La farmacéutica que produce el antiviral, la californiana Gilead Sciences, dijo que donó todas las reservas que tiene actualmente para ayudar al país en su respuesta a la pandemia.
WASHINGTON (AP) — En un intento por atajar otro frenesí caótico para obtener suministros escasos, la Casa Blanca indicó el viernes que intervendrá para ayudar a coordinar la distribución del primer fármaco que parece ayudar a algunos pacientes de COVID-19 a recuperarse más rápido.
La secretaria de Prensa Kayleigh McEnany les dijo a los reporteros que la doctora Deborah Birx, integrante del equipo especial de la Casa Blanca para el control del coronavirus, se convertirá en una de las principales asesoras sobre dónde se distribuirá la medicina intravenosa remdesivir.
Está creciendo la alarma en la comunidad médica en torno al acceso al fármaco, que la Administración de Alimentos y Medicamentos autorizó la semana pasada para su uso de emergencia.
Birx es “la persona que está revisando constantemente las cifras, revisando constantemente los datos”, dijo McEnany. “Y ella realmente tiene la mejor comprensión acerca de cómo debería ser distribuido eso”. McEnany no proporcionó detalles adicionales.
De igual forma a lo que ha ocurrido con el equipo de protección personal y las pruebas para detectar el coronavirus, la disponibilidad de remdesivir podría convertirse en otra debacle previsible en la respuesta de la nación a la pandemia del coronavirus.
“Comprensiblemente, los hospitales con pacientes con COVID-19 están desesperados por acceder al producto”, dijo el jefe de una organización nacional que representa a los farmacéuticos de los hospitales en una carta el vicepresidente del país, Mike Pence, antes esta semana.
“El proceso para que los hospitales accedan al medicamento sigue sin estar claro”, señaló Paul Abramowitz, director general de Sociedad Estadounidense de Farmacéuticos del Sistema de Salud, en su carta.
La farmacéutica que produce el antiviral, la californiana Gilead Sciences, dijo que donó todas las reservas que tiene actualmente para ayudar al país en su respuesta a la pandemia.
Pero según Abramowitz, el suministro inicial será “muy limitado”, 1,5 millones de dosis que se traducen en entre 5 y 10 días de tratamiento para 140 mi enfermos.
“Está claro que la mayoría de los pacientes que tienen COVID-19 ahora no lo recibirán”, señáló Abramowitz a Pence.
Gilead dijo el viernes que empezó a distribuir el remdesivir el 2 de mayo al mayorista farmacéutico AmerisourceBergen, que ha sido elegido como único distribuidor del producto.
“Los suministros iniciales se distribuyeron en cuestión de días a un primer grupo de hospitales identificados por el gobierno”, dijo Gilead en su comunicado. “Los hospitales con unidades de cuidados intensivos y otros que el gobierno considere los más necesitados tendrán prioridad”.
Hace apenas unas semana, Trump anunció en la Casa Blanca que el remdesivir había recibido una autorización de urgencia de la agencia del medicamento nacional para su uso.
La Administración de Alimentos y Medicamentos actuó en base a los resultados preliminares de un estudio patrocinado por el gobierno que mostró que el tratamiento reducía el tiempo de recuperación de los pacientes con coronavirus hospitalizados en un 31%, el equivalente a un promedio de cuatro días..