Ciudad de México, 02 de noviembre (SinEmbargo).–México tardará un máximo de dos décadas en sacar a su población de la pobreza, pues la actual coyuntura, en la que se observan conflictos sociales, injusticia y desigualdad, mantiene al país con un alto número de pobres [más de 53 millones de personas, según cifras oficiales], estimó el emprendedor alemán Hans Reitz, director de The Grameen Creative Lab, empresa que impulsa la inversión en negocios sociales en el mundo.
A su juicio, las empresas deberán jugar un papel importante en el combate a la pobreza, en la medida en que asuman la importancia de convertirse en socialmente responsables, para que así asuman tareas que van más allá de su mera actividad comercial.
"Si miramos a nuestro alrededor hay muchísimos problemas sociales, hay injusticia, desigualdad. La única forma de encontrar una salida a este tipo de situaciones es actuar con responsabilidad social pero hacerlo realmente motivados para hacer este tipo de trabajo, realizarlo felices, con gusto, porque es la única salida posible", dijo.
Reitz, especialista y emprendedor de negocios sociales, es actualmente el director de The Grameen Creative Lab, empresa fundada por Hans y el premio Nobel de la Paz Muhammad Yunus, creador del concepto de microcréditos, y busca que el tema de las empresas socialmente responsables sea incluido en los programas académicos de universidades para impulsar con mayor fuerza este tipo de iniciativas.
Durante una breve visita a México, Hans Reitz explicó las características que componen a una empresa socialmente responsable: ser sustentable, que el objetivo sea luchar contra la pobreza, tener consciencia ambiental, con buenas condiciones para realizar el trabajo y finalmente, hacerlo con alegría. En entrevista para SinEmbargo, ahondó en el tema y aseguró que hasta el momento no conoce una empresa que sea, en su totalidad, socialmente responsable.
— ¿En qué consiste en la actualidad un negocio socialmente responsable?
— Los negocios en general deberían ser socialmente responsables, de lo contrario vamos a seguir enfrentando los graves problemas que vivimos actualmente, como por ejemplo la tensión social que existe ahora. Ya no es una opción no ser socialmente responsable, es la única solución a muchos de nuestros problemas.
— ¿Hay ejemplos de empresas que han logrado ser socialmente responsables?
— No he encontrado alguna que lo sea. Sé de empresas que están tratando de hacer mejor las cosas, pero no me han convencido por completo, es algo que aún tengo que encontrar.
— ¿Qué se necesitaría para fomentarlas?
— Las empresas tienen que tener esta compasión y empatía completa sobre lo que le sucede a las demás personas y además ser honestos en conocer las capacidades que tenemos para ayudar a los demás.
— ¿Quiénes son los más beneficiados con este tipo de negocios?
— Nosotros estamos promoviendo una especie de empresas sociales y en este marco, el principal beneficio es que se le da una respuesta a una necesidad urgente.
Los beneficiados son aquellas personas que están sufriendo y carecen de estas necesidades urgentes. Se resuelven los problemas que deciden atacarse.
Por ejemplo, una madre soltera, si tú las ayudas, ellas serán las que gocen de mayores beneficios, así será si trabajas con iniciativas de desempleo y juventud, seguridad en las colonias. Pero lo que sí se necesita es estar 100 por ciento concentrado en un solo objetivo.
— ¿Qué podría comentarnos del caso de México?
Yo creo en lo que está sucediendo en México con los negocios sociales y modernos, las redes sociales y con un Presidente que es bastante joven, pero soy consciente de que la verdadera necesidad es salir de la pobreza; estimo que a México le tomará de 15 o 20 años acabar con ese problema
Si miramos a nuestro alrededor hay muchísimos problemas sociales, hay injusticia, desigualdad. La única de encontrar una salida a este tipo de situaciones es actuar con responsabilidad social pero hacerlo realmente motivados para hacer este tipo de trabajo, realizarlo felices, con gusto, porque es la única salida posible.
— ¿Los bloques económicos están realmente interesados en impulsar esta tendencia?
Sí, bastante, pero les resulta difícil ser socialmente responsables. Están en una zona de confort y esa dificultad para salir de ella es equiparable a la de una persona que quiere dejar de fumar; la persona es consciente, sabe que quiere dejar de fumar y que el camino será largo.
Las empresas sí quieren hacer algo, sí son conscientes de que se debe hacer algo, pero no saben qué hacer, no saben cómo cambiar, es muy difícil para ellos.