotas ya sean gatos o perros, se debe a esta hormona ya que también sirve para la sociabilidad de un perro con otro, o con los gatos, según un estudio realizado por la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos de América.
Investigadores estudiaron a un grupo de 16 perros, a unos les acercaron una solución con esta sustancia a sus hocicos y otros fueron bañados con una solución salina, posteriormente fueron enviados con sus dueños.
Los dueños no podían acariciar a sus perros para que se pudiera comprobar los efectos de la oxitocina de manera aislada y en efecto: los canes olisquearon, lamieron y se acercaron de manera más evidente con los humanos, además que también los miraron de forma más fija a los ojos.
Sobre esto Paul Zak, autor del libro "The Moral Molecule: The Source of Love and Prosperity" apuntó en el diario The Atlantic que la única vez que vio un aumento igual en la oxitocina de los seres humanos, es cuando ellos ven a un ser querido, o de quien se sienten románticamente atraídos o cuando se muestra una gran bondad.
Otro estudio publicado por el Journal of Comparative Psychology explica que el perro siente un apego real por lo humanos, a veces es más intenso que el que sienten por otros mamíferos cercanos. "El amor del perro hacia los humanos que cuidan de él es más intenso que hacia los demás cachorros que nacieron junto a él", explica la investigación que fue encabezada por el neurólogo Michael Hennessey.
"Ofrecemos pruebas de que en el perro doméstico la oxitocina aumenta la motivación social para aproximarse y afiliarse con sus congéneres y compañeros humanos, lo cual constituye la base de una formación de cualquier vínculo social estable", señala la investigación.
También, los niveles de oxitocina endógena aumentaron luego de que los perros se afiliaran con otros congéneres, lo que indicó la estimulación de la hormona durante interacciones sociales. El estudio también revela el papel importante que juega la oxitocina en la expresión de sociabilidad en los mamíferos.
Y es que todos los mamíferos tienen un "centro de placer" en sus cerebros que es estimulado por la dopamina, el químico que regula los sentimientos de felicidad.
Una forma en que los gatos muestran señales de cariño es cuando presionan con sus patitas sobre superficies del cuerpo de las personas o superficies blandas, en general; esto significa que se sienten cómodos y felices.