Con esta medida el Gobierno estadounidense pretende que todos los adultos puedan tener acceso a la posibilidad de pedir una cita para conseguir que se les inocule contra la COVID-19 en las semanas o meses siguientes al 1 de mayo.
Washington, 11 marzo (EFE).- El Presidente estadounidense, Joe Biden, ordenará este jueves garantizar que, antes del 1 de mayo, todos los adultos del país tengan la posibilidad de programar una cita para vacunarse contra la COVID-19, dentro de un calendario que apunta a retomar cierta sensación de normalidad para el 4 de julio.
Durante su primer discurso a la nación en horario de máxima audiencia, Biden "ordenará a todos los estados, tribus y territorios del país hacer que todos los estadounidenses adultos sean elegibles para recibir la vacuna como tarde para el 1 de mayo", adelantó un asesor del Presidente en una rueda de prensa.
Eso no significa que todos los adultos puedan estar vacunados para el 1 de mayo, sino que "todos podrán tener acceso a la posibilidad de pedir una cita para conseguir" que se les inocule contra la COVID-19 en las semanas o meses siguientes, matizó el asesor, que pidió el anonimato.
El anuncio no cambia el pronóstico de la Casa Blanca de que será a finales de mayo cuando Estados Unidos tendrá las dosis suficientes para vacunar a todos los adultos del país, que son unos 255 millones, según datos del censo.
Aunque los estados y territorios de Estados Unidos tienen mucha autonomía para gestionar sus recursos, Biden tiene la autoridad, bajo las normas del Departamento de Salud, de "ordenarles" que cumplan con su instrucción de abrir la posibilidad de vacunarse a todos los adultos antes de mayo, explicó el asesor.
Actualmente, más de 64 millones de estadounidenses han recibido al menos una dosis de la vacuna, una cifra que incluye al 65 por ciento de los mayores de 65 años del país, lo que está llevando a muchos estados a avanzar rápidamente para inocular a otros grupos de riesgo y hace pensar que pronto podrán tener acceso los adultos menos vulnerables.
En su discurso, que coincidirá con el primer aniversario del confinamiento por la pandemia, Biden establecerá el objetivo de situar al país "más cerca de la normalidad" para el 4 de julio, el Día de la Independencia de Estados Unidos, apuntó otra asesora del mandatario en la rueda de prensa.
El Presidente subrayará que, "si todos los estadounidenses hacen su parte" para contener la pandemia en los próximos meses, "es muy probable que pueda haber reuniones de pequeños grupos de familias y amigos para celebrar el Día de la Independencia", afirmó la asesora.
El objetivo de retomar reuniones masivas aún queda lejos, pero Biden tratará de generar esperanza de que el festivo del 4 de julio sea algo más llevadero que los de Acción de Gracias o Navidad, agregó.
Además, con el objetivo de acelerar el ritmo de vacunación, el Gobierno de Biden permitirá a partir de este viernes que puedan presentarse voluntarios para administrar pinchazos los dentistas, oculistas, podólogos, técnicos y asistentes médicos, matronas, veterinarios, paramédicos y fisioterapeutas respiratorios del país.
Y el Presidente anunciará el despliegue de más de 4 mil militares en activo para apoyar los esfuerzos de vacunación, lo que elevará el total de soldados que se dedican a ello a más de 6 mil, precisaron los asesores.