Chávez detalló que cuando intentó suicidarse, afortunadamente, “la pistola no disparó”, y que cuando lo hizo, el balazo “salió para otro lado”.
Ciudad de México, 11 de septiembre (RT).- La leyenda del boxeo mexicano Julio César Chávez reveló recientemente detalles sobre los problemas que vivió por su adicción al alcohol y las drogas.
“El César” del boxeo explicó que el dinero y el éxito le llevó a “perderle el sentido a la vida”. “Eso fue lo que me llevó a consumir drogas, me sentía muy triste y muy solo a pesar de estar rodeado de muchísima gente”, afirmó el exdeportista, de 57 años, en una entrevista al programa Súper Deportivo Radio de Radio Villa Trinidad, agregando que “tocó fondo” cuando quiso suicidarse.
En aquel momento, empezó a “vomitar sangre” y a “perder todo” lo que había ganado, afirmó. “Me demandó mi esposa por alcohólico y porque la trataba mal. […] Me demandó el Gobierno de México. Sentí que se venía el mundo encima, entonces opté por querer quitarme la vida”, recordó.
Julio César Chávez ?en?️ @SuperDeporRadio
“Me refugié en el alcohol y las drogas. Recuerdo que comencé a vomitar sangre, se me vino el mundo encima. Opté por quitarme la vida, pero afortunadamente la pistola no disparó, y cuando disparó el balazo salió para otro lado” pic.twitter.com/ifXFEdyAy8
— Santiago Sotto (@SantiSotto) September 10, 2020
Chávez detalló que cuando intentó suicidarse, afortunadamente, “la pistola no disparó”, y que cuando lo hizo, el balazo “salió para otro lado”. “Pasé momentos muy tristes en mi vida”, apuntó el mexicano, señalando que tras ese incidente, ingresó a un centro de rehabilitación.
El excampeón, cuya carrera deportiva abarcó 25 años, confesó que hace 11 años que está limpio y no consume ni alcohol ni estupefacientes. “La pelea más difícil que tuve fue contra las drogas. Poder salir de esa maldita enfermedad fue algo difícil y doloroso”, declaró Chávez. Y agregó: “Pero salí victorioso”.
Asimismo, afirmó que si se hubiera suicidado, no hubiera sido el boxeador que fue, ya que la gente le habría recordado como “un drogadicto”. “Si yo no hubiera caído en esa maldita adicción que fue la drogadicción y el alcoholismo, seguramente estarían hablando no solamente con el mejor boxeador de México, sino del mundo. Hubiera llegado a más de 100 peleas invicto”, concluyó.