El Presidente brasileño entró en el establecimiento, bebió un café, comió un bocadillo y tendió la mano a los trabajadores.
Ciudad de México, 11 de abril (RT).- El Presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, lo ha vuelto a hacer. Ignorando las recomendaciones del Ministerio de Salud a la población de quedarse en casa para evitar infecciones por coronavirus, el mandatario salió a pasear el jueves por Brasilia y fue increpado por los ciudadanos.
Bolsonaro entró en una panadería, se bebió un café, comió un bocadillo, tendió la mano y habló con los trabajadores. En un video publicado por su hijo, el diputado Eduardo Bolsonaro, en las redes sociales, se ve cómo la gente se va aglomerando para verle, algo muy mal visto estos días por el peligro que conlleva.
Muchos personas se sintieron molestas con esta actitud y le abuchearon. "'¡Fuera Bolsonaro!', '¡Váyase a casa!'", le espetaron los ciudadanos a golpe de cacelorazos.
Por el momento, el Palacio de Planalto se ha abstenido de hacer comentarios.
La escena es la misma que la que protagonizó el pasado 29 de marzo, cuando decidió recorrer la capital brasileña. También entonces se le grabó hablando y fotografiándose con vendedores, algo que generó numerosas críticas.
Incluso la Fiscalía brasileña pidió entonces al Tribunal Federal de Río de Janeiro multar al Gobierno después de que el presidente incumpliese la decisión judicial que prohíbe los actos contra el aislamiento social para frenar la pandemia.
Contra el confinamiento
Bolsonaro ha reiterado su posición contra el aislamiento social como método para contener el coronavirus y hace hincapié en la necesidad de salvar la economía y el empleo.
El ultraderechista considera que la medida daña a la economía, defiende la reapertura de los comercios y critica a los gobernadores que aplicaron restricciones de circulación en sus distritos.
