Buenos Aires, 7 ago (dpa) - Argentina presentó hoy una demanda contra Estados Unidos ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), con sede en La Haya, al considerar que fallos de la justicia norteamericana en el litigio con fondos de inversión sobre la reestructuración de la deuda pública argentina violaron su soberanía.
"En el día de la fecha se presentó en La Haya una demanda por la actividad de su Poder Judicial. La Haya sirve para que los países con conflictos no nos agarremos a bombazos o misilazos", explicó esta noche la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
El gobierno argentino demandó a Estados Unidos "por la violación de su obligación internacional de respetar la soberanía de la República Argentina", informó la Jefatura de Gabinete de Ministros en Buenos Aires.
Denunció a Washington por "la violación de su obligación internacional de no aplicar o estimular medidas de carácter económico y político para forzar la voluntad soberana de otro Estado" a través de "decisiones que vulneran la decisión soberana de la República Argentina de reestructurar su deuda externa", según sostiene el comunicado oficial.
Argentina solicitó ante La Haya que Estados Unidos acepte la jurisdicción de la CIJ para resolver la disputa.
"Con sus resoluciones, (el juez estadounidense Thomas) Griesa quiere llevarse por delante la soberanía del país", sostuvo Fernández de Kirchner durante un acto en la Casa de Gobierno.
"El presidente de Estados Unidos cuenta con una facultad que es la cláusula de separación de poderes, por la que puede pedirle a un juez que no interfiera con la política exterior", sostuvo la mandataria.
"El mismo 'fondo buitre' de Paul Singer quiso embargar a los fondos del Congo, George Bush intervino y bloqueó el embargo de bienes", ejemplificó.
Fernández de Kirchner denunció que "se quiere sostener que a partir del problema de Argentina con los fondos buitre van a pasar cosas peores y no es así".
La causa se enmarca en el fallo del juez Griesa que obliga a la Argentina a pagar a fondos de inversión, que Buenos Aires considera "buitres", el total de los bonos soberanos argentinos que tienen en su poder y entraron en cesación de pagos a fines de 2001, sin aplicar los recortes que realizó en la reestructuración de la deuda en "default" aceptada por más del 92 por ciento de los acreedores.
El gobierno de Cristina Fernández de Kirchner aseveró que no puede cumplir con la resolución porque le acarrearía múltiples demandas de los bonistas que aceptaron en 2005 y 2010 la reestructuración de deuda.
La falta de cumplimiento del fallo judicial dejó al país sudamericano en un "default" técnico, según las principales agencias de calificación de deuda, ya que no pudo pagar un vencimiento de deuda de bonos reestructurados.
La presidenta cuestionó hoy que "si sus sentencias (por las resoluciones de Griesa) están ajustadas a derecho, por qué impide que el Banco de Nueva York cumpla con sus responsabilidades" de distribuir los fondos depositados por la Argentina, a los bonistas que ingresaron a los canjes de 2005 y 2010.
En este contexto, la administración de Fernández de Kirchner consideró que "la responsabilidad internacional de Estados Unidos por la violación de las obligaciones mencionadas surge, principalmente, de la acción de uno de sus órganos, el Poder Judicial, a través de la adopción de decisiones que vulneran la decisión soberana de la República Argentina de reestructurar su deuda externa".
"Dado que un Estado es responsable por la conducta de todos sus órganos, las violaciones mencionadas han generado una controversia entre la República Argentina y los Estados Unidos que nuestro país somete a la Corte Internacional de Justicia para su resolución, en tanto que principal órgano judicial de las Naciones Unidas, brindando así a los Estados Unidos la oportunidad para resolver esta controversia de conformidad al derecho y la justicia", señala.
El gobierno argentino sostuvo que en el caso de que Washington no aceptara la competencia de la CIJ, entenderá que "ese país está en la obligación de indicar un medio de solución pacífica alternativo" de conformidad con las disposiciones de la Carta de Naciones Unidas, la Carta de la Organización de Estados Americanos (OEA) y del derecho internacional general.
La CIJ informó en La Haya a través de un comunicado que el recurso presentado por Argentina fue transmitido al gobierno de Estados Unidos. "De todas formas, no se tomará ninguna acción en el procedimiento hasta que los Estados Unidos de América den su consentimiento a la jurisdicción de la Corte en este caso", sostiene el comunicado.
La presentación argentina contra Estados Unidos fue realizada un día después de que el ministro de Economía, Axel Kicillof, reclamara al gobierno de Barack Obama que intervenga y le ponga "límites" al juez Thomas Griesa.
"Estados Unidos puede hacerse el distraído, puede hacerse el tonto, pero hay un juez de ese país que está tratando de embargar algo que ni siquiera es nuestro, es de los bonistas", declaró Kicillof.
El ministro se refirió así a los más de 500 millones de dólares que Argentina depositó en un banco de Estados Unidos para pagar un vencimiento de deuda a los acreedores que aceptaron la reestructuración.