Marcelo Ebrard, titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), advirtió que de regresar las amenazas arancelarias, el tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), pendiente de ratificación, “podría tener una dificultad seria de salir adelante”.
Casi al mismo tiempo, Donald Trump dijo que si él quiere puede hacer que entre en vigor su supuesto acuerdo secreto con México, y contradijo así la versión del Gobierno mexicano y su propia afirmación de que para implementar el pacto hace falta que antes lo ratifique el Congreso del país vecino.
México, 11 de junio (EFE).– El Secretario de Relaciones Exteriores de México, Marcelo Ebrard, admitió que “cualquier día” puede alterarse la relación con Estados Unidos a pesar del acuerdo migratorio alcanzado en Washington que suspendió la aplicación de aranceles.
“Cualquier día pueden cambiar las cosas, pero mejor un acuerdo de esta naturaleza a no tener nada”, defendió el canciller durante la Reunión Nacional de Consejeros Regionales del BBVA en la Ciudad de México.
Según el acuerdo alcanzado el viernes, México tiene 45 días para reducir el flujo migratorio que atraviesa su territorio con destino a Estados Unidos o, de lo contrario, el Presidente Donald Trump podrá reactivar la amenaza de imponer aranceles a las exportaciones mexicanas.
Por eso, Ebrard dijo que a partir de ahora el Gobierno mexicano va a “cuidar la relación con Estados Unidos” para intentar que no se vuelvan a mezclar los temas comerciales con los migratorios. También adelantó que a las 17:30 horas presentará a los medios el informe detallado de su visita a Washington y los documentos correspondientes. “Será la primera vez que se presenta un informe así durante un proceso diplomático en curso como es el que nos ocupa”, afirmó en Twitter.
Diseñamos un sistema que nos permita coexistir con las distintas visiones del tema migratorio de 🇲🇽 y 🇺🇸
Desplegamos la #GuardiaNacional en la frontera Sur —no como militarización— sino para que los flujos migratorios sean regulados, ordenados y seguros.
El Sur también importa. pic.twitter.com/DzqPvjcz4q
— Gobierno de México (@GobiernoMX) June 11, 2019
A las 17:30 presentaré a los medios, como lo mencioné ayer, el informe detallado de la visita a Washington y los documentos correspondientes. Será la primera vez que se presenta un informe así durante un proceso diplomático en curso como es el que nos ocupa.
— Marcelo Ebrard C. (@m_ebrard) 11 de junio de 2019
“En la relación con Estados Unidos, nuestra prioridad es que sea ratificado el tratado de libre comercio y que preferiblemente no tengamos que mezclar temas diferentes”, señaló el Secretario.
Ebrard advirtió que de regresar las amenazas arancelarias, el tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), pendiente de ratificación, “podría tener una dificultad seria de salir adelante”.
Por ello, se comprometió a cumplir los acuerdos con Washington y a “gestionar la frontera sur de otra forma”, de manera que se desplegarán 6.000 agentes de la Guardia Nacional para frenar las caravanas de migrantes.
Aunque ambos Gobiernos no concretaron la reducción de migrantes con un cifra concreta, Ebrard se marcó como objetivo revertir el “crecimiento exponencial” que ha tenido el flujo migratorio en los últimos meses.
Además, el Secretario defendió que hay que dar un “enfoque regional” a los flujos migratorios ya que, por ejemplo, muchos cubanos llegan a través de Panamá o muchos africanos lo hacen a través de Brasil.
“Vamos a tratar de organizar un sistema de gestión migratoria entre diferentes países o la situación que vivimos ahora será permanente”, consideró.
El Canciller, que lideró la delegación mexicana que estuvo negociando entre el 5 y el 7 de junio en Washington, agradeció la participación del sector privado, encabezado por el Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
“Fueron a tocar la puerta de muchas organizaciones y empresas para defender la causa de México, la de la sensatez y la moderación”, dijo Ebrard, quien aseveró que “una guerra arancelaria habría tenido efectos catastróficos”.
Por otro lado, el funcionario celebró que los resultados de las elecciones al Parlamento Europeo “fueron menos euroescépticos” de los esperados, lo que facilitará la renovación del acuerdo comercial entre México y la Unión Europea.
Asimismo, manifestó su intención de “fortalecer” la Alianza del Pacífico, de la que forma parte con Chile, Perú y Colombia.
Ebrard participará también el 28 y 29 de junio en la cumbre del G20 en Osaka (Japón), después de que el Presidente de México, el izquierdista Andrés Manuel López Obrador, haya declinado su asistencia.
EL ACUERDO SECRETO
El Presidente Donald Trump dijo este martes que si él quiere puede hacer que entre en vigor su supuesto acuerdo secreto con México, y contradijo así la versión del Gobierno mexicano y su propia afirmación de que para implementar el pacto hace falta que antes lo ratifique el Congreso del país vecino.
Antes de abandonar la Casa Blanca rumbo a Iowa, Trump se acercó a la prensa y sacó de su chaqueta una hoja de papel doblada, que agitó ante los periodistas sin mostrar su contenido.
“Este es el acuerdo que todo el mundo dice que no tengo. Voy a dejar que México haga el anuncio (sobre su contenido) en el momento adecuado”, aseguró el mandatario.
Trump lleva desde el domingo insistiendo en que el acuerdo que su Gobierno alcanzó el pasado viernes con el mexicano para frenar la imposición de aranceles a las importaciones del país vecino incluye elementos que aún no se han anunciado.
El ministro de Exteriores mexicano, Marcelo Ebrard, aseguró este lunes que “no hay ningún acuerdo de ninguna especie que no se haya dado a conocer” y que todo lo que se pactó fue divulgado el viernes, pero Trump ha continuado con su versión.
“Esta es una página de un acuerdo muy largo y muy bueno entre México y Estados Unidos”, recalcó el mandatario.
Opinó que el Gobierno mexicano no quiere hacer público todavía el acuerdo porque su contenido “tendría que someterse a (la aprobación de) su órgano legislativo”.
Pero después, al ser preguntado por si hay alguna circunstancia que le llevaría a revelar el contenido del acuerdo, Trump respondió que podría hacerlo, e incluso implementar el pacto, “si los números (de inmigrantes indocumentados que llegan a EE.UU. después de atravesar México) no bajan mucho”.
“Esto entra en vigor cuando yo quiera. Es una opción que tengo”, subrayó.
Trump comenzó a asegurar que había un pacto todavía secreto con México después de que el diario The New York Times afirmara que algunos puntos del arreglo revelado el viernes se acordaron hace meses.
El acuerdo que se hizo público, fruto de una semana de intensas negociaciones en Washington, obliga a México a incrementar la presencia policial en su frontera con Guatemala y permitirá a EE.UU. ampliar a toda la frontera un programa destinado a devolver a México a los solicitantes de asilo que llegan a su país.