Ciudad de México, 13 de agosto (SinEmbargo).– El ex Presidente de México, Felipe Calderón Hinojosa, regresó al país luego de vivir poco más de un año en Massachusetts, Estados Unidos, y este miércoles presentará su libro Los retos que enfrentamos: Los problemas de México y las políticas públicas para resolverlos (2006-2012), en el que hace un balance de su sexenio.
El ex mandatario asegura que su estrategia de seguridad fue integral y que abarcó acciones orientadas a todas las fases sucesivas del fenómeno criminal: prevención, combate del delito, la procuración de justicia y la readaptación social. Pero para activistas y familiares de víctimas de la guerra contra el narcotráfico lo contradicen y rechazan enérgicamente. "Es una vergüenza", coincidieron.
"Los datos y la realidad que está viviendo el país lo contradice, y se lo dijimos con todos los elementos para demostrárselo ante los diálogos. La realidad lo contradice", afirmó Javier Sicilia Zardain, líder del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad (MPJD).
"De cuando se inició [la estrategia de seguridad] hasta 2011 había 40 mil muertos. La estrategia continuó y continúa con este gobierno. Tenemos más de 100 mil muertos. No hay un gramo de justicia. [Felipe Calderón] atoró y golpeó la Ley de Atención a Víctimas. No hay un gramo de justicia. No hay una ruta de paz. Cada vez más el gobierno y las instituciones de gobierno están más penetradas por el crimen. Cualquier cosa que pueda decir en defensa de su estrategia simplemente la realidad lo va a contradecir. Lo sigue acusando. Es una señal de que no ve objetivamente la realidad que él mismo creó y que propició y que cualquier justificación lo pone en ridículo", expresó.
Por su parte, Irma Leticia Hidalgo Rea, integrante del colectivo Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Nuevo León, aseguró que el contenido del libro es puro "cinismo y desvergüenza" del ex mandatario.
En el texto, Calderón Hinojosa asegura: "mi gobierno nunca le ha declarado la guerra a los narcotraficantes. Esa es una afirmación que en el mejor de los casos es imprecisa". Sin embargo, la madre de Roy Rivera Hidalgo, estudiante de la Universidad Autónoma de Nuevo León desaparecido el 11 de enero del 2010 en el municipio de San Nicolás, no opina lo mismo.
"Nosotros no nos olvidamos cuando él vistió aquel uniforme de las Fuerzas Armadas (que por cierto le quedó muy grande) y dio la orden. Sacó a las Fuerzas Armadas de sus cuarteles y nos las envió a las ciudades a enfrentar a la población civil, a los ciudadanos. Si eso no es una guerra entonces ¿cómo lo podemos llamar? ¿Exterminio? Nos mandó las armas, y a los hombres armados. Nos dejó entre la corrupción de las diferentes autoridades de la justicia, nos dejó en medio de los cárteles de las drogas, nos dejó indefensos. Si a eso no lo llama guerra, nosotros lo llamamos exterminio", afirmó.
El michoacano también escribe: "Mi gobierno actuó siempre a solicitud expresa de las autoridades locales, donde los gobiernos locales respondieron hubo grandes logros contra los grupos delictivos como en Tijuana, Monterrey y Ciudad Juárez".
Al respecto, Irma Hidalgo recordó el incendio del Casino Royale: "Quemaron un casino lleno de gente. ¿Crees que fue un éxito la estrategia de seguridad en Nuevo León? De recordarlo da asco este tipo de declaración y no conforme con esto, él viene a ofrecer el apoyo a las familias y no les cumple absolutamente nada. Los deja en el total desamparo aún todavía. Es contrario a lo que él expresa, nosotros aún estamos sufriendo las consecuencias de su 'estrategia de seguridad'".
Irma también envió un mensaje por parte del colectivo: "Padres, madres, abuelas, abuelos, hermanos de los desaparecidos le decimos al señor Felipe Calderón que los ojos de los desaparecidos lo sigan a donde quiera que él vaya".
