@guerrerochipres

No hay peor calvario para las familias y las amistades de una persona que su desaparición.

Una esperanza a toda prueba y resiliencia inquebrantable son requeridas desde el momento en que las autoridades prometen poner toda la atención y recursos; en ese proceso hay también tiempos de frustración al no hallar resultados, y una profunda incertidumbre de vida o muerte de la víctima, además de saber que la oferta verbal de instituciones está necesariamente acotada por la diversidad de las presiones para el otorgamiento del múltiple servicio que otros le requieren.

Hace ya un año, Wendy Sánchez, una artista radicada en San Pancho, en el estado de Nayarit, viajaba en una camioneta con destino a Guadalajara, Jalisco; eso fue lo último que se supo de ella. La joven desapareció en una carretera.

Colectivos feministas, amigas y amigos, familiares piden no olvidar el caso. Las redes sociales han sido fundamentales para darle difusión, y con los hashtag #tebuscamoswendy o #hastaencontrartewendy lo convirtieron este fin de semana en una tendencia que es reflejo de la impotencia ante la falta de noticias.

Apenas una semana después de la desaparición, el Gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, prometió: “Vamos a hacer todo lo que esté a nuestro alcance para que aparezca. Confío en Dios que va a aparecer”.

De acuerdo con el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y no Localizadas de la Secretaría de Gobernación, Jalisco ocupa el primer lugar nacional en número de personas desaparecidas, con más de 15 mil hasta este año, mientras que Nayarit registra más de mil 300.

El caso de Wendy, como el de muchas otras mujeres desparecidas en el país es resultado de una violencia de género invisibilizada por el machismo, y frente al cual el reclamo es la igualdad sustantiva y el derecho a una vida segura.

La ciudadanía no podrá gozar de plenitud en tanto persistan estas agresiones que conducen a casos como la desaparición de Wendy o mientras subsista la impunidad y no sea erradicada la violencia.

Desde el Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la CDMX impulsamos una cultura de paz, igualdad y equidad, que permita romper con las estructuras que normalizan la violencia de género.

A través de la Línea de Seguridad y el Chat de confianza 55 5533 5533, hemos brindado asesoría psicológica y legal gratuita a 232 mil mujeres de México y el extranjero, y de enero a octubre de 2021 ayudamos a abrir 399 carpetas de investigación. También detectamos una relación entre crímenes de violencia de género, riesgo feminicida y Trata de Personas.

Por eso diseñamos el programa Acompañamiento Violeta que ofrece asistencia empática a las víctimas, además de fortalecer el empoderamiento de las mujeres, así como sus redes de apoyo y la promoción de la denuncia. Porque ellas no están solas.

Hoy, el local donde Wendy tenía su taller de arte, en Nayarit, está vacío y un mural con su retrato es el recuerdo constante de que aún se busca a la joven.

Salvador Guerrero Chiprés

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Salvador Guerrero Chiprés es coordinador general del C5, ex presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México. Es doctor en Teoría Política por la Universidad de Essex, Inglaterra; maestro en Comunicación por la Universidad Iberoamericana y licenciado en Derecho y en Comunicación por la UNAM. Fue asesor de la Secretaría de Seguridad Pública del entonces Distrito Federal y de la Comisión Nacional de Seguridad, y Comisionado Ciudadano de Transparencia en el InfoDF.

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