Los negocios de alimentos y bebidas generan empleo para más de 2 millones de personas en el país, de acuerdo con cifras recientes del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). El flujo de efectivo que producen más de 1 millón 200 mil de estos negocios permite que más de 3 millones de personas tengan sustento, y que la economía del país se mantenga en movimiento.
Ciudad de México, 9 de diciembre (SinEmbargo).– La tienda de la esquina, las fondas y restaurantes cercanos a nosotros son más que un negocio. En algunos casos se convierten en un vínculo de amistad y familiaridad que persiste al paso de los años. Esto hace que nuestra experiencia de compra sea distinta a los otros canales de venta.
Sin embargo, el contexto post-COVID ha traído nuevos retos para estos emprendedores que, a través del autoempleo, buscan la estabilidad e independencia económica. Las nuevas normas de distanciamiento social e higiene han sido un catalizador para que miles de emprendimientos transformen sus servicios, ampliándolos con entregas a domicilio y programación de pedidos para llevar, a través de plataformas y aplicaciones digitales, todo esto con la finalidad de mantenerse abiertos y en funcionamiento.
Como propuesta para fortalecer al sector, la Industria Mexicana de Coca-Cola (IMCC) en alianza con otros actores como Concanaco, Coparmex, Pro Mujer, Kellogg´s, Mars, Mondelēz México, Wabi2you, entre otros, impulsa iniciativas en pro del empoderamiento económico de los emprendimientos, ayudándolos a responder a las preocupaciones de los compradores en época de epidemia. A través de programas como “Mi tienda segura” y programas de soporte se les brinda acompañamiento empresarial y capacitación en el ámbito económico, social y personal.
IAB México (Interactive Advertising Bureau) estima que, hasta antes del inicio de la pandemia, aproximadamente el 99 por ciento de los pequeños comercios no contaban con las herramientas y competencias para responder a las necesidades generadas por esta nueva normalidad, y que desde marzo pasado a la fecha el uso de plataformas y herramientas digitales ha crecido lo equivalente a tres años.
Las necesidades y hábitos de consumo se han modificado, y la contingencia ha hecho necesaria la innovación en todos los sectores. Esto ha sido factor para que la industria privada apoye los esfuerzos del canal tradicional y ponga especial atención en las nuevas necesidades del comercio local.
En este último periodo, la IMCC, integrada por ocho grupos embotelladores y dos plantas de reciclaje, produjo y distribuyó 50 mil mamparas y más de 200 mil caretas que se emplearon, en parte, para responder a las preocupaciones de los compradores y comerciantes en época de epidemia.
Desde 2012, Fundación Coca-Cola México y la Industria Mexicana de Coca-Cola colaboran con organizaciones civiles para beneficiar a más de 179 mil mujeres mexicanas en la alianza con el Tecnológico Nacional de México y sus distintas sedes en todo el país.
Los negocios locales son espacios que concentran la identidad de las familias mexicanas y son el punto de contacto que permite que el intercambio comercial sea una experiencia hecha a la medida de los deseos y necesidades de los clientes. Para mantener la economía del país en movimiento es necesario que ¡Hagamos esto juntos! y sigamos impulsando al comercio de nuestra localidad.