Los trabajadores mexicanos son los peor pagados de la OCDE, dice informe; jóvenes y mujeres son los más afectados

03/09/2014 - 12:42 pm

Ciudad de México, 3 de septiembre (SinEmbargo).- La calidad del ingreso en México es la menor de todos los 34 países de la Organización para el Crecimiento y Desarrollo Económicos (OCDE); las condiciones de empleo para mujeres y jóvenes siguen siendo también de lo más precarias determinó este organismo en su reporte "Perspectivas del Empleo 2014".

“México tiene un promedio de ingresos relativamente bajo y es el tercero en términos de desigualdad en la distribución de ingresos. Por otro lado, la calidad del ambiente de trabajo es comparable con la de otros países de la OCDE: los trabajadores mexicanos registran buen acceso a recursos y apoyo para llevar a cabo sus tareas aun cuando enfrentan relativamente altos niveles de demanda de trabajo”, señaló el documento.

El salario mínimo ha perdido 71 por ciento de su poder adquisitivo desde 1976, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Entre los miembros de la OCDE, México cuenta con el menor salario mínimo por hora, incluso comparado con países con ingresos similares per cápita como Turquía. El salario promedio en México es de alrededor de 5 mil 400 pesos al mes y se ha quedado estancado en términos reales desde 1992.

Actualmente, según el Inegi, unos 6.5 millones de mexicanos, o 13 por ciento de la población que trabaja, gana el salario mínimo. México es el único país en América Latina cuyo salario mínimo se encuentra por debajo del umbral de pobreza.

La OCDE destaca que a pesar de que México es uno de los países con más alto crecimiento dentro de las más de 30 economías que pertenecen a la organización (3.7 por ciento) “muchos jóvenes y mujeres están excluidos de la fuerza laboral. Mientras que, en promedio, en la organización el 62.7 por ciento de las mujeres están empleadas o 0.8 buscando trabajo, en México este porcentaje alcanza el 47.3 por ciento. Casi el 40 por ciento de las mujeres

El informe destacó que para erradicar la situación, se requiere de mejorar la calidad de los puestos de trabajo y reducir la informalidad, pues casi 60 por ciento de los empleos en México se encuentran en el sector informal.

El estudio se realizó basándose en tres dimensiones: calidad del ingreso, seguridad del puesto de trabajo y calidad del ambiente de trabajo (con cifras correspondientes a 2010).

“Es más, muchos de los trabajos creados en los años que siguieron la crisis financiera global se generaron en el sector informal y las cifras de crecimiento del empleo”; destacó.

La OCDE no pasa por alto el hecho de que la creación de empleos en México, se ha dado principalmente en el sector informal. “En este sentido, dualidades en el mercado laboral, como las que tienen lugar en México, afectan negativamente la eficiencia y la equidad de la economía en su conjunto. Los trabajadores en el sector informal son sujeto de mayor inseguridad; la informalidad limita las economías de escala y los empleadores en el sector informal dedican menos recursos a sus trabajadores, reduciendo el crecimiento de la productividad”.

Recomienda no medir el rendimiento laboral sólo con base en el número de puestos de trabajo disponibles o en el número de personas que participan en la fuerza de trabajo. “El desafío para el mercado laboral en México involucra mejorar la calidad de los puestos de trabajo y reducir la informalidad”.

LOS INCENTIVOS

Con relación a la discusión que sobre el salario mínimo ha comenzado en México, la OCDE aplaude los esfuerzos de los gobiernos para garantizar el bienestar de los ciudadanos y confía que el resultado de estos análisis permitan un salario en el nivel adecuado, apuntalen el crecimiento económico y la creación de empleos formales.

"La instrumentación, recientemente anunciada, de un seguro de desempleo a nivel nacional puede reducir los incentivos de los trabajadores a entrar al mercado informal y mejorar el índice de calidad del ingreso mencionado anteriormente. Con el tiempo será importante acompañar el apoyo monetario con servicios de empleo y requisitos de búsqueda de empleo, identificando si quienes reciben los beneficios de desempleo complementan el seguro de desempleo con un trabajo informal", destaca.

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