Ciudad de México, 9 de mayo (SinEmbargo).– En México existe una cultura de corrupción que ha llegado a niveles que permiten que cualquier empresa nacional o extranjera “nada más tenga que acordar los montos de la comisión” con el Gobierno en turno para ganar un contrato o empezar un negocio, algo de lo que se ha beneficiado el “cártel español” en nuestro país.
El escritor y periodista Oriol Malló Vilaplana dijo a SinEmbargo que uno de los principales beneficios para que las empresas españolas, y para casi cualquier firma nacional y extranjera, puedan concretar e iniciar negocios en México es la “cultura de la corrupción […] que facilita que cualquier empresa nada más tenga que acordar los montos de la comisión”.
Incluso en el país hay una competencia entre “quién le entra y quién no, o quién consigue más rápido el conecte con el Secretario o con el Gobierno en turno, sea federal o local, esa es la clave”.
Malló Vilaplana, autor del libro El Cártel Español, recordó que en México “siempre ha habido una red española de emigrantes económicamente muy bien ubicados, desde Femsa [José Antonio Fernández], el socio de Slim [Juan Antonio Pérez Simón], hablamos de Juan Sánchez Navarro [de Grupo Modelo], hablamos de todo el grupo de Vázquez Raña, Olegario y el fallecido Mario. Una red española muy vieja, bancos y demás, que aprovecharon el empuje del Gobierno español para tener cartas de presentación vía el Rey, vía Felipe González [ex Presidente de España], o vía [el también ex mandatario español José María] Aznar, ante sus pares mexicanos, desde [Carlos] Salinas, hasta la época de [Ernesto] Zedillo, quien tenía una gran amistad con Aznar y la cual se ratificó en la época de [Vicente] Fox”.
Estos emigrantes “poderosos”, explicó el periodista, saben ejercer los contactos y las formas entre Madrid y México, lo que explica las facilidades que han encontrado para hacer negocios en México.
“La misma estructura política y de corrupción en México, la misma conversación que tuvo el de OHL con el Secretario de Comunicaciones mexiquense –a quien en audios filtrados en Youtube se le escucha en una presunta transacción para inflar los precios del Viaducto Bicentenario–, la pudo haber tenido cualquier empresario”, detalló.
En el caso de empresarios de países de habla inglesa, indicó, los negocios se tienen que hacer por medio de “coyotes”, en cambio en el caso de la cultura hispano-mexicana “es más sencillo porque el ‘coyotaje’, la intermediación, son cosas habituales, casi están en el ADN entre la gente que ha estado en la política en España y en México”.
“Es como si tuviéramos un mismo ecosistema político y económico, basado en la corrupción, en la amistad y en el compadreo, y también en el ‘coyotaje'”, abundó.
En México “el cártel español” está en toda su operación, incluso en la cuestión de los sueldos, en América cualquier ejecutivo español se cobra lo que no se cobra en su país. Incluso superando los límites normales entre altos ejecutivos, por esa tendencia a aprovechar la ocasión de servirse con la cuchara grande acá en América”, destacó.
Otro de los elementos que existen y favorecen a los empresarios españoles en la cultura corporativa mexicana, es “que depende completamente de pagarle a los secretarios de Gobierno hoteles exclusivos en playas”.
Explicó que hay dos rubros donde “la mordida es esencial”, que son el de obras públicas, concesiones, y el tema de trenes o el Metro en el caso del Distrito Federal. “Ahí las grandes empresas compiten por quién le entra más rápido y quién tiene la mejor red o agenda de amigos”, dijo Malló.
También explicó que uno de los errores clásicos de las empresas españolas, es cuando no intervienen con operadores locales en México.
“Es decir si un español intermedia en reinos como el mexicano, que funciona con una clave de poder muy estrictas, con unas mafias muy estrictas, e intervienen por la libre, acaba sucediendo, por ejemplo lo que se ve en la conversación [entre el presidente del consejo de administración de OHL, Juan Andrés de Oteyza, y Pablo Wallentin, representante de la firma]”, sostuvo.
El escritor ha planteado que desde Manuel Ávila Camacho, Presidente de México de 1940 a 1946, no hay un Presidente de México que no le haya hecho un gran favor a un español.
Insistió en que en que existe una muy vieja relación entre la política mexicana y las empresas españolas, donde hay negocios y hay dinero, incluso, dijo, si el representante de OHL México, Pablo Wallentin, le pagó al Secretario de Comunicaciones del Estado de México Apolinar Mena Vargas, más de cien mil pesos nada más para cinco días de vacaciones, “si esto fue una aportación de OHL al Gobierno del Estado de México, imaginemos cuánto hay para las campañas” políticas en el país.
