Cada habitante de las 32 ciudades analizadas pierde 3 mil 875 pesos al año en la congestión. En el Valle de México, la zona más afectada, cada locatario pierde 5 mil 827 pesos anuales.
Ciudad de México, 10 de septiembre (SinEmbargo).- La ineficiencia de los sistemas de movilidad que genera congestión cuesta 94 mil millones de pesos al año solo en las 32 ciudades con mayor actividad económica de cada estado, de los cuales 69 mil millones de pesos los pierden los usuarios de transporte público y los otros 25 mil millones de pesos los automovilistas, revela un estudio del IMCO y la plataforma Sin Tráfico.
A nivel local, el Valle de México (47 mil mdp), Monterrey (9 mil 839 mdp), Guadalajara (8 mil 067 mdp), Puebla-Tlaxcala (4 mil 453 mdp), y Tijuana (2 mil 774 mdp) son las ciudades con mayor costo por oportunidad derivado del tráfico.
Le siguen Toluca (2 mil 743 mdp), Querétaro (2 mil 236 mdp), Ciudad Juárez (mil 466 mdp), Saltillo (mil 475 mdp) y León (mil 319 mdp).
Per cápita, cada habitante de las 32 ciudades analizadas pierde 3 mil 875 pesos al año, equivalente a comprar 2.5 canastas básicas mensuales. En el Valle de México, la zona más afectada, cada locatario pierde 5 mil 827 pesos anuales.
Medido por tiempo, la congestión hace perder 100 horas al año en promedio a cada locatario de esas 32 ciudades (71 horas si se traslada en auto y 118 horas en transporte público).
“Además de perder recursos y productividad, perdemos tiempo y vida en la congestión”, dijo Óscar Ruiz, de IMCO.
Asimismo, quienes viven alejados de los centros urbanos de trabajo llegan a destinar el 22.4 por ciento de su gasto en trasladarse, frente al 19 por ciento que erogan hogares céntricos, agregó.
Per cápita, cada habitante en el Valle de México pierde sentado o parado en la congestión 146.45 horas anuales; en Toluca, 116 horas; en Puebla-Tlaxcala, 114horas; Monterrey, 113 horas; y Acapulco 112 horas.
Actualmente, destacó el investigador de IMCO Óscar Ruiz, aunque el 39 por ciento de la población mexicana usa transporte público, los gobiernos locales solo invierten 1.2 por ciento del presupuesto para movilidad (INEGI, 2016). En contraste, el 24 por ciento usa automóvil, pero se invierte 47 por ciento del presupuesto público en infraestructura vial.
Por ejemplo, en Acapulco se invirtió el 93 por ciento del presupuesto de movilidad en infraestructura para auto, a pesar de que el 47 por ciento de la población se traslada en transporte público.
“De seguir con las mismas políticas públicas e inversión en infraestructura vial que privilegia el uso del vehículo privado sobre el de transporte público, las condiciones podrían agravarse a corto plazo”, advierte el informe de ambas organizaciones.
Frente al panorama de congestión actual a nivel nacional, IMCO y Sin Tráfico llamaron a las autoridades a invertir más en transporte público seguro, eficiente, limpio y en infraestructura para movilidad no motorizada; desincentivar el uso de autos mediante los impuestos de tenencia y sobre gasolinas; límites máximos de unidades; y promover la construcción de vivienda social en zonas céntricas.