Éste es el cuarto caso que se hace público en poco más de un mes que involucra a agentes de seguridad de la SSC denunciados por abuso sexual o violación. El tercer caso que se ha hecho público ocurrió el pasado 27 de agosto, cuando una mujer que acudió a un Ministerio Público de la colonia Morelos a levantar una denuncia por amenazas fue presuntamente violada por un policía en esas instalaciones.
Ciudad de México, 9 de septiembre (SinEmbargo).– Un nuevo caso de un policía de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) acusado por una mujer de haberla agredido sexualmente y, ahora, por robarle su celular es investigado por la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México (PGJ-CdMx). Los hechos se dieron el pasado 7 de septiembre en calles de Tepito, en la Alcaldía de Cuauhtémoc.
De acuerdo con información de la Procuraduría capitalina, un mujer de 25 años de edad denunció que primero la interceptó una supuesta servidora pública en la calle Jesús Carranza, en esa zona de la colonia Morelos, quien le revisó la mochila que portaba, y luego la dejó ir al no encontrar nada.
Metros más adelante, un Policía Preventivo la volvió a parar con el pretexto de que la volvería a revisar. La mujer denunció que el agente le realizó tocamientos en el cuerpo y le robó su teléfono celular.
La Procuraduría capitalina informó que el caso fue remito a la Fiscalía Especial para la Investigación de Delitos Cometidos por Servidores Público, por ser hechos de su competencia.
De acuerdo con el medio Contra Réplica, la carpeta de investigación abierta por el caso detalla que la mujer acudió a Tepito el pasado sábado a comprar un cargador para su celular cuando fue agredida por el agente de seguridad.
Éste es el cuarto caso que se hace público en poco más de un mes que involucra a agentes de seguridad de la SSC denunciados por abuso sexual o violación.
El primero de los casos recientes se registró el pasado 3 de agosto, cuando una joven de 17 años de edad regresaba a su casa en calles de la Alcaldía de Azcapotzalco y una patrulla la interceptó. Luego, denunció la víctima, cuatro policías la violaron. El caso causó gran indignación y la exigencia a las autoridades para que los presuntos agresores fueran castigados. Sin embargo, la investigación se vio entorpecida porque –como la misma Procuraduría capitalina aceptó– luego de la filtración de información personal de la víctima, ella y su madre decidieron no seguir colaborando con las autoridades.
Un segundo caso se registró la noche del 8 de agosto, cuando una joven llegó a la estación del Metro Zócalo, donde denunció que un elemento de la Policía Bancaria e Industrial la había violado en las instalaciones del Museo Archivo de la Fotografía del Centro Histórico. En ese recinto, la víctima realiza su servicio social. Ese mismo día, elementos de la SSC detuvieron al agente que fue identificado por la adolescente.
El tercer caso que se ha hecho público ocurrió el pasado 27 de agosto, cuando una mujer que acudió a un Ministerio Público de la colonia Morelos a levantar una denuncia por amenazas fue presuntamente violada por un policía en las instalaciones.
En esa ocasión, el propio titular de la SSC, Jesús Orta Martínez, confirmó que la víctima fue agredida luego de presentar una denuncia.
“Ella fue a hacer una denuncia y según lo narra en la propia denuncia que ella refiere que es atacada en una de las áreas de la propia Agencia y al dar aviso se le detiene de inmediato al policía, entonces los detalles no los puedo revelar, es un tema de la propia investigación de la carpeta de la imputación, pero la Procuraduría lo está imputando por el caso de violación, tenemos todo el compromiso de que llegue a la última consecuencia”, precisó.
Estos casos detonaron al menos dos manifestaciones de mujeres los días 12 y 16 de agosto para exigir castigo a los policías y no más violencia hacia las mujeres.
Las movilizaciones derivaron en mesas de diálogo entre el Gobierno capitalino y activistas, lo que cual dio como resultado que ayer la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, diera a conocer una serie de acciones urgentes para atender la violencia hacia las mujeres. Entre ellas destaca enviar una iniciativa de Ley al Congreso local y al federal para crear un banco de ADN en la Ciudad de México que incluya la información de agresores sexuales, pero también la de policías y funcionarios de procuración de justicia.