La celebración del día de las Madres y la reapertura de actividades tras el Semáforo Amarillo en la Ciudad de México podría dejar ingresos por 33 mil millones de pesos, cerca del 70 por ciento del nivel previo a la pandemia, según estimaciones de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco Servytur).
Por Pedro Pablo Cortés
Ciudad de México, 10 may (EFE).- La capital mexicana se reactivó este lunes con la entrada del semáforo amarillo (riesgo medio de contagios) por COVID-19, el nivel más bajo de toda la pandemia. Un avance que coincidió con el Día de las Madres, uno de los festivos más importantes del país.
Mientras países de Suramérica afrontan toques de queda y momentos críticos, Ciudad de México inició este día con una reapertura paulatina de fiestas infantiles, convenciones hoteleras, estadios y eventos de entretenimiento, además de aumentos de aforo en restaurantes, comercios y cines.
El optimismo es palpable en los restaurantes del centro histórico, como el sitio de antojitos “¡Que viva México!”, donde empleados con cubrebocas, caretas y desinfectante alistaban las mesas para recibir a las madres mexicanas, que son homenajeadas este 10 de mayo.
“Creo que ya permite un poquito la vacuna el que uno se sienta más seguro, el COVID va a estar para quedarse, entonces mientras tengamos los protocolos va a permitir que sigamos ingresando a lugares, poder seguir nuestras vidas”, comentó a Efe el gerente del establecimiento, Fernando Herrera.
CAÍDA DE CONTAGIOS Y AUMENTO DE VACUNAS
México es el cuarto país con más muertes por el coronavirus con casi 220 mil decesos y más de 2.36 millones de contagios, pero las autoridades afirman que hay 15 semanas consecutivas de reducción tras el pico máximo de enero.
De hecho, el país sólo reportó 57 nuevas muertes por la pandemia este domingo, la menor cifra en 12 meses.
En este contexto, la capital del país pasó por primera vez del semáforo epidemiológico naranja, de peligro alto, al amarillo, lo que deja atrás las escenas de enero de calles repletas de gente que buscaba oxígeno y de “cacerolazos” de restauranteros que clamaban abrir.
“Agradezco nuevamente a toda la ciudadanía por el esfuerzo y disciplina en el uso de cubrebocas, sana distancia y lavado de manos. Sigámonos cuidando, no bajemos la guardia”, manifestó la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, en sus redes sociales.
Además, el Gobierno federal presume de haber vacunado a más de 21 millones de personas con al menos una dosis, cumplir su meta de cubrir a más de 11 millones de adultos mayores de 60 años en abril e iniciar este mes con la inmunización de personas de 50 a 59 años.
Aun así, hay ciudadanos que aún mantienen la cautela, como Lourdes Orta, quien salió temprano a pasear al centro con su hija antes de la llegada masiva de personas por el festejo del Día de las Madres.
“Con base en cómo han resultado las cosas y que la hospitalización ha bajado, pues yo creo que está bien, siempre y cuando sigamos teniendo el cuidado, por supuesto, porque no está controlado todavía”, indica.
REPUNTE DE VENTAS
Tras un desplome de 80 por ciento en las ventas por el Día de la Madre en 2020, ahora se esperan ingresos por 33 mil millones de pesos (mil 650 millones de dólares), cerca del 70 por ciento del nivel previo a la pandemia, según la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco Servytur).
Mientras los cierres y el ascenso de los contagios marcaron el 10 de mayo anterior, este año han reabierto los panteones, los mercados de flores y otros negocios no esenciales.
Para Carolina Méndez, quien trabaja en la academia de belleza Glamour, frente a la concurrida estación de metro Insurgentes, es evidente que “ya hay más gente, ya hay más movimiento”.
“Apenas estamos abriendo, tiene como dos semanas que apenas abrimos, y la verdad ya era mucho que hiciéramos dos o tres servicios, al principio no hacíamos casi nada, nada más era abrir y ver si llegaban”, contó la estilista.
Pese al optimismo y a la caída de restricciones, hay quienes perciben una lenta recuperación de los ingresos, como Eusebia Monroy, una comerciante que tras recibir la vacuna salió a vender flores a la Zona Rosa de Ciudad de México junto a su nieto.
“Ya no es lo mismo de antes, ya ahorita ha bajado un poco la venta, bastante. No hay dinero”, lamentó.