Los números alcanzados por el PT con la victoria de Claudia Sheinbaum se eclipsan ante el avance registrado por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), el aliado incómodo de Morena. Mientras que en seis años, el Partido del Trabajo creció en su votación un 14 por ciento, el PVEM aumentó un 344.80 por ciento.
Ciudad de México, 10 de junio (SinEmbargo).- En toda su historia, de poco más de tres décadas, el Partido del Trabajo (PT) sólo ha ido en solitario en un proceso presidencial: en 1994 cuando postuló a Cecilia Soto. Desde entonces, se ha mantenido, primero como aliado del PRD, cuando postuló en 2000 al ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas y desde el año 2006 como el principal socio de Andrés Manuel López Obrador y, posteriormente, de su movimiento.
El ir junto al lopezobradorismo le ha dado a esta fuerza política liderada por Alberto Anaya Gutiérrez una votación que ha aumentado cada seis años. Por ejemplo, en 2012, obtuvo 2 millones 597 mil 905 sufragios que en 2018 ascendieron a 3 millones 396 mil 264, y el pasado 2 de junio a 3 millones 882 mil 813. Es decir, entre los pasados comicios presidenciales y estos su votación aumentó un 14.33 por ciento.
Los números alcanzados por el PT con la victoria de Claudia Sheinbaum han permitido posicionarse a este partido con 50 diputados —11 menos con los que inició en septiembre de 2018— y con nueve senadores, entre ellos Alberto Anaya, una cifra superior con la que inició hace seis años en la Cámara Alta.
A lo largo de la LXIV y LXV legislatura su representación se fue modificando en la Cámara de Diputados, en donde pasó de 61 curules al inicio a 33 actualmente, lo que coloca al petismo como la quinta fuerza en la Cámara Baja y como la sexta en el Senado con seis legisladores, los mismos con los que llegó en 2018.
Su triunfo reciente se ha visto opacado por los puntajes alcanzados por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), el aliado incómodo de Morena, quien para sobrevivir y ganar espacios ha optado desde hace dos décadas por aliarse siempre a un partido más grande que le permita conseguir una buena votación, que significa una mayor cantidad de recursos públicos. De esta manera, en 2000 optó por el PAN; en 2012 y 2018, por el PRI, y en este 2024 por la llamada “Cuarta Transformación”, que ha sido la alianza más fructífera en su historia.
La periodista Daniela Barragán consignó la semana pasada cómo los votos del Verde se dispararon en esta elección presidencial. En efecto, éstos pasaron de un millón 51 mil 480 con José Antonio Meadea a 4 millones 677 mil 057 con Claudia Sheinbaum Pardo. Es decir, incrementó su votación en un 344.80 por ciento, una cifra que nunca antes había visto el partido del tucán, fundado en 1991 por Jorge González Torres.
Las proyecciones que ha hecho la Secretaría de Gobernación —a partir de las cifras oficiales del INE— indican que el PT tendrá en el Congreso 50 diputados para ser la cuarta fuerza política en esta instancia, mientras que el Verde llegará a la próxima Legislatura con 75 curules que le permitirán posicionarse como la segunda fuerza, detrás de Morena, en San Lázaro. En tanto, en el Senado el PT será quinta fuerza con 9 senadores, y el Verde, cuarta con 14.
Precisamente será en la Cámara Alta que llegará su líder máximo Alberto Anaya por la vía plurinominal. Nunca elegido por voto directo, Anaya ha sido Diputado y Senador por representación proporcional entre 1988 y 2024.
Además de Anaya, llegan al Congreso Reginaldo Sandoval, quien fue coordinador del PT en San Lázaro y Francisco Amadeo Espinosa Ramos, quien ha sido Diputado federal en tres ocasiones. Reforma consigna además el arribo del expriista Roberto Albores, Lilia Aguilar, quien fue reelecta por Chihuahua; Ana Karina Rojo, también reelecta; la expresidenta Municipal de General Escobedo, Nuevo León, Clara Luz Flores, y el expriista Francisco Javier Guízar Macías.