Ciudad de México, 8 de julio (SinEmbargo).– El pasado 4 julio, el Presidente Enrique Peña Nieto dijo en una entrevista con Charlie Rose, locutor y periodista de Estados Unidos, que los homicidios han disminuido 25 por ciento en México respecto a 2012. El titular de la Secretaría de Gobernación (Segob), Miguel Ángel Osorio Chong, y el Comisionado para la Seguridad y el Desarrollo Integral de Michoacán, Alfredo Castillo Cervantes, también han presumido una disminución de la violencia, específicamente en Michoacán y Tamaulipas.
Sin embargo, el director del Observatorio Nacional Ciudadano (ONC), Francisco Rivas, insistió en que la realidad que viven los mexicanos es otra. Expuso que las propias cifras oficiales del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) lo confirman.
Las estadísticas del SNSP actualizadas hasta el 18 de junio de 2014 plantean que tanto Michoacán como Tamaulipas han presentado incrementos significativos en delitos como extorsión y secuestro.
En el caso de Michoacán se presentó un incremento significativo en las denuncias por el delito de extorsión, pasando de 29 casos en abril a 55 casos en mayo; esto representa un incremento de 89.66 por ciento, con lo que la entidad se coloca en el tercer lugar nacional en denuncias por este delito. En Tamaulipas, cinco de los ocho delitos de alto impacto (homicidio doloso, extorsión, robo con violencia, robo de vehículo y robo a vivienda) presentaron un incremento en el mismo periodo, mientras que el homicidio culposo no tuvo variaciones.
Asimismo, la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) difundida por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), publicó que el 70.2 por ciento de la mexicanos cuestionados dijo que es peligroso vivir en su ciudad.
Para la mayoría de los encuestados, la situación de la delincuencia “seguirá igual de mal” o “que empeorará”.
En contraste, el Gobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, reconoció por primera vez en en lo que lleva de su mandato –tres años y siete meses– que la crisis de seguridad en la entidad y afirmó: “Me tocó bailar con la más fea”. Durante todo este tiempo, el priista había negado, en diversas ocasiones, que en el estado había violencia y ayer, finalmente, aceptó que Veracruz no vive en calma.
ONC DESMIENTE VIOLENCIA A LA BAJA
En el Reporte sobre Delitos de Alto Impacto Abril 2014 realizado por el Observatorio, que utiliza también los datos del SESNSP, criticó que la narrativa presidencial menoscabe la incidencia de otros delitos como el secuestro, la extorsión, las múltiples modalidades de robo, trata de personas, las desapariciones involuntarias, el tráfico de armas, entre otros delitos que afectan considerablemente la seguridad en el territorio.
“El 9 de junio de 2014, el Presidente Enrique Peña Nieto afirmó que la incidencia delictiva en México bajó 25 por ciento de 2012 a 2013 y 12 por ciento de 2013 a 2014 en el marco de una reunión organizada por un diario español durante su gira por Europa. Estas afirmaciones tomaron como base las estadísticas de homicidio dolosos el cual parece ser el único indicador del cual dispone el gobierno federal para referirse a la incidencia delictiva”, publicó el informe.
“Ese mismo día 15 cadáveres fueron encontrados en Sinaloa, algunos días antes fueron localizados varias fosas clandestinas con más de una decena de cadáveres en Guerrero, a la par que la tendencia por la extorsión y el secuestro permanecen al alza. Este contraste parece indicar que el discurso público se encuentra desligado de la realidad, o por lo menos de los acontecimientos violentos a los que se enfrentan miles de mexicanos diariamente”, agregó el Observatorio Nacional Ciudadano.
La narrativa de seguridad de la actual administración federal ha insistido que la situación en esta materia ha ido mejorando año tras año, afirmó el informe.
