El BM prevé que la economía mundial crecerá un 1.7 por ciento este año y un 2.7 por ciento en 2024; mientras que para Latinoamérica estima que el crecimiento se desacelere marcadamente a un 1.3 por ciento en 2023 para recuperarse al 2.4 por ciento en 2024.
Por Gisela Salomon
MIAMI, 10 de enero, 10 de enero (AP).— El panorama de la economía internacional luce complicado y América Latina no es una excepción: después de Europa es la región que menos crecerá en todo el mundo en 2023, de acuerdo con previsiones del Banco Mundial (BM).
En su más reciente informe “Perspectivas económicas mundiales” difundido el martes, el BM prevé que la economía mundial crecerá un 1.7 por ciento este año y un 2.7 por ciento en 2024. Para Latinoamérica estima que el crecimiento se desacelere marcadamente a un 1.3 por ciento en 2023, menos de la mitad del 3.6 por ciento de 2022, para recuperarse al 2.4 por ciento el año próximo.
“La crisis que enfrenta el desarrollo se está intensificando a medida que las perspectivas de crecimiento mundial se deterioran”, dijo David Malpass, presidente del Grupo Banco Mundial. “Los países emergentes y en desarrollo se enfrentarán a varios años de crecimiento lento”, manifestó en un comunicado de prensa.
A sharp, long-lasting slowdown is expected to hit developing countries this year. The global economy is projected to grow by just 1.7% in 2023. #WBGEP2023
— World Bank (@WorldBank) January 10, 2023
Las previsiones se revelaron en momentos en que existe una elevada inflación, aumento de las tasas de interés, reducción de inversiones y un impacto por la invasión rusa en Ucrania.
El BM advirtió que “dada la frágil situación económica” cualquier acontecimiento nuevo adverso podría llevar a la economía mundial a una recesión, la primera vez en más de 80 años con dos recesiones mundiales en la misma década. Entre los hechos que podrían impulsarla mencionó una inflación mayor a la prevista, aumentos abruptos en las tasas de interés para contenerla, el resurgimiento de la pandemia de la COVID-19 y la intensificación de las tensiones geopolíticas.
La región de Europa y Asia Central será la que mayor reducción de la actividad tenga en 2023, a un 0.1 por ciento, de acuerdo con las previsiones del BM. En 2024, el crecimiento llegaría al 2.8 por ciento. En Oriente Medio y Norte de África retrocedería a 3.5 por ciento este año; en África subsahariana se desaceleraría a 3.6 por ciento en 2023; en Asia Oriental y el Pacífico caería a 4.3 por ciento y en Asia meridional a 5.5 por ciento.
En el caso de Latinoamérica, la desaceleración refleja los esfuerzos de las autoridades monetarias por controlar la inflación y los efectos secundarios de un panorama internacional poco alentador.
El BM espera que Brasil crezca un 0.8 por ciento en 2023, México un 0.9 por ciento, Argentina un dos por ciento, Colombia un 1.3 por ciento y Perú un 2.6 por ciento. La economía de Chile, en tanto, se contraería un -0.9 por ciento. Además, México crecerá 2.3 por ciento en 2024, según las estimaciones.
En América Central, por otra parte, se prevé que el crecimiento caerá a 3.2 por ciento en 2023 por el impacto de la desaceleración de la economía de Estados Unidos en las exportaciones y el ingreso de remesas.
El BM dijo que las proyecciones señalan un estancamiento en el nivel de vida en la primera mitad del decenio de 2020, con un crecimiento promedio del Producto Interno Bruto per cápita de 0.6 por ciento anual entre 2020 y 2024.
“Esto podría dificultar la lucha contra una amplia gama de problemas sociales y agravaría los obstáculos que impiden un desarrollo sostenido e inclusivo en América Latina y el Caribe”, advirtió el organismo con sede en Washington.