El déficit fiscal de Pemex ha venido agravándose desde 2009 y ha venido acompañado de un aumento en el nivel de endeudamiento de la Empresa Productiva del Estado.
Esta no sería la primera vez que los proveedores de la petrolera mexicana se ven afectados por la economía de la paraestatal. En el anterior declive de los petroprecios, entre 2014 y 2016, 10 mil contratistas perdieron sus empleos debido a los recortes de gastos y el congelamiento de los contratos para exploración y producción.
Ciudad de México, 11 de junio (SinEmbargo).- Para reducir gastos Petróleos Mexicanos (Pemex) empezó a cancelar algunos contratos con proveedores y prestadores de servicios lo que derivó en el desempleo de miles de personas, aseguraron personas cercanas a la empresa estatal, reportó Bloomberg.
La empresa productiva del Estado mexicano suspendió contratos con al menos ocho empresas nacionales y extranjeras, principalmente adquiridos para el mantenimiento de plataformas petroleras en aguas poco profundas como las de Ciudad del Carmen en el estado de Campeche.
Pemex no contestó a los señalamientos hechos al medio por fuentes anónimas, sin embargo, los reportes de la petrolera muestran que la perla más valiosa del Estado mexicano sigue en caída libre hasta el punto de que está a punto de declararse en quiebra cuando ha sido durante décadas la fuente inagotable de recursos públicos.
Cuando llegó al Gobierno en diciembre de 2018, el Presidente Andrés Manuel López Obrador anhelaba con reflotar Pemex para convertirla en un caso de éxito y una fuente copiosa de fondos para sus programas sociales. Aquel sueño se ha transformado en una pesadilla para el mandatario.
Con la pandemia del nuevo coronavirus los precios del petróleo entraron en un periodo de volatilidad que echaron para atrás los planes de la actual administración de revertir 15 años de disminución en la producción y consolidar la autosuficiencia energética.
Aún con todos los conflictos que enfrenta, Pemex no regresará a sus labores hasta al menos enero del próximo año, aseguró la fuente de Bloomberg.
Los contagios de la COVID-19 enferman a la petrolera mexicana, que con la cancelación de contratos orillaría a la pérdida masiva de empleos, pero estas condiciones no ocurren sólo en México. En la industria petrolera mundial, la caída en los petroprecios a mínimos históricos negativos, en sólo un par de meses se perdieron casi la mitad de los empleos que perdió en el último colapso petrolero entre 2014 y 2016.
La petrolera perdió 23 mil 913 millones de dólares en el primer trimestre del 2020, una cifra más de quince veces mayor a la del mismo período del año anterior. En tan solo tres meses, Pemex perdió más que todo 2019, cuando registró pérdidas por 18 mil 367 millones de dólares, casi el doble de los 9 mil 575 millones de dólares que también perdió en 2018.
Estos factores complican el pago de la deuda financiera de Pemex, que alcanzó los 104 mil 800 millones de dólares en el primer trimestre del año, 24.2 por ciento más que al cierre de 2019. El total de pasivos subió un 7.8 por ciento hasta 179 mil 541 millones de dólares.
La petrolera lo atribuye a la apreciación del dólar, que cotizó en 23.51 pesos en los primeros tres meses de 2020, lo que provocó una pérdida cambiaria de 469 mil 200 millones de pesos (19 mil 957 millones de dólares).
El déficit fiscal de Pemex ha venido agravándose desde 2009 y ha venido acompañado de un aumento en el nivel de endeudamiento de la Empresa Productiva del Estado. Sin embargo, en el último año, la deuda consolidada de Pemex decayó 9.1 puntos porcentuales reales (a precios de 2019).
En la actualidad, la deuda de la petrolera es de 1 billón 983 mil 174 millones de pesos corrientes del año pasado.
Hasta ahora la pandemia del nuevo coronavirus no sólo ha dejado problemas financieros en la empresa, 356 personas vinculadas con la petrolera han muerto a causa de la COVID-19, de las cuales 126 fueron jubiladas y 113 trabajadores activos. Además se han registrado 8 mil 674 casos sospechosos, se han realizado 3 mil pruebas de diagnóstico, éstas han arrojado 2 mil 138 casos confirmados de coronavirus y mil 533 personas descartadas de la enfermedad causada por el virus SARS-CoV-2.
La enfermedad impactó en el empleo de 8 mil personas en Pemex, quienes de acuerdo con Reforma perdieron sus puestos de trabajo debido a los recortes al presupuesto de la empresa de hidrocarburos.
El movimiento, aseguró el medio, sería producto de la cancelación de 45 contratos por un valor de 160 millones de dólares a los proveedores de servicios costa afuera, como Marinsa de México y Cotemar. Sin embargo, Greta Alcántara, directora de relaciones institucionales de Grupo Cemza, matriz de Marinsa negó despidos en la empresa y aseguró que trabajan de la mano con Pemex.
Bloomberg adelantó que esta no sería la primera vez que los proveedores de la petrolera mexicana se ven afectados por la economía de la paraestatal. Un panorama de pérdidas se observó en el anterior declive de los petroprecios, cuando 10 mil contratistas perdieron sus empleos debido a los recortes de gastos y el congelamiento de los contratos para exploración y producción.
-Con información de EFE y Efrén Flores