La FGR indaga si el exfuncionario no reveló a la Secretaría de la Función Pública (SFP) que era el dueño de al menos siete casas y departamentos en la Ciudad de México y Acapulco, por un valor de más de 70 millones de pesos, mientras era el Consejero Jurídico de López Obrador.
Ciudad de México, 10 de febrero (SinEmbargo).– Julio Scherer Ibarra, exconsejero Jurídico de la Presidencia de la República, estaría siendo investigado por la Fiscalía General de la República (FGR) por supuesto enriquecimiento ilícito y lavado de activos, al presuntamente ocultar que era dueño de al menos siete inmuebles durante su estancia en el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, reveló este viernes una investigación del diario El País.
La investigación, realizada por el reportero Zedryk Raziel, detalla que la investigación comenzó en mayo de 2022 “a partir de una denuncia presentada por el abogado Paulo Díez Gargari”, de acuerdo con documentos obtenidos por el periódico español. La carpeta fue turnada al Fiscal Especial de Control Competencial, Juan Ramos López, afirma la nota, quien es uno de los funcionarios más allegados al Fiscal General, Alejandro Gertz Manero.
La FGR indaga si el exfuncionario no reveló a la Secretaría de la Función Pública (SFP) que era el dueño de al menos siete casas y departamentos en la Ciudad de México y Acapulco mientras era el Consejero Jurídico de López Obrador. El País, con documentos en la mano, asegura que las propiedades fueron adquiridas por 70.7 millones de pesos, unos 3.7 millones de pesos, incluido un inmueble que comenzó a edificarse inmediatamente después de salir del Gobierno, en septiembre de 2021.
SCHERER RESPONDE: ES PARTE DE LA CAMPAÑA EN MI CONTRA
Scherer Ibarra se defendió de las acusaciones. “Este asunto es un episodio más de la campaña que se ha emprendido en mi contra para desacreditarme”, le dijo al reportero del diario español, aunque evitó referirse a los inmuebles. “Nada de lo que ahí se menciona [en la denuncia] tiene validez alguna, toda vez que se presentaron los documentos a tiempo y se actuó con total transparencia y legalidad”.
Además, el exconsejero de Presidencia aseguró que “desafortunadamente la política nos llevó a estas cosas”. “Lamento mucho que el señor Paulo Díez sea utilizado como un instrumento para dañar mi imagen y mi reputación”, ha dicho en un sucinto posicionamiento”, concluyó.
Apenas en noviembre, un Tribunal federal confirmó la no vinculación a proceso contra tres abogados y el asesor financiero de Banco Afirme que presuntamente extorsionaron al litigante Juan Collado Mocelo por órdenes de Scherer Ibarra cuando era Consejero Jurídico.
La Magistrada Graciela Rocío Santes fue la encargada de confirmar el auto de no vinculación a proceso inicialmente dictada por el Juez de control Felipe de Jesús Delgadillo Padierna; sin embargo, también revocó la cancelación de la investigación de la Fiscalía General de la República (FGR) dictada por dicho Juez.
De acuerdo con la resolución del Cuarto Tribunal Unitario en Materia Penal de la Ciudad de México (CdMx), se hallaron inconsistencias en los argumentos presentados por la FGR, incluyendo 20 elementos de prueba, destacando las declaraciones de Juan Collado y de su hijo; así como un oficio realizado por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF).
Luego de las acusaciones contra Scherer Ibarra de la posible extorsión, publicada por primera vez en el diario Reforma, el exfuncionario había declarado: “No conozco personalmente al señor Collado, ni estoy enterado de las conversaciones de éste con sus abogados. Todo lo demás, son inferencias de mala fe”, sentenció, aunque reconoció que sí se reunió con los hijos del abogado, a petición de ellos, aunque dijo que había referido el caso a la FGR “por ser de su competencia”.
LOS INMUEBLES SEÑALADOS
El Pais detalla supuestamente Scherer García “transfirió las propiedades investigadas por la FGR a un fideicomiso ‘para sus hijos’”, según sus propias fuentes, a través de un fideicomiso. La FGR tiene documentación que supuestamente indicaría que el fideicomiso existe, pero que varios inmuebles no fueron depositados ahí cuando era funcionario federal.
“En todo caso y según el expediente, aunque el abogado ya no sea el titular de algunas propiedades, su nombre aparece como fideicomisario, dejando una puerta abierta a la posibilidad de recuperar la propiedad de los bienes”, reporta el diario español.
El País señaló que Scherer Ibarra “no registró la existencia del fideicomiso al que supuestamente transfirió los siete inmuebles que ahora indaga la Fiscalía” y la FGR sostiene que siguió siendo dueño de varios inmuebles siendo funcionario.
Uno de ellos, una casa en Lomas de Reforma, tiene valor de 27.5 millones de pesos y fue comprada en 1999 por Scherer Ibarra. En agosto de 2021, indica el reportaje de Raziel, dos meses antes de dejar su cargo, transfirió la casa al fideicomiso mencionado. Unos días más tarde, un representante del fideicomiso –de Bancomer– solicitó a la Alcaldía Miguel Hidalgo un permiso de construcción y la obra sigue en curso actualmente, añadió el reportaje, todo esto mientras seguía en un puesto público.
Esto abriría la posibilidad de lavado de dinero para la FGR. “Otro caso es el de un departamento en un condominio localizado en la avenida Paseo de las Palmas, colonia Lomas de Chapultepec, que fue adquirido por el exconsejero presidencial en abril de 2008 a un precio de 4,3 millones de pesos”, enlista El país.
Además, Scherer Ibarra habría comprado dos propiedades más en la capital mexicana, uno en la calle Lago Alberto, colonia Anáhuac, que es un departamento “de 117 metros cuadrados que Scherer adquirió en enero de 2016 por 3.7 millones de pesos”, y otro en la calle de Ámsterdam, en la colonia HIpódromo Condesa, “donde el exconsejero y un grupo de cinco socios adquirieron en septiembre de 2012 una casa con valor de 7.5 millones de dólares”, de la cual Scherer fue asignado un 12.5 por ciento del valor del sitio, por unos 975 mil dólares.
La FGR también tiene bajo su mira dos inmuebles en la zona Diamante de Acapulco, la más exclusiva de la zona, detalla El País. Uno es un departamento en el club El Palmar, fraccionamiento Tres Vidas, que Scherer habría obtenido por 630.8 mil dólares (unos 12 millones de pesos) y “un lote de 800 metros cuadrados con vista a la playa en el condominio Los Riscos, en Punta Diamante”, que habría adquirido por una cifra parecida.
Lo que sí declaró Scherer Ibarra a la SFP fueron dos departamentos por valor de 108 millones de pesos en la CdMx, que supuestamente adquirió mediante una cesión de un fideicomiso en noviembre de 2018, dos semanas antes de asumir la Consejería de Presidencia.
El País señala que los folios reales que el reportero consultó demuestran que “ambas propiedades están en un condominio en la colonia Polanco” e incluso el exservidor público vendió una de estas propiedades en 2019 a Edgar Daniel Murillo Karam, herano del exprocurador de Enrique Peña Nieto, Jesús Murillo Karam, por poco más de 66 millones de pesos.