Primero laboró en Gobernación como uno de los brazos derechos de Santiago Creel en el sexenio de Vicente Fox y luego brincó a la sociedad civil y al poder mediático. En 2016, cofundó con Claudio X. González la organización Mexicanos contra la Corrupción, pero hoy es ella la señalada por fraude millonario a Pemex.
Ciudad de México, 11 de mayo (SinEmbargo).– La analista política María Amparo Casar Pérez forma parte de la élite de políticos e intelectuales de derecha que son opositores al Gobierno de Andrés Manuel López Obrador y que, en su momento, estuvieron en el poder o al menos muy cerca de él. En su caso, fue asesora de Santiago Creel, exsecretario de Gobernación durante el foxismo y actualmente integrante de la campaña de la candidata panista Xóchitl Gálvez.
A través de sus columnas en Excélsior, su participación en “Primer Plano” en el canal público Once y en su reciente libro Los puntos sobre las íes (Grijalbo, 2024), ha sido crítica con la denominada Cuarta Transformación. Pero ahora ella, la presidenta de Mexicanos contra la Corrupción, es la cuestionada. Pemex la acusa de daño al erario por 31 millones de pesos por recibir una pensión por 130 mil pesos mensuales de manera “fraudulenta”.
Luego de ser señalada desde lo que ella llama la máxima tribuna, “La Mañanera”, y que datos personales y familiares fueran publicados por el Gobierno federal, recibió el espaldarazo de esa élite de derecha a la que pertenece. Entre ellos, del magnate Claudio X. González, excolaborador de Ernesto Zedillo, impulsor de la coalición PRI-PAN-PRD, y con quien cofundó en 2016 Mexicanos contra la Corrupción, una organización que se sostiene de donativos.
–Me contactó Claudio X. González sabiendo que yo sabía cuestiones de corrupción y me dijo que si creía que valía la pena hacer una institución que se dedicara a combatir la corrupción y la impunidad en México. Me presentó el proyecto, lo estudié, le dije que sí. Al darse cuenta que yo ya llevaba años haciendo esto, me invitó a copresidirla con él, a hacer un consejo consultivo e hicimos juntos la asociación en diciembre de 2015– compartió Amparo Casar en una reciente entrevista con el comunicador León Krauze en Letras Libres, revista de su padre el historiador de derecha, Enrique Krauze.
–¿Su intención es atacar al Gobierno en turno?
–Creo que está claramente acreditado que Mexicanos contra la Corrupción hizo el mayor número y las mejores investigaciones sobre corrupción en el Gobierno de Peña Nieto (Estafa Maestra), tanto que el Presidente las utiliza todas las semanas en la mañanera, desde luego sin dar crédito. Hay gente que piensa –el mismo Presidente dice– que nacimos para descarrilar su Gobierno, pues no, estuvimos dos años poniendo bajo la lupa cómo se ejercían los recursos con Peña Nieto. Así que no, no es partidista.
Quiero agradecer el gran apoyo que he recibido de tantos amigos, colegas, organizaciones y ciudadanos que me han hecho sentirme respaldada y querida ante esta andanada desde el poder.
Me siento afortunada y les prometo que ni yo ni @MXvsCORRUPCION daremos un paso atrás.
— Ma. Amparo Casar (@amparocasar) May 7, 2024
De acuerdo con los datos de Pemex mostrados en “La mañanera”, su exesposo Carlos Márquez Padilla, coordinador de asesores de la Dirección de Administración durante medio año, murió el 7 de octubre de 2004 al caer del doceavo piso de la Torre de la petrolera. Dado que los directivos le dieron trato de accidente, Amparo Casar solicitó pensión posmortem para sus hijos hasta que cumplieron 25 años y pensión por viudez que recibió hasta febrero de este año, lo que ocasionó un daño al erario por 31 millones de pesos, ya que la normativa no contempla esas prestaciones si la muerte fue por suicidio, como después determinó el Ministerio Público, y si el funcionario laboró menos de dos años en la dependencia.
Leonardo Núñez, director de investigación aplicada en Mexicanos contra la Corrupción, y amigo cercano de Amparo Casar, tuiteó: “Su argumento principal, tal como está en su libro (Gracias, del Presidente), es que (el Procurador) Bernardo Batiz LE DIJO que lo buscaron (Amparo y Héctor Aguilar Camín). Esa es su evidencia. Por eso quieren confundir publicando documentos que nada prueban sobre esto”.
