Tokio, 2 Oct (Notimex).- Un error de negociación, por un valor superior a los 600 mil millones de dólares (mmdd), en el mercado de valores de Tokio, revive hoy en Japón las preocupaciones sobre la responsabilidad de los operadores bursátiles.
La transacción errónea, equivocaciones humanas conocidas en los mercados como “fat finger”, ocurrió la víspera y aunque fue cancelada a tiempo, el monto en juego comprometía un volumen equivalente a la economía de Suiza.
La Asociación de Corredores de Valores de Japón (JSDA, por sus siglas en inglés) confirmó el error cometido por un operador que lanzó órdenes de compra por 67 mil millones de yenes (unos 617 mmdd) sobre las acciones de hasta 42 de las principales empresas del país.
Aunque fue cancelada con rapidez antes de ser ejecutada, la operación -que pudo haber causado enormes pérdidas para quien las colocó- afectó grandes volúmenes de acciones de compañías como Toyota Motors, Honda, Nomura, Canon y Sony.
El diario local The Japan Times refirió que algunas de las ofertas eran muy llamativas, como la lanzada sobre mil 960 millones de títulos de Toyota, equivalentes al 57 por ciento del capital del mayor fabricante de coches del mundo.
El incidente revivió las preocupaciones sobre la responsabilidad de los corredores en los mercados, pues el “fat finger” puso de relieve que una potencial catástrofe podría ocurrir en cualquier momento si se cometen errores al comprar o vender valores.
Knight Capital Group Inc., que fue uno de los mayores comerciantes de acciones estadunidenses, casi quedó en bancarrota en agosto de 2012 después de que sus ordenadores lanzaron pedidos erróneos que no pudo cancelar y perdió 460 millones de dólares.
El caso de Knight Capital, que finalmente fue adquirida por Getco LLC para formar KCG Holdings en 2013, llevó a los reguladores de Estados Unidos a revisar durante un año los procedimientos utilizados por los agentes de valores a fin de evitar errores.
Aunque la magnitud de las órdenes lanzadas el miércoles en Japón pudo evitarse, los ejecutivos de las empresas comerciales expresaron su preocupación por la forma en que llegaron al mercado.
“No hay duda que fue un ‘fat finger’ aquí, pero reabre la cuestión de la responsabilidad porque están en juego millones de dólares”, sostuvo Gavin Parry, director general de la corredora con sede en Hong Kong, Parry International Trading Ltd.
Parry especuló que el error refleja la entrada de datos defectuosos y señaló que existe la probabilidad de que el corredor “confundió el número de acciones por el valor de las acciones”.
JSDA es una organización de autorregulación para casas de bolsa e instituciones financieras, cuyas funciones incluyen la creación de normas, la inspección y la compilación de los datos de las transacciones.
Los corredores que se rigen por la JSDA deben confirmar el contenido de la orden de un cliente y que esa orden sea apropiada sobre la base de los activos de éste y otros factores.
Los índices japoneses cayeron el miércoles después del error, pero la presión continuó en esta jornada ya que la Bolsa de Tokio cerró sus operaciones con una pérdida de 2.61 por ciento.