Ciudad de México, 30 de octubre (SinEmbargo).– Si la violencia contra el narco en la Presidencia de Felipe Calderón Hinojosa (2006-2012) no ahuyentó a los capitales, la crisis detonada en Guerrero por la desaparición de 43 normalistas y que ha puesto bajo la lupa el gobierno mexicano tanto al interior del país como en el extrajero, tampoco lo hará, aseguró Alberto Jones Tamayo, director general de Moody’s México.
En entrevista con SinEmbargo, el director de la agencia calificadora de riesgo opinó que es un exceso decir que en México no existe el Estado de derecho tal y como lo han afirmado algunos sectores y publicaciones extranjeras, sin embargo, sí juzgó relevante que los inversionistas consideren que la violencia en el país ya llegó a unos niveles "muy elevados" o que pongan en peligro sus capitales, de tal manera que los obligue a contraerlos o suspenderlos.
"Cuando tienes países con una inflación estable o con poca variación es porque la fortaleza institucional permite que esto se dé, particularmente de las autoridades monetarias y fiscales de un país. Entonces, en realidad, decir que no hay un Estado de Derecho en México es un exceso", opinó.
Advirtió que este año la economía mexicana podría alcanzar niveles de crecimiento de entre 2.3 y 2.2 por ciento, superior al 1.1 por ciento del año pasado, pero por debajo del estimado de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) de 2.7, fijado al último ajuste de agosto pasado.
A pesar de la depreciación de las últimas semanas, el peso se mantiene fuerte en comparación con monedas de economía similares como la de Brasil, cuya moneda, el real, se ha devaluado 30 por ciento, las monedas chilena y colombiana 12 por ciento, mientras que el euro se ha depreciado 10 por ciento.
A mediados de octubre, el peso mexicano se había depreciado 6.26 por ciento en su intercambio en operaciones interbancarias. El peso alcanzó a sus niveles más bajos frente al dólar al llegar a niveles de 2012, y en el caso de la mezcla mexicana de petróleo rebasó el límite permitido, un precio inferior a 75 dólares.
-¿Qué tan factible es que la volatilidad tanto en el peso como en el precio del petróleo siga aumentando?
-Los mercados recientemente han conducido a que los precios del petróleo estén bajando. Ahora, la mezcla combinada está como en 77 dólares entonces más que volatilidad es una reciente caída. Esto está asociado con la expectativa de un menor crecimiento a nivel global con la excepción de los Estados Unidos. Entonces no hay razón para pensar que vaya a ser pronto cuando estas condiciones de oferta vayan a cambiar.
-¿Puede existir algún otro factor de volatilidad además del precio de la mezcla y peso mexicano para el último semestre?
-Naturalmente las incertidumbre asociadas con los temas geopolíticos en diferentes partes del mundo, particularmente en Ucrania o Medio Oriente, esto ha generado un nivel elevado de incertidumbre en muchos participantes del mercado. Fuera de eso, me parece que no hay otros elementos que pudieran estar generando incertidumbre. El hecho que los mercados accionarios a nivel mundial estuvieran con un nivel elevado de precios, ya están llevando a cabo sus ajustes.
-¿Qué tan factible es para México alcanzar el 2.7 de crecimiento estimado para este año?
-Me parece que el crecimiento para México está más vinculado con el crecimiento de la economía de los Estados Unidos que terminará bien a niveles de 2.4. Y la economía podría alcanzar niveles de 2.3 o de 2.2 por ciento.
-Para Moody’s, como empresa calificadora, ¿qué tanto influye el hecho que varios sectores señalen que no existe un Estado de Derecho en México?
-A pesar de que no es una categoría que nosotros medimos de manera expresa, por supuesto consideramos que en México la fortaleza institucional en términos comparativos, pues es mediana, o media alta, mejor dicho. Y ello basado en indicadores del Estado de Derecho que mide el Banco Mundial, si bien no es alto el de México, es más alto que muchos otros lugares del mundo. Otros aspectos que tienen que ver con la credibilidad y efectividad de las políticas esto se puede ver especialmente en cuento a los niveles de inflación y volatilidad en la inflación. Cuando tienes países que tienen una inflación estable o con poca variación es porque la fortaleza institucional permite que esto se dé, particularmente de las autoridades monetarias y fiscales de un país. Entonces en realidad, decir que no hay un Estado de Derecho en México es un exceso.
-¿La violencia podría ser considerada como un factor de riesgo? ¿podrían incluso compararse los niveles de violencia actuales con los que se tenían durante la guerra contra el narcotráfico de Felipe Calderón?
No en este momento, sin embargo lo que pasa es que lo que puede ser relevante desde el punto de vista de riesgo crediticio es que estos niveles de violencia sean considerados especialmente por los inversionistas como muy elevados o que pongan en peligro sus inversiones de tal manera que los obligue a contraerlas o suspenderlas. Y naturalmente ninguna de las dos cosas ocurrió durante el gobierno del licenciado Calderón ni está ocurriendo ahora. Son expresiones de violencia puntual, en zonas muy localizadas como sucede en muchas otras partes del mundo.
-En cuanto al próximo año, desde su perspectiva ¿la economía estará un poco más estable?
Más que estable, lo importante es que crezca más. En todo caso es de esperarse que el crecimiento económico sea un poco mayor para el año próximo para nuestro país. Por un lado por la ayuda de las reformas y por otro lado, la consolidación del crecimiento de Estados Unidos.
-¿Qué calificación tiene México frente a otros países de Latinoamérica, incluso otras potencias, como puede ser en el caso de China, que ha presentado una baja en su economía?
-La calificación de México es A3 y es la segunda más alta de América Latina. Para dar una idea está dos niveles arriba de la de Brasil y por mucho, con excepción de Chile que tiene la calificación de Aa3, México tiene la mejor calificación por mucho. Las calificaciones hablan del riesgo de crédito de un país que involucra su crecimiento económico. Por ejemplo, China tiene la misma calificación que Chile, y en algunos sentidos, los bonos de ese país se venden a precios que se parecen más a la calificación de México.