Los Sultanes ganaron su cuarto juego con dos derrotas y volvieron a ser campeones después de haber reinado en la temporada 2007.
Monterrey/Ciudad de México, 10 de octubre (EFE).— El jugador de cuadro Ramiro Peña pegó un sencillo al jardín central para empujar la carrera con la que los Sultanes de Monterrey vencieron hoy 3-2 a los Guerreros de Oaxaca y conquistaron el título de la Liga Mexicana de Béisbol.
Los Sultanes ganaron su cuarto juego con dos derrotas y volvieron a ser campeones después de haber reinado en la temporada 2007. En Monterrey, norte de México, los lanzadores fueron protagonistas lo cual provocó que el duelo llegara empatado 2-2 a la novena entrada. El dominicano Wirfin Obispo colgó el cero en la parte alta y dejó todo listo para que su equipo asegurara el triunfo.
El estadounidense Chris Roberson pegó un doble, avanzó a tercera base en un toque de bola y después de un boleto intencional a Samuel Zazueta, Peña pegó el imparable decisivo.Los Guerreros habían sorprendido a los Sultanes con una carrera en la segunda entrada en la que el cubano Henry Urrutia y los mexicanos Samar Leyva, Alan Sánchez y Alejandro González ligaron sencillos, este último para impulsar a Leyva después de que el caribeño había sido puesto out en tercera base.
Sultanes respondió. Empató 1-1 en el cuarto episodio cuando Agustín Murillo ligó un doble, se fue a tercera base con una rola de Félix Pérez y anotó con un elevado de José Amador. Los lanzadores dominaron por ambos bandos hasta que en el octavo los Guerreros recuperaron la ventaja y los Sultanes volvieron a empatar.
Alejandro González pegó un imparable, avanzó con un toque de bola de sacrificio de Erick Rodríguez, pasó a tercera en una rola de Jay Austin y anotó por un envío descontrolado del lanzador (wild).
Por el equipo de casa Alí Solís recibió base por bolas; Marco Guzmán entró a correr y avanzó a tercera con hit de Ramiro Peña y anotó con un elevado de sacrificio de Agustín Murillo para poner el 2-2.
Roberson bateó de 3-2 con un doble y una carrera impulsada y lideró el ataque de los Sultanes, mientras por los Guerreros, el jardinero Alejandro González ligó de 3-2. Wirfin sumó su segunda victoria de la final y Samuel Zazueta, su primer revés.
