Ciudad de México, 29 de junio (SinEmbargo).- La comunidad Lésbico, Gay, Bisexual, Transexual, Transgénero, Travesti e Intersexual (LGBTTTI) participó en la marcha número 36 del orgullo gay en la Ciudad de México.

Contingentes de diversos puntos de la Ciudad y de la República se dieron cita poco antes de las 12:00 horas en avenida Paseo de la Reforma a la altura del Ángel de la Independencia, donde la fiesta sonaba ya desde unas cuadras de distancia. Detrás del monumento se encontraban tráileres listos para desfilar con música, jóvenes bailando a bordo e incluso bebidas.

Los vendedores ambulantes también aprovecharon la ocasión para pintar de colores una de las avenidas más importantes de la ciudad. Productos con los tonos del arcoiris, representativos del movimiento, se vendían entre cada esquina.

Alrededor de las 13:00 horas se dio el arranque del desfile, sin embargo, se observó lenta la movilización e incluso un poco desorganizado, pues hubo muchos huecos durante la marcha.

Los primeros en salir fueron un contingente para el Acceso a la Justicia donde estaban diversas ONGs, entre ellos Colectivo Poliamor, Bloque Rosa, Colectivo Anarcoqueer, Colectivo de Gafas Violetas. A su paso gritaron diversas consignas, pero también hicieron pintas en algunos lugares públicos.

“La vertiente a la disidencia sexogenérica es una apuesta para decirle al Estado que nosotros decidimos nuestra manera de amar, de coger, de estar con el otro y con la otra y respetamos mucho la marcha de la diversidad pero no somos un asunto de diversos, somos un asunto de disidentes, y eso implica que tenemos una posición política frente a todas las imposiciones que han querido hacer concretamente a las mujeres sobre nuestro cuerpo, nuestro ejercicio de la sexualidad entonces venimos aquí a organizar la rabia y a defender la alegría”, dijo una de las representantes del colectivo Poliamor.

El Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) también tuvo un contingente, y una de sus consignas era en contra del conservadurismo del Partido Acción Nacional (PAN). También a lo largo de la marcha, varios grupos criticaron la creación de la Comisión de la Familia y Desarrollo Humano.

Frente al Senado se colocó un templete y juegos inflables para los pequeños. La asociación de Familias Diversas realizó varios actos y también condenaron la creación de la Comisión y a su presidente, el panista José María Martínez Martínez quien se ha declarado en contra de los matrimonios entre personas del mismo sexo y la adopción de hijos por parte de estas parejas.

Travestis caracterizados de famosas, jóvenes con sus mejores atuendos con tacones altos se contoneaban por toda avenida Reforma, sin embargo, luego de más de dos horas de estar caminando algunos optaron por ir descalzos o cambiarse por zapatos bajos.

Cada tres pasos que daban se tenían que detener pues las peticiones de fotografías no cesaban y a nadie le dijeron que no, incluso, algún curioso pidió a una “diva” que cargara su perrito para tener el recuerdo.

“Está bien, son gajes del oficio”, bromeó.

La circulación de Reforma en dirección sur estuvo abierta, pero el tráfico se detuvo cuando hizo su aparición “La Supermana”, personaje de televisión interpretado por el actor Daniel Vives, y una señora a bordo de una camioneta le gritó: “Soy tu fan”. El actor se acercó y muchos aprovecharon la ocasión para tomarse la foto del recuerdo.

La marcha continuaba y se hicieron presentes Los Vaqueros Mexiquenses, grupo que participó por primera vez en la marcha en 2010, montados en sus caballos provocando suspiros de algunos y algunas adolescentes.

Diversas comunidades también estuvieron presentes, desde cristianos, judios, empresas corporativas como Google y American Express, e incluso algunos bares gay aprovecharon la ocasión para promoverse.

El sol a plomo no calmó el ambiente, los vendedores de agua y de refrescos o sangría con limón y sal hacían su agosto. Las tiendas ubicadas sobre Reforma decidieron cerrar sus puertas y atender desde afuera a la gran cantidad de clientes que pedían hidratarse.

La gente comenzó a llegar a Avenida Juárez, familias los esperaban sobre la banqueta. El operativo por parte de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal era discreto por lo que se observaban muy pocos uniformados.

Los contingentes y camiones ya se acercaban al Zócalo capitalino donde los esperaba un templete para realizar diversos actos culturales. La fiesta no terminaba, ni las nubes grises que amenazaban con una lluvia pudieron ocultar los colores del arcoíris que pintaron la plancha.

Laura Cordero

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