Naciones Unidas, 11 jul (EFE).- El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, transmitió hoy a las autoridades egipcias su “grave” preocupación por las detenciones y órdenes de arresto contra líderes de los Hermanos Musulmanes, tras el derrocamiento del presidente Mohamed Mursi.
Ban llamó hoy por teléfono al ministro de Exteriores egipcio, Mohamed Kamal Amr, a quien recordó las obligaciones internacionales de Egipto y la necesidad de respetar plenamente el derecho a la libertad de expresión y de asociación de sus ciudadanos
“Le dejó claro que no debe haber espacio para la retribución o la exclusión de ninguna de las comunidades mayoritarias del país y su apoyo a las aspiraciones del pueblo egipto”, según indicó ante la prensa el portavoz de la ONU, Martin Nesirky.
Por último, tras reiterar el apoyo de la ONU a un Gobierno en ese país responsable, volvió a hacer un llamamiento a un diálogo “pacífico” que incluya a todas las partes del amplio espectro político del país para encontrar la manera de avanzar.
La Fiscalía egipcia ordenó el miércoles la detención del líder de los Hermanos Musulmanes, Mohamed Badía, por instigar a la violencia frente a la sede de la Guardia Republicana, donde el pasado lunes murieron al menos 51 personas, en su mayoría islamistas.
Desde el incidente del pasado lunes, un total de 652 personas han sido detenidas por supuesto asesinato, posesión ilegal de armas y explosivos, amenaza a la seguridad pública y cortes de carretera, según la Fiscalía.
Al menos 51 personas, en su gran mayoría simpatizantes del presidente derrocado, Mohamed Mursi, murieron el lunes pasado y otras 435 resultaron heridas en la jornada más cruenta desde el golpe militar del pasado 3 de julio en Egipto. EFE