“En este sentido, la mayoría de los mensajes emitidos por las autoridades emplean como indicador principal el número de homicidios intencionales y es lógico que presuman este indicador, pues acorde con las estadísticas del SESNSP ha presentado una tendencia a la baja desde 2011. Si bien este resultado es alentador, no es correcto ni prudente que toda la narrativa gubernamental menoscabe la incidencia de otros delitos como el secuestro, la extorsión, las múltiples modalidades de robo, trata de personas, las desapariciones involuntarias, el tráfico de armas, entre otros delitos que afectan considerablemente la seguridad en el territorio”.
Ayer volvió a desmentir las declaraciones oficiales.
“El Observatorio Nacional Ciudadano reitera que las autoridades de todos los órdenes de gobierno están obligadas a dar información clara, comprobable y contundente, particularmente cuando hablan de disminución de la incidencia delictiva. Por ello, expresa su preocupación en el hecho de que se difundan cifras no oficiales con el objetivo de generar una falsa percepción de seguridad y promover aceptación de estrategias que aún no han arrojado resultados satisfactorios”, planteó.
PERCEPCIÓN DE SEGURIDAD, A LA BAJA
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) del Inegi, una mayoría abrumadora de mexicanos cree que la violencia empeorará o seguirá igual de mal en el país.
“Al considerar los resultados de los cuatro períodos en los que se ha levantado la encuesta, se observa que es mayor la proporción de población que considera que la situación de la delincuencia ‘seguirá igual de mal’ y que ‘empeorará’, y en particular este último tuvo un incremento de 3.1 puntos porcentuales en comparación con septiembre de 2013”, dio a conocer.
Sólo el 13.7 por ciento estima que la seguridad pública en el país “mejorará”.
La población encuestada expresó un aumento en el número de personas que ha modificado sus rutinas por miedo a sufrir algún delito. Entre ellas, impedir a los hijos menores salir de casa y dejar de visitar a parientes.
Respecto a la percepción social sobre la seguridad pública, el 70.2 por ciento de la muestra dijo que es peligroso vivir en su ciudad.
“Durante el pasado mes de junio de 2014, 20.6 por ciento de la población de 18 años y más que reside en las ciudades objeto de estudio, consideró que en los próximos 12 meses la situación de la delincuencia en su ciudad seguiría igual de bien y 13.7 por ciento que mejoraría, mientras que 37.2 por ciento consideró que seguiría igual de mal y 27.1 por ciento que empeoraría”, explicó Inegi.
Asimismo, el porcentaje de ciudadanos que aseguraron ser testigos de conductas ilícitas en los alrededores de su vivienda alcanzó nuevos máximos en cuatro de seis rubros posibles durante el segundo trimestre de este año:
- 67 por ciento de los encuestados reportó robos y asaltos
- 59 por ciento, vandalismo en las viviendas.
- 38. 9 por ciento manifestó haber detectado presencia de bandas violentas.
- 42 por ciento vio venta y consumo de drogas.
- 26 por ciento escuchó disparos con armas de fuego.
“VERACRUZ NO ESTÁ EN CALMA”
A su vez, el Gobernador Javier Duarte reconoció que los niveles de inseguridad sí son altos en la entidad.
En diversas ocasiones, el mandatario priista negó que en su estado hubiera violencia e incluso descartó crímenes como el secuestro y la extorsión que, según las cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, han ido a la alza en la entidad.
Hace unas semanas, el propio Javier Duarte de Ochoa, afirmó que “hoy por hoy en Veracruz no hay extorsiones, no hay balaceras y no hay secuestros” y la entidad “está en calma”.
Sin embargo, distintos hechos violentos demostraban lo contrario. Recientemente, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública refirió que el estado de Veracruz presentó un aumento en secuestros del 80.56 por ciento, comparado con el primer cuatrimestre de 2013, por ejemplo.
También en el municipio de Tres Valles y en Cosamaloapan, ambos al sur de la entidad, se encontraron fosas clandestinas con más de 30 cuerpos.
