“Es hora de frenar la cultura de la violencia y la impunidad”, indicó en un comunicado Jorge Canahuati, presidente de la SIP.
Miami, 10 nov (EFE).- La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) expresó este martes su “profunda condena y consternación” por el asesinato del periodista Israel Vázquez el pasado lunes en México mientras trabajaba en una cobertura, “la décima víctima fatal de la violencia contra la prensa” este año en ese país.
“Es hora de frenar la cultura de la violencia y la impunidad”, indicó en un comunicado Jorge Canahuati, presidente de la SIP.
Vázquez trabajaba desde hace tres años en el medio digital El Salmantino en el céntrico estado de Guanajuato, donde cubría “la fuente policiaca y otros asuntos de interés local”, señaló la SIP.
De acuerdo con la organización regional, alrededor de las 7 de la mañana del 9 de noviembre, el periodista cubría información sobre el hallazgo de restos humanos en un barrio de la ciudad de Salamanca cuando fue atacado a balazos por sujetos que se acercaron en un vehículo.
Fue traslado a un hospital, donde luego falleció a los 33 años de edad, añadió.
El presidente de la SIP se sumó al pedido de los colegas de El Salmantino, que exigieron “a todas las autoridades locales, estatales y nacionales” el esclarecimiento inmediato del crimen.
Canahuati, también presidente de Grupo Opsa, en San Pedro Sula, Honduras, aseveró que “es indignante que sigan asesinando en México a periodistas, los que son revictimizados junto a sus seres queridos por la falta de justicia”.
Carlos Jornet, presidente de la Comisión de Libertadad de Prensa e Información de la SIP y director del diario La Voz del Interior, de Córdoba, Argentina, agregó que “a la violencia y la impunidad se suma la reciente decisión del Estado de recortar fondos destinados al Mecanismo de Protección para Defensores de Derechos Humanos y Periodistas”.
Esto “aumenta el riesgo que enfrentan muchos comunicadores, principalmente en el interior del país (México)”, apuntó.
La organización instó al Estado federal mexicano a involucrarse y obtener resultados inmediatos para frenar la violencia en “uno de los países más peligrosos del mundo para el ejercicio del periodismo”.
En 2020 también fueron asesinados en México los periodistas Arturo Alba Medina, en Chihuahua; Julio Valdivia Rodríguez y María Elena Ferral, en Veracruz, y Pablo Morrugares y Víctor Fernando Álvarez Chávez, en Guerrero.
Igualmente, indica el comunicado de la SIP, fueron asesinados los comunicadores José Castillo Osuna y Jorge Armenta, en Sonora, además de Fidel Ávila Gómez, en Michoacán, y Álvaro Ruiz, en Chiapas.
