Su nombre ya había sido mencionado dentro del PRD sin que se oficializara nada, hasta hace unos días que Silvano Aureoles Conejo confirmó que sí contenderá por la candidatura de la oposición a la Presidencia, aún cuando él es investigado por corrupción y pese a que la alianza se encuentra fracturada.
Ciudad de México, 9 de octubre (SinEmbargo).– Con la fórmula implementada por Andrés Manuel López Obrador de recorrer todo el país, otro integrante de la oposición busca construir su candidatura presidencial. Se trata de Silvano Aureoles Conejo, exgobernador perredista de Michoacán investigado por supuestamente haber encabezado una red de corrupción, quien se sumó la semana pasada a la lista de presidenciables de la oposición al anunciar sus intenciones de abanderar este bloque, el cual se encuentra fracturado a partir de la aprobación de la reforma de la Guardia Nacional en el Congreso.
Antes de Aureoles, el panista Ricardo Anaya —quien es uno de los mejores aspirantes de la oposición para 2024, según las encuestas— inició en enero de 2021 un recorrido por mil municipios del país con la intención de construir su candidatura. El plan le duró poco, pues en agosto de ese año dejó el país en medio de una investigación de la Fiscalía General de la República (FGR) por su participación en el caso Odebrecht. Una situación similar se dio con el exgobernador panista de Tamaulipas, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, quien fue visto durante meses como una de las cartas fuertes del Partido Acción Nacional (PAN) para la Presidencia de la República y que actualmente se desconoce su paradero al tiempo que enfrenta una orden de arresto por delincuencia organizada.
Ahora, el exgobernador de Michoacán, uno de los contados perfiles con los que el Partido de la Revolución Democrática (PRD) asegura que podrá contender en 2024, anunció su recorrido por los 32 estados del país en una conferencia de prensa en la que minimizó las investigaciones en su contra por corrupción: “el que nada debe, nada teme”, dijo.
SinEmbargo dio a conocer el pasado 27 de abril la existencia de una denuncia presentada por la Secretaría de Hacienda ante la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción en contra de Silvano Aureoles Conejo, la cual detalla que el perredista tejió una presunta red de corrupción en Michoacán, en la que están involucrados familiares y políticos que hoy ocupan cargos como diputados y senadores.
En la denuncia se vinculan nombres como Carlos Herrera Tello, exsecretario del Gobierno de Michoacán y excandidato a la gubernatura por la alianza del PRD-PRI-PAN; Edna Gisel Díaz Acevedo, Diputada del PRD por Uruapan quien fue fotografiada en San Lázaro junto al asesor italiano Paolo Salerno en el marco de la discusión de la Reforma Eléctrica; su exesposa Soledad María Geymonat Rompani; sus hijas Elizabeth y Sofía; y sus medios hermanos María Isabel, Juan Luis, Antonio y Carlos García Conejo.
Al anunciar su gira por el país, que inició el viernes en Tabasco, el estado del Presidente, Silvano Aureoles Conejo no profundizó en las acusaciones en su contra, pero sí aclaró que sus planes para 2024 contemplan ser el abanderado del bloque opositor, el mismo que en las últimas semanas se ha fracturado a partir de la reforma a la Guardia Nacional que extendió la presencia de las Fuerzas Armadas en las calles hasta 2028. El PAN reclamó que legisladores de sus “aliados”, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el PRD hayan votado a favor de esta medida. Es el caso del Senador perredista Antonio García Conejo, hermano del exmandatario.
“Yo estoy convencido que se tiene que construir, se tiene que consolidar un amplio frente opositor, una alianza o coalición fuerte, que sea competitiva en el 24 frente al oficialismo. Soy de vocación dialoguista y aliancista y voy a luchar porque eso suceda. Mi apuesta no es a que vayamos aislados, aunque pudiera ser muy atractivo para mí caminar en la ruta de construir sólo desde el PRD, no es suficiente eso, hay que ser muy realistas, y voy a luchar a que vayamos juntos en esta amplia coalición”, comentó al respecto Silvano.
El nombre de Silvano Aureoles ya había sido sumado a la lista de aspirantes de la oposición a la presidencia por el dirigente nacional perredista, Jesús Zambrano, quien se negó a reconocer que el exmandatario perdió el último bastión que le quedaba al Sol Azteca en el país.
“Para la Presidencia. Como candidato posible (está Silvano Aureoles), para ponerlo sobre la mesa. No perdimos la elección en Michoacán, nos la arrebató el narco, que es otra cosa. Y por lo tanto Silvano no sale derrotado en términos políticos. Por eso tuvo la valentía de plantársele a López Obrador en Palacio Nacional, hacer viajes internacionales”, comentó Jesús Zambrano a los periodistas Alejandro Páez y Álvaro Delgado como parte del proyecto La Disputa por México, una serie documental y un libro editado por Harper Collins.
Lo cierto es que en las encuestas no figura Silvano Aureoles, mientras que el legado que dejó en Michoacán se encuentra en la mira de las autoridades por haber cometido presuntamente actos de corrupción, una situación que se suma a la violencia con la que entregó al estado.
La ola de violencia en Michoacán mantiene un crecimiento sostenido desde 2015 a la fecha. Este periodo, en el cual los homicidios iniciaron un aumento constante, corresponde con el gobierno de Silvano, pero también alcanza a la administración del morenista Alfredo Ramírez Bedolla, quien no ha podido contener este problema, como muestran las cifras.
La información proporcionada por el Secretario Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) da cuenta de cómo a partir de 2015 se dio un crecimiento sostenido de los casos de homicidio doloso. De este año a 2021, muestran los mismos datos, hubo una alza del 186.97 por ciento, al pasar de 952 víctimas en 2015 a 2 mil 732. En tanto, en la última década la violencia homicida se disparó 261 por ciento al pasar de 773 personas asesinadas en 2011 al total de víctimas reportadas en 2021.
Con estas cifras a cuestas, y pese a no figurar en las encuestas, Silvano Aureoles Conejo se autodestapó para 2024 minimizando los señalamientos en su contra y apostando por un bloque opositor que cada semana se fisura más.