Las inconformes pintaron una cruz color rosa de más de 30 metros frente a la plancha del Zócalo con la leyenda “No + feminicidios”.
Ciudad de México, 9 de agosto (SinEmbargo).- Ayer, familiares de víctimas de feminicidio exigieron justicia a través de la pintura de una cruz gigante en el Zócalo de la Ciudad de México, donde permanecen desde hace más de un mes, en espera de poder reunirse con el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Medios de circulación nacional reportaron que las inconformes pintaron una cruz color rosa de más de 30 metros frente a la plancha del Zócalo, con la leyenda “No + feminicidios”.
Las manifestantes han exigido que se modifiquen las leyes para endurecer los castigos contra feminicidas mayores de 15 años. También han externado preocupación por la falta de apoyos para los huérfanos de mujeres asesinadas.
En ese sentido, la activista Malú García Andrade dijo al diario Reforma que se debe modificar la Ley de Orfandad, pues, aunque el feminicida sea el esposo, legalmente la familia paterna tiene preferencia para quedarse con la custodia de los hijos. Recordó que este año han sido asesinadas más de mil 680 mujeres.
Lidia Florencio, madre de Diana, asesinada en 2017 en Chimalhuacán, Estado de México, comentó al diario La Jornada que con la cruz buscan recuperar la leyenda “México feminicida”, la cual fue borrada recientemente de la Plaza de la Constitución por personal de limpieza. Subrayó que en promedio se cometen 11 feminicidios diarios.
Florencio denunció que, a pesar de tener un mes plantadas frente a Palacio Nacional, no han sido recibidas por el Ejecutivo. Mientras tanto, dijo, continúan esperando una una fecha para reunirse con el mandatario mexicano.
Adelantó que convocarán a familiares de víctimas de feminicidio en una fecha próxima para escribir sus nombres sobre la cruz que pintaron, ya que, aseveró, sus casos no deben olvidarse.
