Una mujer perdió a toda su familia durante un deslave que se registró en la comunidad Mukem, en Chiapas. Son miles de familias las que resultaron damnificadas durante el paso de “Eta” por la entidad.
Ciudad de México, 10 de noviembre (EFE/SinEmbargo).- La mayoría de los integrantes de una familia perdió la vida durante el deslave que se registró el viernes en San Juan Chamula, población ubicada en el estado de Chiapas.
Juan, Inocencio, Benito, Ramiro y Teresa se encontraban en la comunidad de Mukem cuando se registró el deslave provocado por las lluvias que trajo la depresión tropical “Eta”.
Amigos y familiares enterraron ayer a los cinco integrantes de la familia. Uno era el padre, los otros cuatro hijos. Sus cuerpos fueron rescatados horas después de que se desprendiera la tierra.
De acuerdo con la agencia Cuartoscuro, nueve personas perdieron la vida por el deslave en la comunidad chiapaneca. Una mujer, esposa y madre de las cinco víctimas citadas, sobrevivió.
El número de muertes creció a 27 el domingo en el sureste mexicano por el paso del ciclón “Eta” y las lluvias de frentes fríos después de confirmarse dos nuevos decesos en Chiapas, que acumula 22 fallecidos, además de cinco en Tabasco
Las autoridades de Chiapas reportaron a Efe un herido, 37 mil 079 personas afectadas, 12 regiones dañadas, con 8 mil 033 familias damnificadas en 54 municipios con un total de 16 mil 077 viviendas con daños, de las que 4 mil 010 están inhabitables y 255 colapsadas.
La tormenta tropical “Eta”, que atravesó Cuba causando inundaciones y daños y tocó tierra en los Cayos de Florida, ha bajado la fuerza de sus vientos en el sureste del Golfo de México.
A las 18.00 del lunes “Eta” se encontraba 135 millas (215 km) al oeste suroeste del cayo Dry Tortugas (EE.UU) y 160 millas (255 km) al norte del extremo más occidental de Cuba.
Presentaba vientos máximos sostenidos de 50 millas por hora (85 km/h) y se movía hacia el suroeste a 16 millas por hora (26 km/h). Se espera que esta noche continúe con la misma dirección a una velocidad más lenta.
El domingo, “Eta”, que es la tormenta con nombre número 28 de este años en el Atlántico y el décimo segundo huracán, tocó tierra en el cayo floridano Lower Matecumbe, con vientos máximos sostenidos de 65 millas por hora (104 km/h).