Son muchas las empresas de origen español que se encuentran en México, entre ellas bancos, como BBVA Bancomer, hoteles como NH Hoteles y Barceló, constructoras, como OHL, compañías de energía como Iberdrola y Abengoa, que han encontrado en el país el clima adecuado para hacer crecer sus negocios, aún a cambio de comisiones o regales. Algunas firmas, incluso, han llevado a sus filas a funcionarios y ex funcionarios del Gobierno mexicano, para probablemente así, acceder a algún tipo de ventaja.
A continuación algunos ejemplos de escándalos de corrupción, de conflicto de interés, e incluso de violaciones a los derechos humanos, que han protagonizado firmas españolas.
IBERDROLA
22 de marzo de 2013
México es nodal para el negocio mundial de Iberdrola. Según su información corporativa, entre 2014 y 2016, la compañía invertirá 16 mil millones de pesos que se sumarán a los cerca de 36 mil millones que han desembolsado ya en el país a través de sus dos subsidiarias: Iberdrola Generación México e Iberdrola Renovables México.
La firma de energía eólica Iberdrola, la quinta más fuerte de Europa, informó de la construcción del Parque Ecológico de México y del proyecto Dos Arbolitos, en el Istmo de Tehuantepec, una de las zonas con más viento del mundo. Sin embargo, la construcción de esos proyectos se inició pese a la oposición de los pobladores, quienes reclamaban la anulación de los contratos de arrendamiento pues aseguraban éstos se firmaron con engaños y sin una consulta previa de los pueblos.
Iberdrola, en ese momento, ya contaba con tres parques eólicos en México: La Ventosa, de 80 MW, La Venta III, de 102 MW y Bii Nee Stipa, de 26 MW.
24 de abril de 2013
En abril de 2013 Iberdrola nombró miembro de su Consejo de Administración a Georgina Kessel Martínez, Secretaria de Energía en el Gobierno de Felipe Calderón Hinojosa (2006-2012) y directora del Banco Nacional de Obras y Servicios (Banobras) en el mismo periodo.
El diario La Jornada, publicó meses después, que la ex funcionaria del Gobierno federal, había recibido tan sólo en el segundo trimestre del 2013 una remuneración de 35 mil euros, equivalentes a unos 600 mil pesos, según el tipo de cambio del mes de julio de ese año, por sus servicios como consejera externa de Iberdrola.
21 de agosto 2014
El 21 de agosto de 2014, SinEmbargo publicó una nota donde exhibió que Jesús Ramírez Stabros, quien se desempeñaba como Coordinador de Vinculación de la Oficina de la Presidencia de la República, y además era parte del Consejo de Administración de Iberdrola México desde el año 2009 y hasta el 5 de junio de 2014, una de las beneficiarias de la apertura del sector energético en el país.
La función operativa más importante desempeñada por Jesús Ramírez, era en ese momento, como enlace entre Los Pinos y las cámaras de Diputados y de Senadores, papel especialmente intenso durante la pasada reforma constitucional en materia energética.
Stabros aseguró que había renunciado a la consejería de esa firma y que durante el tiempo que trabajó para ella, sus funciones era ofrecer sus puntos de vista sobre las directrices generales del gigante energético ibérico, sin embargo, según él, su puesto era “de total independencia de la compañía”.
Semanas después, el 10 de septiembre Ramírez Stabros renunció a su cargo en la Oficina de Los Pinos, pese a que aseguró que su conducta fue “apegada a derecho” y no significaba ningún conflicto de interés.
JORDI PUJOL FERRUSOLA
Jordi Pujol Ferrusola, hijo del ex Presidente catalán Jordi Pujol, y empresario español fue investigado en su país por cobros encubiertos en un proyecto turístico en México en el que supuestamente habría invertido el equivalente a un peso, y por haber cobrado comisiones, a través de una empresa fantasma, en al menos cinco ayuntamientos por asesorar en proyectos de basura.
30 de julio 2014
El 30 de julio del año pasado, el diario El Mundo, reveló que la Audiencia Nacional de España sospechaba que Pujol Ferrusola cobró una comisión encubierta de Isolux Corsán al vender a este gigante de las infraestructuras, contratista de la autoridad catalana, su parte en un macroproyecto turístico mexicano, obteniendo un beneficio de 13 millones de dólares (9.7 millones de euros) en sólo dos años.
