La prohibición de ingreso de extranjeros en territorio japonés se anunció el pasado mes de noviembre, aunque en un principio esta fue aprobada por un mes.
MADRID, 11 Ene. (EUROPA PRESS).- Las autoridades de Japón han decretado mantener hasta finales del mes de febrero las restricciones fronterizas en el país por las cuales se prohíbe el acceso a extranjeros ante la situación sanitaria derivada de la pandemia de coronavirus y el avance de la variante Ómicron.
Además, se ha instalado un punto de vacunación a gran escala por parte de las Fuerzas de Autodefensa para impulsar así el proceso de administración de las terceras dosis de la vacuna, según ha anunciado el Primer Ministro japonés, Fumio Kishida.
Sin embargo, el mandatario ha reconocido que, con base en las investigaciones de los expertos en la materia, si bien la infectividad es alta, la mayoría de las personas afectadas por la variante Ómicron no presentan síntomas, o estos son leves, recoge la radiotelevisión japonesa NHK.
La prohibición de ingreso de extranjeros en territorio japonés se anunció el pasado mes de noviembre, aunque en un principio esta fue aprobada por un periodo de un mes. Este domingo el Primer Ministro Kishida ya señaló a la cadena nipona que se mantendría cauteloso a la hora de relajar medidas, pues aún no se tiene un conocimiento completo sobre Ómicron.
La nación asiática ha registrado en las últimas semanas un aumento significativo de las infecciones de coronavirus, lo que ha provocado la preocupación de la sociedad y de las autoridades locales y regionales.
En este contexto, Japón y Estados Unidos han acordado limitar durante dos semanas los movimientos innecesarios y los registros de entrada y salida de los militares estadounidenses destinados en bases de territorio nipón.
La ciudad de Okinawa y otras dos áreas cercanas a las instalaciones de la Marina de Estados Unidos han puesto en marcha medidas restrictivas para frenar el avance del virus.
Las autoridades sanitarias japonesas han notificado más de 1.75 millones de casos positivos por coronavirus desde el inicio de la pandemia y algo menos de 18 mil 500 fallecidos a cuenta de la enfermedad.