El Gobernador de Baja California aseguró que respetará la decisión de la SCJN, la cual declaró inconstitucional la ley para ampliar su mandato de dos a cinco años. “En la democracia se gana y se pierde. Yo sigo pensando en que tengo la razón, pero acepto la decisión y se acabó”, dijo Jaime Bonilla en una primera reacción con medios locales.
Ciudad de México, 11 de mayo (SinEmbargo).– Después de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) declaró inconstitucional la ley para ampliar el mandato de Jaime Bonilla en Baja California, de dos a cinco años, el Gobernador aseguró que acepta la decisión.
“En la democracia se gana y se pierde, así como gané con el 60 por ciento de la votación, ahora perdimos con el 100 por ciento de los ministros por sus razones; yo sigo pensando en que tengo la razón, pero acepto la decisión y se acabó”, dijo en una primera reacción a medios locales.
El Gobernador de extracción morenista dijo que su Gobierno seguirá trabajando de la misma manera y aseguró que estaba preparado para cualquier decisión de la Corte: “Vamos a seguir igual, esto no va a cambiar el énfasis, si ellos creen que nos van a redirigir, para nada, al contrario. Siempre pensamos que era una posibilidad (que se declarara inconstitucional) de que votaran como votaran”.
En una sesión plenaria virtual por la pandemia de COVID-19, los once magistrados del tribunal constitucional mexicano avalaron este lunes por unanimidad los recursos de inconstitucionalidad contra la modificación del mandato de Jaime Bonilla Valdez, Gobernador desde el 1 de noviembre de 2019.
Bonilla se presentó a las elecciones para un período de dos años pero, tras ganar los comicios, el Congreso de Baja California, con ayuda de los legisladores de Morena y el PAN, modificó la ley para alargar su mandato a cinco años.
El presidente de la Suprema Corte, Arturo Zaldívar, fue muy duro con la Ley Bonilla, a la que definió como "un gran fraude a la Constitución y al sistema democrático" en México.
"El Congreso de Baja California alteró los resultados del proceso electoral concluido al decretar por ley que el Gobernador electo por dos años ejerciría su cargo por cinco", dijo.
Bonilla arrasó con el 50 por ciento de los votos en las elecciones locales de Baja California, estado fronterizo con Estados Unidos, celebradas el 2 de junio de 2019.
Aunque el cargo de Gobernador era tradicionalmente por un período de seis años, en estas elecciones se estableció un mandato de solo dos años debido a la reforma electoral mexicana de 2014 para homogeneizar los procesos electorales del país.
Sin embargo, tras celebrarse las elecciones, el Congreso de Baja California reformó la legislación local para alargar tres años más dicho mandato, con los votos a favor del oficialista Movimiento Regeneración Nacional (Morena) pero también de los partidos de la oposición.
Ante esto, los dirigentes nacionales de los opositores partidos Acción Nacional (PAN), Revolucionario Institucional (PRI), de la Revolución Democrática (PRD) y Movimiento Ciudadano corrigieron a sus líderes locales y presentaron sendos recursos de inconstitucionalidad.
A su vez, el Instituto Nacional Electoral (INE) declaró una "batalla legal para salvaguardar la democracia" y el histórico líder de la izquierda mexicana Cuauhtémoc Cárdenas pidió la "desaparición del Congreso local de Baja California".
Desde el gabinete de Bonilla defendieron la constitucionalidad de la iniciativa puesto que, a su entender, los ciudadanos desconocían la duración exacta del mandato por el que estaban votando.
El Presidente López Obrador se deslindó de la polémica y se limitó a emplazar a "las autoridades competentes" a resolver el asunto.
Sin embargo, la Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, reconocida exmagistrada de la Suprema Corte, defendió entonces que la Ley Bonilla era "legal".
–Con información de EFE