Después de años de escuchar las historias de su abuela, el escritor mexicano Enrique Gabriel Bret Rodríguez les dio forma en Brunilda. Bruja de dos mundos, su primera novela que publicó a sus 77 años. Se trata de la historia de una mujer que hereda todo un legado de conocimientos ancestrales para ayudar a las mujeres a dar a luz, a curar a los enfermos, a sanarlos. El autor habló con SinEmbargo sobre su libro.
Ciudad de México, 8 de agosto (SinEmbargo).– Brunilda no es una bruja cualquiera. Nació bajo el augurio de poder descifrar el significado de los nueve arcanos. Sucesora de una bruja muy poderosa, su abuela Sebastiana, quien le compartirá sus conocimientos desde muy temprana edad, en una época en la que sus dones curativos son vistos como poderes diabólicos. Todo esto la llevará a enfrentarse al rechazo de algunos que desearán su muerte, mientras intenta acabar con una maldición que trae consigo y se interpone en sus sueños.
El relato corresponde a la primera novela de Enrique Gabriel Bret Rodríguez: Brunilda. Bruja de dos mundos, de Editorial de Otro Tipo. En entrevista, el autor compartió que lo que ahí plasma lo construyó a partir de las historias que le contaba su abuela cuando él era niño.
“Son conocimientos que me fueron transmitidos por mi abuela. Nos sentábamos en el pueblo, en las noches para contar de todo, pero a mí me resultaban muy amenos los relatos de mi abuela y se fueron reflejando poco a poco hasta que a mí me gustó empezar a escribir”, expresó.
Con respecto al porqué Brunilda es una bruja de dos mundos, Bret Rodríguez comentó que las mujeres que podían traer al mundo a un niño cuando venía “atravesado”, se les consideraba brujas “porque, pocas podían hacer que viera la luz, el nuevo crío sin maltratarlo, al acomodarlo para que saliera porque venían de pies, pocas eran”
“Entre ellas pues la abuela de Brunilda que se llamaba Sebastiana, entonces claro mezclado con cierta cuestión de fantasía porque así era como nos contaba la abuela. Nosotros creíamos a pie juntillas eso porque uno de chiquillo no sabe cuándo es la fantasía y eso imagínate 5 o 6 años, qué vas a conocer de términos”, expuso.
—¿Brunilda, entonces, se alimenta de una tradición oral? —se le preguntó.
—Sí, de una tradición oral y se van mezclando muchas cosas por ejemplo, en ese tiempo el sacerdocio influía demasiado es decir, no quería mujeres que tuvieran poder entonces el clero estaba en contra de ellas. Son cosas que se dicen y en esa época, pues era sacrilegio mencionar no imagínate 1890, con la fecha vas a saber que el clero era el que dominaba todavía. Tengo los conocimientos. He leído algunas cosas y todo se fue mezclando, digo en el delirio que debe de tener un escritor se mezclan cosas y aparentemente, pues las aves, te llegan así de momento.
No obstante, Enrique Gabriel Bret Rodríguez aclaró que su personaje Brunilda no es una bruja cruel o terrorífica, sino al contrario es una bruja que ayuda a su pueblo a los que sufren. “Si tú ves es tan leal y tiene el agradecimiento, es un personaje que muestra todos los valores de un ser humano benigno, es una mujer agradecida y también me lo han dicho que pues realmente tiene valor porque es casi una historia feminista”.