Tanto Amparo Casar como Aguilar Camín, director de la revista Nexos, han asegurado que esa reunión con el exprocurador nunca existió. Batiz, por su parte, dijo en entrevista con Los Periodistas que “no recuerda” haber tenido ese encuentro al que hizo referencia el Presidente López Obrador, pero aseguró que solían tener reuniones de gabinete de seguridad donde se abordó el caso.
Ese lunes, en que el titular de Pemex ahondó sobre el caso desde Palacio Nacional, Amparo Casar no estuvo en el programa “Primer plano”, del Once, como suele hacerlo algunos lunes por la noche. Pero en su columna quincenal en Excélsior sostuvo que la muerte de su exesposo fue accidental y enfatizó que fueron las autoridades capitalinas, entonces encabezadas por el propio Presidente y Bátiz, quienes “supuestamente cedieron a mi influyentismo y procedieron a la alteración de documentos para que yo pudiera cobrar la pensión a la que tenía derecho. Si eso ocurrió, como el Presidente dice en su libro, quienes cometieron una falta fueron él y su procurador”.
Asimismo, atribuye el señalamiento a los trabajos publicados en MCCI y por su reciente libro Los puntos sobre las íes, en el cual plantea que el Gobierno de López Obrador se define en seis conceptos: incompetencia, impunidad, incongruencia, ilegalidad, desinstitucionalización y desinformación.
En sus páginas, la analista política cuestiona cómo el Presidente ha eliminado, capturado o reducido el presupuesto de las instituciones que le “obstaculizan” como el INE, el INAI, la CNDH, la prensa, las organizaciones civiles (y lo intentó con la Corte), al mismo tiempo que aumentó un 220 por ciento el presupuesto a la Sedena de 2018 a 2024.
“Los contrapesos –escribe Casar– son una afrenta al monopolio del poder que le gusta tener. La molestia se potencia contra las organizaciones que ofrecen análisis, investigaciones, estudios y expresiones que muestran lo dañinas que pueden ser algunas políticas públicas; las que vigilan el ejercicio del gasto público, que generan datos diferentes a los oficiales; las que exhiben la corrupción y la impunidad, y las que denuncian los abusos del Gobierno. Para ellas también lo que hay son ataques desde todos los flancos legales, judiciales, reputacionales y financieros. Se agrede su labor, además, desde la más alta tribuna, La mañanera, en la cual se descalifica a quienes encabezan o colaboran en esas organizaciones”.
En estos momentos, ella dice ser un blanco más del Presidente.
El director de Transparencia Mexicana, Eduardo Bohórquez, lo matizó así en entrevista: “En congruencia con lo que marca la ley, tanto los funcionarios de Pemex como los de la Presidencia de la República deben aportar los elementos que permitan a un juez o al órgano interno de control determinar la responsabilidad de las personas involucradas en este caso. De haber una conducta fraudulenta, debe investigarse y sancionarse conforme a derecho”.
“Pero –agregó– el manejo del caso ha ido más allá de la detección de una posible operación fraudulenta. Al divulgar detalles del caso y vulnerar datos personales, el gobierno muestra una intención política distinta (…) los derechos humanos no se suspenden cuando las acusaciones se hacen en contra de adversarios o de opositores”.
UN BRAZO DERECHO DE CREEL
María Amparo Casar fue la jefa de asesores de Santiago Creel, Secretario de Gobernación durante el Gobierno del panista Vicente Fox (2000-2006). En 2004, cuando el funcionario de Pemex Carlos Márquez murió tras caer del edificio administrativo de la empresa, llevaba dos meses separado de la entonces funcionaria pública.
La revista Proceso publicó una nota el 8 de octubre de 2004 titulada “Se suicida importante funcionario de Pemex”. Dentro del texto, se plantea: “además de ser trabajador de confianza, Márquez Padilla fue exesposo de María Amparo Casar, jefa de asesores del Secretario de Gobernación, Santiago Creel, y empleado directo del director corporativo de Administración, Octavio Aguilar Valenzuela, hermano del vocero de la Presidencia (de Fox), Rubén Aguilar”.
Socióloga por la UNAM y politóloga por la Universidad de Cambridge, a la par de que era uno de los brazos derechos de Creel, desde 1979 era académica en la División de Administración Pública del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), un centro que recibe recursos públicos y que Casar Pérez ha defendido frente a los señalamientos del Presidente López Obrador respecto a ser una cuna de neoliberales.
