En el informe "Las consecuencias económicas de la contaminación atmosférica", la OCDE expuso que a nivel mundial la contaminación atmosférica causó la muerte de 2 millones 933 mil personas en 2010, de las que 14 mil fueron de mexicanos, y que esos decesos podrían triplicarse en 2060 si no se toman acciones para evitar los altos niveles de polución.
Ciudad de México, 11 de junio (SinEmbargo).– Los contaminación atmosférica podría causar la muerte prematura de 21 mil mexicanos en 2030 y la de 42 mil en 2060 en caso de que no se tomen acciones para evitarlo, alertó la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE).
En el informe "Las consecuencias económicas de la contaminación atmosférica", planteó que en 2010 cerca de 14 mil personas en México perdieron la vida por enfermedades como la bronquitis crónica, el asma, los males respiratorios y los padecimientos cardiovasculares, mismas que se podrían triplicar en el año 2060.
La mala calidad del aire en el Valle de México ha obligado a que se decrete la Fase 1 de Contingencia Ambiental en 8 ocasiones en lo que va de este año.
El Gobierno federal y de los estados de Hidalgo, Tlaxcala, Puebla y Estado de México, además de la Ciudad de México han tenido que aplicar medidas para enfrentar el problema de la polución.
Esta semana, el Gobierno mexicano publicó la una nueva norma que busca disminuir la contaminación del aire en el Valle de México a través del establecimiento de niveles de emisión "más estrictos" para los vehículos tanto de uso particular como público, así como de mejores sistemas de control y que aplicará para las entidades mencionadas
Los vehículos nuevos estarán exentos de la verificación "hasta un máximo de cuatro años, en virtud de que sus niveles de emisión contaminantes están garantizados hasta por 100 mil kilómetros", indicó el secretario de Medio Ambiente, Rafael Pacchiano, en rueda de prensa.
La regulación, que entrará en vigor el 1 de julio próximo, incorpora tecnologías de última generación como el sistema de Diagnóstico a Bordo (OBD, por sus siglas en inglés) para la certificación de las emisiones contaminantes.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), dijo, estará a cargo de inspeccionar los centros de verificación para comprobar el cumplimiento de la norma, que también contempla "la colocación de mecanismos de vigilancia con equipos de detección remota sobre vialidades", entre otras medidas.
UN PROBLEMA GLOBAL
La OCDE señaló que a nivel mundial la contaminación atmosférica causó la muerte de 2 millones 933 mil en 2010, y que duplicarán o incluso a triplicar si se mantienen las tendencias actuales.
Añade que la contaminación recortará el Producto Interior Bruto (PIB) global en un 1 por ciento para 2060, es decir, el equivalente de 2.6 billones de dólares anuales a causa de los días de baja laboral, los gastos sanitarios y la disminución de la productividad agrícola.
Los impactos serán muy desiguales entre unas y otras regiones, lo que se explica por los diferentes niveles de contaminación.
Los mayores en términos relativos se darán en la región del Caspio, donde su PIB se verá recortado en un 3.1 por ciento, en China (-2.6 por ciento), en algunos países europeos del antiguo bloque soviético (entre -2 y 2.7 por ciento), en Rusia (-1.7 por ciento).
Se situará entre el -1 por ciento y el -1.5 por ciento en la mayor parte de los otros países del sudeste asiático (como India), de Oriente Medio y del norte de África.
Por el contrario, el efecto de recorte de la producción será inferior al 0.5 por ciento del PIB en Europa occidental, en Norteamérica o en Latinoamérica, así como en Australia, Nueva Zelanda o Sudáfrica.
Los autores del informe indicaron que de las más de 2 millones de muertes prematuras atribuidas a la contaminación atmosférica en 2010, 905 mil correspondieron a China.
En 2060, la cifra de China subirá a una cifra de entre 2 millones 065 mil y 2 millones 711 mil personas, cuando el total mundial se situará entre 6 millones 162 mil y 9 millones 043 mil.
Las muertes prematuras aumentarán también en la mayor parte de las grandes regiones, en particular en Asia.
Entre las pocas excepciones a esa regla, estarán los cuatro grandes países de la Unión Europea (Alemania, Reino Unido, Francia e Italia), donde se espera que de 111 mil muertes prematuras en 2010 se pase a entre 89 mil y 95 mil anuales en 2060.
En términos relativos, la tasa de mortalidad por millón de habitantes donde más va a incrementarse es en China, de 662 en 2010 a un millón 563 mil en 2060, la mayor con diferencia de las grandes áreas contempladas en el estudio.
También será particularmente elevada esa tasa de mortalidad por la contaminación del aire en Corea del Sur (mil 069 fallecimientos por cada millón de habitantes, frente a 359 en 2010), la región del Caspio (mil 061 frente a 558), India (945 frente a 508), Rusia (806 frente a 826) o Japón (755 frente a 468).
Los niveles más bajos se esperan en Australia y Nueva Zelanda (65 muertes prematuras anuales en el horizonte de 2060, comparadas con 77 en 2010), el África subsahariana (167 frente a 224 en 2010), México (269 frente a 122 en 2010), Estados Unidos (293 frente a 299), los cuatro grandes países de la UE (319 frente a 412).
La OCDE también evaluó los costos en términos de pérdida de bienestar por la contaminación del aire, que pasarán de 3 billones de dólares en 2015 a un monto de entre 18 y 25 billones en 2060.
En términos por habitante, eso supone un alza de 500 dólares por persona en 2015 a unos 2 mil 100 a 2 mil 800 en 2060.
Estos cálculos se han realizado sobre la base de proyecciones de algunos de los principales contaminantes, como el dióxido de sulfuro (SO2), los óxidos de nitrógeno (NOX) y el carbón negro (BC).
-Con información de EFE