Se trata de un complejo que se extiende sobre una superficie de 800 hectáreas junto al golfo de California, también conocido como Mar de Cortés, en el que se construyó un campo de golf diseñado por el reconocido golfista australiano Greg Norman, dos hoteles con 280 habitaciones y unas 2 mil residencias de lujo destinadas principalmente al público estadounidense y canadiense. El ambicioso proyecto Azul de Cortez englobó un volumen de negocio superior a los 3 mil millones de dólares, y en su génesis se encontraba el hijo del ex Presidente de la región autónoma catalana.
Versiones señalan que Jordi Pujol Ferrusola desembolsó a mediados de 2006 tres millones de dólares para comprar el 21.5 por ciento del desarrollo del negocio, articulando los pagos a través del banco BBVA. Adquirió entonces un paquete del fideicomiso en México. Pero el monto oficial de este nuevo negocio millonario es una incógnita: la cifra oficial de compra que consta en uno de los contratos asciende a “un peso mexicano”.
27 de agosto de 2014
Pujol Ferrusola, según publicó el diario español El País en agosto de 2014, presuntamente cobró en 2010, vía la empresa GBI & Monic Productions, 243 mil euros (más de 320 mil pesos), “por el asesoramiento y estudio del proyecto de centro de tratamiento de residuos situados en el municipio de Ecatepec, Estado de México. Asistencia en el país, búsqueda de emplazamientos en Querétaro, Puerto Vallarta, Acapulco y DF, búsqueda de potenciales socios locales y de asistencia técnica local, con desplazamiento a México”.
Según funcionarios mexicanos entrevistados por el diario los proyectos de Pujol no convencieron. Sin embargo, la influencia de Pujol Ferrusola en México no solo se limitaba a las empresas españolas que querían abrirse un hueco al otro lado del Atlántico, concepto por el que ha cobrado elevadas cantidades, sino que comenzó a tratar con importantes empresarios locales. Ello le abrió las puertas de la gestión pública mexicana.
GRUPO PRISA
Febrero de 2014
El empresario mexicano Roberto Alcántara Rojas, presidente de Grupo Toluca y de la aerolínea VivaAerobús –con vínculos del Grupo Atlacomulco, mismo al que pertenece al Presidente Enrique Peña Nieto– se incorporó, como principal socio individual, al Consejo de Administración de Prisa, consorcio que edita el diario El País.
En julio de ese mismo año, el nuevo director del diario, Antonio Caño, se pronunció abiertamente a favor del Peña Nieto y de sus reformas estructurales: “nosotros apoyamos editorialmente las reformas de Peña Nieto, las hemos apoyado desde el primer día, no tengo por qué ocultarlo, nos parecen bien”, declaró.
Luego, el pasado septiembre, Alcántara Rojas invirtió 100 millones de euros en ese grupo, según aseguró el mismo presidente de la firma Juan Luis Cebrián. Éste último, aseguró a la prensa, que Alcántara no había puesto “prácticamente ninguna condición sólo que El País [siguiera] siendo fiel a lo que ha sido históricamente”.
BANCOMER
Febrero de 2015
A principios de este año luego de una demanda interpuesta por un ex empleado en contra de BBVA Bancomer, se evidenció que ese banco, el más grande en México, adeuda a sus trabajadores pagos de utilidades de los años 2004, 2005 y 2006, por más de 3 mil 300 millones de pesos. Además de que en 2006, declaró en forma complementaria una pérdida en su contabilidad ante el Sistema de Administración Tributaria (SAT) por casi 2 mil millones de pesos.
En marzo de 2009, BBVA reportó ante la Junta Especial Número 14 de la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje que, contrario a lo declarado en su propio informe anual correspondiente a 2005 y 2006, en este último año no pagó impuestos ni utilidades porque aseguró tuvo una pérdida fiscal del ejercicio de más de 2 mil millones de pesos.
ABENGOA
Febrero de 2015
La construcción de la presa El Zapotillo y su acueducto hacia León, Guanajuato, sólo beneficiará a las constructoras que realizarán las obras, entre ellas la española Abengoa, para quien el proyecto representa más de 16 mil millones de pesos, y la cual además no asume ningún riesgo. El contrato de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) con dicha constructora no contempla responsabilidad o sanción alguna para ésta en caso de incumplimiento.
Desde hace meses, la campaña “Las 13 verdades de La Presa El Zapotillo” ha interpuesto diversas amparos para intentar detener la obra, iniciada en 2011, cuando se firmó el contrato la construcción de la cortia de la presa. Además los productores de la zona denuncian que el acueducto terminará por llevarse la escasa agua con que cuenta la comarca.