LA HERENCIA DE CALDERÓN
El ex Presidente expone que llamar guerra contra las drogas a la estrategia de seguridad que impulsó durante su gobierno es impreciso. Sin embargo, Netzai Sandoval, quien presentó en noviembre de 2011 una demanda contra Felipe Calderón ante la Corte Penal Internacional por delitos de lesa humanidad, expresó que el ex mandatario sí la llamó guerra desde un principio, cuando la lanzó en Michoacán. Sin embargo, "poco a poco fue cambiándole el nombre".
En el libro, Calderón Hinojosa comenta que los estados en "donde no les interesó colaborar los resultados fueron deplorables como en Guerrero, Tamaulipas y, especialmente, en Michoacán". Para el activista fue lo contrario: "el Gobernador de Michoacán colaboró con Calderón y tuvo pésimos resultados, pero a los políticos es muy fácil olvidar los datos que no le convienen. Pero ahí se ve el mayor fracaso, en su tierra natal. Imagínate qué doloroso y triste debe ser que a tu tierra natal sólo le sepas llevar muerte y violencia. Creo que esa es la herencia simbólica de Calderón. La herencia a sus paisanos de Michoacán".
"La gente hoy tiene una visión distinta de lo que heredó Calderón e, incluso, los mismos políticos ya no están dispuestos a meter las manos por él, sobre todo en el PAN [Partido Acción Nacional]. Antes en esa fuerza política existía una defensa de Calderón y hoy ya no es la misma actitud. Incluso cuando ha habido intentos de llamar a cuentas al ex Secretario de Seguridad Pública, ya los panistas no defienden a capa y espada a ese gobierno. No están dispuesto a meter la manos al fuego por esos funcionarios que hoy sabemos, no sólo fracasaron, sino que decidieron ser omisos para permitir que la crisis humanitaria que vivimos", dijo.
El abogado también planteó que el gran problema con la política de gobierno de Calderón es que el mandatario "sabía lo que estaba pasando en el país. Sabía que había tortura en los cuarteles militares, que los militares no contaban con herramientas, protocolos e instrumentos para realizar funciones policiacas, sin embargo decidió autorizar una movilización masiva de soldados que llevó a miles de muertos, miles de desplazados, miles de desaparecidos".
Netzai también denunció que los "niveles de asesinato de violencia, crueldad, decapitaciones, amputaciones, eso no se vivía antes, eso es una herencia de Felipe Calderón, de su irresponsabilidad".
El litigante recordó que uno de los argumentos que presentó en la denuncia ante la Corte Penal fue que Felipe Calderón "utilizó al Ejército y a la Marina sin protocolos para establecer retenes, recabar pruebas, realizar detenciones, para hacer careos, ningún protocolo. Lanzó al Ejército a improvisar, lanzó a personas con tanquetas a improvista a detener personas y esto evidente provocó muertes".
"Un caso paradigmático que se repitió en más de una ocasión fue el absurdo de disparar contra vehículos que pasaban de largo los retenes y lo soldados, a veces sí y a veces no, se les ocurría disparar contra vehículos que se seguían o que no se detenían totalmente en los retenes y así mataron a niños a familias enteras. Si Felipe Calderón hubiera ordenado desde el primer año de gobierno que se desplegaran estas fuerzas milotares pero con protocolos, con límites y con instrucciones apara realizar estos operativos, estas muertes se hubieran evitado", denunció.
Netzaí aseguró: "Esos protocolos se los había ordenado la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). Se le indicó que la falta de esto iba a provocar muertes no solamente de civiles, sino de militares. Esto se le obligó con motivo de una facultad de investigación que realizó la propia Corte donde hizo notar que faltaban los protocolos no sólo para el Ejército y la Marina sino a las policías en general y Felipe Calderón no actuó. Ignoró al máximo tribunal del país".
"Me parece vergonzoso que nos venga a decir que fue una estrategia bien planeada, bien pensada, premeditada cuando es evidente que durante los seis años se fue improvisando sobre la marcha y uno de esos casos más palpables y evidentes es esa decisión de expedir protocolos en su último año de gobierno", finalizó.