Laura se plantea preguntas complejas en torno a la transformación de Luis Barragán, que termina por resolver brillantemente. Sin embargo, antes de avanzar en ellas, Laura nos sitúa frente a lo sublime de la obra del arquitecto, su orientalismo, el carácter de su encrucijada arquitectónica, que resuelve de manera moderna en una síntesis del México vernáculo, de la atmósfera del Magreb y del paisaje florido de Andalucía.
Por Cristina Castellano
Ciudad de México, 11 de diciembre (SinEmbargo).- ¿Alguna vez han pensado que leer un libro es parecido a estar en compañía de un amante? Es decir, nos encontramos tête à tête, a solas, en intimidad y complicidad frente al Otro: frente al libro, al autor, frente a una voz que nos habla y nos seduce. Esto mismo sucede cuando abrimos 525 gramos. Jill Magid: la transformación de Luis Barragán, el libro más reciente de Laura Ayala.
Leerlo nos conmueve por la belleza de su presentación y por la inteligencia del texto escrito que emana por todas partes; el cuidado de la edición es exquisita, como todo lo que produce Artes de México, y la coherencia y justeza del trabajo de escritura y de investigación de la autora es excepcional.
De esta forma, la primera experiencia del lector es sensorial, desde que lo tenemos en las manos, al abrir el libro, sucede la primera caricia visual que nos invita al tacto, al olfato; la perfección de su terminado nos admira porque, desde su primera página, se nos conduce de inmediato a la sorpresa del rosa Barragán. Todavía no empezamos a leerlo, pero el entusiasmo y el placer ya se hicieron presentes a través de sus colores y de la sofisticación del cuidado editorial. Y es que la exigencia en calidad y el glamour de las ediciones de Artes de México es su sello distintivo, sostenida por el trabajo de mucha gente. Sin duda Artes de México es un referente patrimonial del arte y la cultura mexicana.
Laura se plantea preguntas complejas en torno a la transformación de Luis Barragán, que termina por resolver brillantemente. Sin embargo, antes de avanzar en ellas, Laura nos sitúa frente a lo sublime de la obra del arquitecto, su orientalismo, el carácter de su encrucijada arquitectónica, que resuelve de manera moderna en una síntesis del México vernáculo, de la atmósfera del Magreb y del paisaje florido de Andalucía. Con este perfume la autora nos introduce poco a poco al complejo laberinto de la obra de Jill Magid, así como de su exposición Una carta siempre llega a su destino, los archivos de Luis Barragán producida por el Museo Universitario de Arte Contemporáneo de la UNAM.
Uno de los aspectos que más me gusta del libro es su equilibrio, la justeza con la que se aproxima a un fenómeno controversial, la manera en la que da voz a los dos artistas, defendiendo su militante amor por el arte moderno y por el contemporáneo.
Laura defiende cada uno de los poros de las obras, las contempla, las cuestiona, se acerca y se distancia para señalarles al mismo tiempo sus límites. No queda seducida ni hipnotizada por la astucia de Jill Magid, ni tampoco atrapada en los entrecejos del arte contemporáneo. Sin embargo Laura Ayala es una experta del arte contemporáneo, conoce sus lenguajes, sus sutilezas y sus trampas, y en nombre del arte y de la vida lo defiende pero también lo desnuda, sin complacencias ni aplausos añadidos pero tampoco con celos de críticas emocionales.
Como nos lo enseña Paz en los Privilegios de la vista: “La obra de arte es siempre infiel a su creador porque dice algo distinto a lo que se propuso el artista, porque el arte es un más allá, dice algo más y casi siempre algo distinto a lo que el artista quiso decir”. En este libro, Laura Ayala nos descifra ese “no decir”, nos traduce el lenguaje de Magid y nos saca de los callejones sin salida en los que nos introducen, muchas veces, el arte contemporáneo y los escándalos que éste produce.
El libro de Laura debe leerse para conocer el complejo problema de la transformación de los restos del arquitecto Barragán en diamante, pero también para comprender el drama que encierra la obra y para saber que existen instituciones, tanto críticas como audaces, que representan la cultura contemporánea del México actual, de la cual Laura Ayala es juez y también parte.
Adquiere el libro a través de la página de la editorial Artes de México www.artesdemexico.com