El fabricante se disculpó con la FAA, el Congreso y con sus clientes a la par que ha subrayado que desde entonces ha abordado cambios "significativos" para asegurar sus procesos de seguridad y organización. También anunció que, a raíz de estos mensajes, tomará las medidas disciplinarias oportunas.
Nueva York, 10 de enero (EFE).- Mensajes internos de la aeronáutica Boeing publicados en el marco de la investigación que llevan a cabo el Congreso y Senado de Estados Unidos revelan la desconfianza de técnicos y empleados sobre la seguridad del último modelo de Boeing, el 737 Max, implicado en dos accidentes mortales en 2018 y 2019.
"El 737 Max está diseñado por payasos que a su vez están supervisados por monos", se puede leer en uno de los correos a los que ha accedido Efe y que han sido divulgados después de que el fabricante enviase en diciembre cuantiosa documentación interna a los legisladores estadounidenses que investigan el procedimiento que resultó en la puesta en servicio del 737 Max.
Los tres tomos hechos públicos con mensajes y correos electrónicos de trabajadores y técnicos previos a los accidentes y a la aprobación del Max podrían sugerir que esa puesta en servicio fue aprobada bajo falsos pretextos por la Administración Federal de Aviación (FAA por sus siglas en inglés).
"Aún no me ha perdonado Dios lo que cubrí el año pasado", decía uno de los mensajes, al parecer en referencia a interacciones entre el fabricante Boeing y la FAA con respecto a los problemas encontrados en los simuladores.
"¿Pondrías a tu familia en un avión entrenado en un simulador del Max?", pregunta un empleado a otro, que responde con un "no".
En un comunicado, Boeing ha señalado este jueves que el contenido de algunos mensajes son "completamente inaceptables" y no representan los "valores" de la compañía".
De esta forma, el fabricante se ha disculpado con la FAA, el Congreso y con sus clientes a la par que ha subrayado que desde entonces ha abordado cambios "significativos" para asegurar sus procesos de seguridad y organización.
Sobre las dudas en la seguridad que reflejan algunos de los correos, Boeing ha señalado que tienen plena confianza en que los simuladores del Max funcionan correctamente después de que se hayan sometido a más de veinte calificaciones regulatorias de la FAA y otros reguladores internacionales.
Asimismo, Boeing también ha anunciado que, a raíz de estos mensajes, tomará las medidas disciplinarias oportunas.