Ciudad de México, 10 de enero (SinEmbargo).- Hace unos meses, Gustavo Ayón paralizó al país con una memorable actuación en el pre-mundial de Venezuela que significó un sobresalto emocional que el basquetbol mexicano no estaba acostumbrado a darle al país. Un equipo vestido de verde se coronó para sorpresa del continente, ganándose un lugar para el Mundial que España organizará durante este año. Las características del pívot nayarita, comandaron a la quinteta nacional, para después irse a la mejor liga del mundo donde se ha ganado un lugar desde 2011, deambulando por cuatro equipos, sin encontrar la consistencia deseada.
Emblema de la Universidad Popular Autónoma (UPAEP), hoy sufre la indiferencia de Mike Budenholzer, entrenador de los Halcones de Atlanta, equipo al que llegó en julio del año pasado, tras quedar libre de los Bucks de Milwaukee. La imagen de Ayón sumido en el banquillo, apoyando a sus compañeros en cancha, es una constante durante los partidos del equipo originario de Georgia. El camino de la estrella mexicana, ha sido marcado por la falta de minutos y la alta competencia interna que se ha ido encontrando en cada equipo al que llega. En Milwaukee, no le fue renovado su contrato por la cantidad de jugadores en su posición.
Llegó libre a Atlanta donde se esperaba que sus apariciones aumentaran en cantidad y calidad. Sin embargo, después de sufrir una lesión en su tobillo izquierdo, ha regresado para disputar tan solo 13 partidos y sólo tres puntos anotados. El mexicano no sufre algo nuevo, sin embargo, tras el éxito internacional en el torneo clasificatorio para la justa española esperaba que sus credenciales aumentaran. Con la confianza un poco desencajada, sabiendo que es un jugador mexicano distinto, acepta que la situación es muy pesada. La serenidad del basquetbolista de Nayarit, es la última fuerza de flaqueza que le queda.
Ídolo en la institución educativa poblana, se encuentra lejos de la gloria que vivió en su etapa como estudiante o en Europa, donde llegó a ser el jugador revelación de la liga española de basquetbol. En México se cuestiona sobre si la falta de actividad, podría afectar al campeonato que se llevará acabo en septiembre, con seis ciudades listas. Mientras Gustavo no figura como posibilidad en el roster de Atlanta, es la esperanza mexicana para realizar algo histórico. La afición, aletargada durante mucho tiempo debido al conflicto de intereses burocráticos, esperan que su mayor baluarte no caiga en un desanimo.
En entrevista para ESPN, Ayón tiene claro que la fórmula que le ha dado las mayores alegrías en su carrera, es lo único que lo mantendrá a flote ante la difícil situación. “Seguir trabajando, mantenerme físicamente y esperar que se me den buenos minutos a la hora de jugar. Espero que se llegue la oportunidad de jugar muchos minutos y poder tener ritmo de juego”, declaró esperanzado. Mientras eso sucede, la NBA continua con su ritmo trepidante, ubicando a los Halcones de Atlanta con un registro de 19-17, ubicados en el tercer lugar de la conferencia Este.