A pesar de la condena de una década, se espera que el expolicía mexicano salga de la cárcel en unos ocho años debido a que ya ha cumplido dos en una prisión de Nueva York.
Por Claudia Torrens
CIUDAD DE MÉXICO (AP).— Un excomandante de la Policía Federal mexicana acusado de dar información a cárteles de droga sobre operaciones de la agencia antidrogas estadounidense fue sentenciado el miércoles a 10 años de cárcel por conspiración para distribuir cocaína.
Vestido en un uniforme de preso de color caqui, Iván Reyes Arzate le dijo al Juez de la Corte Federal en Brooklyn, en Nueva York, que lamentaba sus acciones y se disculpaba ante los afectados y su familia “por el flagelo de las drogas”.
Aún así, el Juez Brian Cogan impuso su sentencia de 10 años y ordenó que Reyes Arzate pague los 290 mil dólares que supuestamente recibió de un soborno del cártel El Seguimiento 39, asociado al Cártel de Sinaloa.
Reyes Arzate, quien lideró la Unidad de Investigaciones Especiales de la Policía Federal entre 2008 y 2016, se declaró culpable de narcotráfico en octubre ante el Juez Cogan. El mexicano fue enlace durante años entre la agencia antidrogas estadounidense DEA y la policía mexicana. Sin embargo, Estados Unidos lo acusa de entregar información a El Seguimiento 39 en 2016.
El Gobierno estadounidense dice que ese año Reyes Arzate participó en una investigación de El Seguimiento 39 junto a las autoridades estadounidenses. Poco después, el mexicano se reunió con líderes de ese cártel y les dio información sobre la investigación, aseguran los fiscales.
El caso de Reyes Arzate se ha relacionado con el de Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública de México y quien se encuentra preso en Nueva York acusado de narcotráfico y a la espera de un juicio.
García Luna trabajó en México en más o menos en la misma época que Reyes Arzate. Los fiscales han dicho que algunas pruebas en el caso de García Luna son las mismas que en el de Reyes Arzate. Ocurre lo mismo con pruebas que fueron mostradas en el juicio a Joaquín “El Chapo” Guzmán, exlíder del Cártel de Sinaloa. El Juez Cogan preside tanto el caso de García Luna como el de Guzmán, quien fue sentenciado a cadena perpetua en Estados Unidos.
Sin embargo, los fiscales dijeron el miércoles al Juez Cogan que Reyes Arzate no está colaborando con ellos.
Según la Fiscalía, Reyes Arzate, de 49 años, fue expulsado de la policía poco después de que saliera a la luz que aceptó sobornos de los cárteles. En 2017 se despidió de su familia y amigos, y tomó un avión para entregarse en Estados Unidos, ya que ya se habían presentado cargos contra él allí.
“Me separé de mis hijos sabiendo que venir no era quizás la mejor opción, pero era la correcta”, le dijo al Juez.
Reyes Arzate, apodado “La Reina”, pasó tres años preso en Illinois por cargos de obstrucción a la justicia y luego fue trasladado a Nueva York para enfrentar los cargos de tráfico de drogas. Tras llegar a Nueva York en 2020, la Fiscalía lo acusó también de entregar información al cártel de los Beltrán Leyva.
Mark DeMarco, el abogado del mexicano, dijo al Juez Cogan que el tiempo que Reyes Arzate ha pasado en prisión ha sido muy duro, debido a cómo otros presos tratan a un expolicía.
“Ha estado preso con la misma gente a la que él ayudó a meter en prisión”, dijo el abogado.
