El párroco fue detenido por elementos de la Fiscalía General del Estado, por su presunta responsabilidad en un caso de abuso sexual en contra de una menor. Según la información disponible, al párroco se le ha seguido un proceso desde el año 2018, cuando fue denunciado por la presunta agresión.
Ciudad de México, 9 de febrero (SinEmbargo).-Un sacerdote de Ciudad Juárez, Chihuahua, fue detenido por autoridades de la Fiscalía General del Estado, por acusaciones de presunto abuso sexual en contra de una menor.
De acuerdo con información del diario Reforma, el sacerdote fue identificado como Aristeo Baca. Además, el periódico Diario de Juárez indica que el prelado fue detenido la mañana de este sábado por policías ministeriales adscritos a la Fiscalía.
Según información del diario local, al párroco se le ha seguido un proceso desde el año 2018, cuando fue denunciado por la presunta agresión en contra de una menor.
Al respecto, el portavoz de la Diócesis de Ciudad Juárez, Hesiquio Trevizo Bencomo, dijo que lamentaban “el hecho, hay que esperar la decisión judicial, pero no creo que un hombre con su trayectoria haya cometido un acto así”, informa el periódico local.
IGLESIA Y ABUSOS
La iglesia católica de Mexico se ha visto envuelta en diferentes polémicas por casos de presunto abuso sexual. En agosto de 2018, tras la revelación de un informe que documentó casos de abuso sexual cometidos en Estados Unidos, el Cardenal mexicano Sergio Obeso Rivera, aseguró que quienes acusan a la iglesia de proteger a los pederastas deberían tener: “tantita pena, pues tienen la cola muy larga”.
Sus declaraciones se dieron a conocer después de la publicación de un informe judicial de la Corte Suprema de Pensilvania, EU, que documentó 300 casos de “sacerdotes depredadores”en seis diócesis de la unión americana.
Las declaraciones del religioso se dieron previo a un evento religioso en Veracruz, en la Catedral de Nuestra Señora de la Asunción, donde oficiaría una misa ya como Cardenal.
En marzo del mismo año, un sacerdote fue sentenciado con pena carcelaria por pederastia, con lo que “se rompe la burbuja” de protección contra la cúpula eclesiástica, afirmó en su momento David Peña Rodríguez, Coordinador Jurídico del Grupo de Acción por los Derechos Humanos y la Justicia Social, AC.
Durante más de una década, Jesús Romero Colín fue abusado sexualmente por el sacerdote Carlos López Valdez. En 2013, la víctima, de entonces 31 años, envió una carta al Papa Francisco en la que le expuso los abusos que vivió en su infancia, además de la indiferencia de la Iglesia católica al respecto.
Un mes después, en respuesta, Jorge Mario Bergoglio le pidió “perdón en nombre de la Iglesia”, a través de una misiva.