Ciudad de México, 4 de junio (SinEmbargo).– Alrededor de medio centenar de indígenas tarahumaras, rarámuris y tepehuanes viajaron hasta la Ciudad de México para exigir a autoridades del Gobierno federal ser escuchados.
“Los hombres de los pies alados”, como hacen llamarse, denunciaron ante los senadores violaciones sistemáticas a los derechos al territorio ancestral; pidieron la consulta y el consentimiento previo libre e informado, además de exigir que se trataran temas derivados de la contaminación de manantiales y así como de violencia.
“Por la defensa de nuestro territorio hemos recibido el hostigamiento, las amenazas y la violencia, llegando incluso al asesinato de integrantes de algunas de nuestras comunidades”, afirmó la indígena Aurelia Rivas en tepehuán.
Por su parte, el Miguel Manuel Parra, el traductor tarahumara, advirtió: “Nosotros venimos a decir que no venimos a pedir; venimos a exigir que se cumplan los derechos que como pueblos indígenas nos corresponden”.
La comunidad indígena denunció que representantes de dependencias como la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), la Comisión Nacional del Agua (Conagua), el Fondo Nacional del Fomento al Turismo (Fonatur) y la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI), se han negado a atender sus demandas.
En reunión con senadores, manifestaron que el gobierno del estado de Chihuahua, encabezado por Horacio Duarte Jaques, no ha querido escucharlos y por el contrario ha emprendido una campaña de desprestigio en su contra.
Explicaron que el Estado no garantiza la seguridad de quienes se han visto amenazados por el crimen organizado, por caciques locales y hasta por inversionistas que pretenden construir complejos turísticos en la zona.
Los rarámuris se quejaron de que se empezaron a construir hoteles en la Barranca de Cobre con la intención de crear una zona turística con hoteles cinco estrellas, teleférico, y hasta un aeropuerto, prácticamente han sido desplazados de sus zonas de agricultura, comercio y centros sagrados.
Incluso denunciaron que desde que empezaron a construir hoteles en la parte alta de la barranca, el agua para consumo humano se ha contaminado, pues los grandes hoteles cinco estrellas, como el hotel Mirador, descargan sus aguas negras en la barranca, las cuales fluyen a tres manantiales que abastecían a la comunidad.
La contaminación del líquido vital ha provocado problemas de salud entre los indígenas, pues algunos se han enfermado de dermatitis o infecciones gastrointestinales.
Ante esto, las comunidades interpusieron en 2002 una denuncia popular ente la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), que se declaró incompetente y turnó el caso a la Conagua, con el mismo resultado.
En 2013, el Gobernador César Duarte instaló una mesa de derechos indígenas a fin de atender sus demandas. Año y medio después, la mesas no ha rendido ningún fruto, por lo que decidieron buscar el apoyo del Senador Javier Corral Jurado, del Partido Acción nacional, quien gestionó una reunión con funcionarios de las dependencias federales antes citadas en los salones del Senado de la República, a fin de que sean escuchadas su demandas.
Uno de los convocados es Jaime Martínez Veloz, comisionado para el Diálogo con los Pueblos Indígenas de México, quien en ocasiones anteriores quedó formalmente de ir personalmente a Chihuahua sin que haya cumplido su palabra.
“Aquí está muy cerquita Bucareli, donde él despecha, hasta caminando se puede venir Martínez Veloz, si tiene interés en escuchar a los representantes de las comunidades indígenas de Chihuahua. Nosotros le podríamos ofrecer incluso una tarjeta de Ecobici para que llegara rápido”, indicó el Senador Corral.
COMBATE A LA POBREZA
Un día antes de que la comunidad indígena se presentara en el Senado de la República, el Presidente Enrique Peña Nieto estuvo en la comunidad de Guachochi y prometió aumentar los recursos para esa entidad de 115 a 584 millones de pesos para combatir la pobreza extrema.
El mandatario prometió, durante una gira de campaña como candidato a la presidencia, a las comunidades de Chihuahua que dejaría d de vivir en la pobreza extrema.
En ese sentido, el Senado de la República se comprometió a brindar apoyo alimentario en la Sierra Tarahumara, de modo que la ayuda que se les brinde a las comunidades más pobres no sea con fines electorales.
En ese sentido, el Senado de la República se comprometió a brindar apoyo alimentario en la Sierra Tarahumara, de modo que la ayuda que se les brinde a las comunidades más pobres no sea con fines electorales.
Tras una reunión entre legisladores y representantes de rarámuris , la Cámara Alta exhortó también al Ejecutivo Federal a considerar dentro de estos proyecto a las zonas del desierto de Chihuahua y los estados afectados por la sequía.
Por su parte los Senadores María Teresa Ortuño, así como Javier Corral Jurado del Partido Acción Nacional, urgieron el apoyo a los tarahumaras.
María Teresa Ortuño, pidió que no se otorgara ayuda a las comunidades indígenas con displicencia olástima, mientras que Senador Fernando Baeza, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), hizo un llamado para que dichas acciones no se convirtieran en un “botín político”, pues manifestó que no se puede lucrar con las necesidades de los comuneros de la Sierra Tarahumara.
Los tarahumaras o rarámuris son una comunidad que conserva sus tradiciones y estilo de vida, habitan en montañas de la Sierra Tarahumara y su principal actividad económica es la siembra de maíz y frijol en las tierras del estado de Chihuahua y han permanecido en la lucha por que se respeten sus derechos humanos.
MESAS DE DIÁLOGO
Las demandas de los indígenas de esta zona no son nuevas. Existen ya antecedentes judiciales en tribunales agrarios sobre el atropello sobre sus tierras.
Ante este panorama los senadores Javier Corral y Alejandro Encinas Rodríguez, éste último del Partido de la Revolución Democrática (PRD), coincidieron en crear espacios para escuchar a los representantes tarahumaras en dichas mesas de trabajo, por lo que lanzaron una convocatoria a los funcionarios para implementar medidas de acción.
Además desde marzo pasado los gobernantes rarámuris ya habían solicitado a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos ayuda para la instalación de dichas mesas de diálogo.
Asimismo durante el Cuarto encuentro de Pueblos Originarios de la Sierra Tarahumara, se determinó iniciar un proceso de cabildeo con los funcionarios públicos federales para plantear soluciones a las diversas problemáticas de las comunidades rarámuri y ódami.
Además el Senador priista Eviel Pérez Magaña, presidente de la Comisión de Asuntos Indígenas, envió un mensaje en que dijo que daría audiencia de los comuneros indígenas para establecer un acercamiento formal.