En más de una ocasión, desde sus conferencias de prensa el Presidente López Obrador se ha referido a “la señora” Amparo Casar. En marzo de 2022, mientras criticaba que el Gobierno de EU financie asociaciones civiles como Mexicanos contra la Corrupción, aseguró que el padre de Claudio X. González estuvo detrás del fraude de 2006 y que Amparo Casar estaba en Gobernación cuando Fox intentó desaforarlo.
“¿Qué los de las agencias de EU no lo saben? ¿Qué no se sabe qué es lo que hace Claudio X. González y qué es lo que hace la señora Casar? Desde que crearon la asociación el objetivo es atacarnos, ¿por qué?, porque esa asociación participó en el fraude electoral del 2006, el papá del señor Claudio X. González era el principal promotor del fraude en el 2006, de tiempo atrás asesor económico de Carlos Salinas de Gortari, de quienes más han impulsado la privatización en el país”, dijo.
En 2006, en plena transición de Gobierno y tensión por los resultados electorales, María Amparo Casar cuestionó el movimiento obradorista contra el fraude electoral. En julio de ese año escribió en su espacio en el periódico Reforma:
“En realidad la única certeza que tenemos es que los cómputos distritales señalan a Calderón como el candidato que recibió la mayoría de los votos. El candidato que hasta el momento tiene menos votos insiste en comprometerse con su verdad, con sus principios, con sus convicciones y con su ‘dignidad’, pero no con las instituciones ni con la legalidad”.
Más allá de eso, sobre aquella época como funcionaria pública hay pocos archivos hemerográficos. En fotografías de la agencia Cuartoscuro se le ve ya en noviembre de 2008, terminado el gobierno de Fox, compartiendo mesa con Lorenzo Córdova, exconsejero presidente del INE que forma parte de la marea rosa; y con Sergio Sarmiento, uno de los voceros del magnate Ricardo Salinas Pliego, quien por sus millonarias evasiones fiscales se ha enfrentado recientemente con el Gobierno federal.
DEFENSORA DE GARCÍA LUNA
María Amparo Casar fue profesora-investigadora del CIDE, tiene un pie en la sociedad civil con Mexicanos contra la Corrupción (con eco en Reforma) y cuenta además con un megáfono en su columna quincenal en Excélsior (Grupo Imagen), un espacio en la revista Nexos de su amigo Héctor Aguilar Camín y debate en “Primer Plano” en el canal Once.
Además de recibir la cuestionada pensión por viudez de Pemex, de acuerdo con la Plataforma Nacional de Transparencia, la politóloga recibe –según el número de programas– de 94 mil a 200 mil pesos al trimestre de recursos públicos por su análisis político en”Primer Plano” transmitido los lunes por la noche, espacio en el que ha estado desde 2006.
Desde ese micrófono, quien trabajó en un gobierno panista llegó a insinuar la inocencia del exsecretario de Seguridad de Felipe Calderón, Genaro García Luna. El martes 21 de febrero de 2023, en la corte de Nueva York fue declarado culpable por nexos con el narcotráfico. Pero una noche antes, el 20 de febrero, Amparo Casar aseguró durante su intervención en el programa del público canal Once:
“Hay una ausencia total de pruebas en lo de García Luna. Incluso no está ni la grabación famosa que se les acabó la pila, que uno no puede entender que a la DEA… Solo quedaría un delito, que sí está comprobado, que es el de falsedad de declaración porque, en efecto, falseó un declaración. Pero eso lleva a una pena relativamente menor y además tiene la ventaja de que ya con purgó tres años, así que podría salir caminando de la Corte del Distrito Este. Agregaría estos temas: México ya perdió porque sí hemos sido exhibidos de una manera muy lamentable, horrorosa, bastante cierta; estoy segura que AMLO va a ganar, si lo absuelven va a decir que los compañeros de EU no cooperan, y si lo condenan, va a poder señalar desde el Presidente Felipe Calderón para abajo a todos en la lucha contra el narcotráfico”.
La analista política, en su afán de defender a un exfuncionario de Vicente Fox, erró aquella noche de febrero de 2023. Actualmente, mayo 2024, es ella la que está bajo un juicio mediático en espera de una resolución judicial.
¿Podría ella salir caminando?