La escritora e investigadora independiente Irmgard Emmelhainz habló con SinEmbargo sobre la reedición de su estudio sobre las tres décadas de políticas neoliberales en México.
Ciudad de México, 8 de noviembre (SinEmbargo).– “La agenda redistributiva de López Obrador busca corregir los excesos del neoliberalismo a través de un discurso populista que promete desarrollo económico, seguridad y paz por medio de políticas extractivistas y control masivo de los medios de comunicación y redes sociales”, plantea la escritora e investigadora independiente Irmgard Emmelhainz en La tiranía del sentido común (Debate), “un ejercicio indisciplinario de pensamiento crítico anclado al México neoliberal con una perspectiva global”.
“Fueron más de 30 años de continuidad en la misma política, siendo que el actual Presidente está reforzando las políticas neoliberales a unos extremos que nadie se pudo haber imaginado. Ningún Presidente neoliberal soñó con lograr hacer esas modificaciones”, expresó en entrevista Emmelhainz.
Cuestionada sobre si esta “tiranía del sentido común” a la que se refiere es el resumen de todas las contradicciones del modelo neoliberal que se han vuelto perfectibles, la autora indicó que, en efecto, ella percibe una “dictadura perfectible”.
“Es un aparato de propaganda y de discurso, al mismo tiempo, burdo pero también profundamente sofisticado y, de hecho en el libro, hago un comparativo de cómo manejaban la propaganda desde Calderón, Peña Nieto y este Gobierno y sí es una embestida brutal, de cómo se ha ido sofisticando”, mencionó.
Originalmente, recordó, esta obra la escribió en 2016 a la mitad del sexenio de Peña Nieto, y decidió reeditarla porque le pidieron traducirla al inglés. “De la primera versión eliminé los capítulos del movimiento feminista y de los movimientos sociales, que fueron fenómenos muy específicos que surgieron con el significante o el lente imaginario de la transición a la democracia”.
“Teníamos en las noticias del país (en la recta final del Gobierno de Peña Nieto) una sucesión de escándalos, una caja china, al grado que era imposible legitimar al neoliberalismo, ni a ningún régimen de ninguna manera, y es cuando entra la retórica de izquierda al poder con una nueva jugada discursiva, ahora la oposición se convierte en la hegemonía, entonces, es el punto de partida de la tiranía posneoliberal, entender qué es lo que implica eso y también un poquito, empiezo a dibujar, el capitalismo bajo este nuevo signo o el neoliberalismo, que ya se convierte abiertamente en extractivista”, refirió.
Con respecto a si advierte una alternativa a este modelo, indicó que dentro del libro hay un capítulo que se llama “Si es posible una contra izquierda”: “a mí me interesa la contra izquierda como una forma de oponerse a la oposición, que es una forma de oponerse al sistema capitalista que implicaría hacer alianzas con los defensores de la tierra, que los entes urbanos se unieran en solidaridad con los defensores de la tierra y sería como una contra izquierda verde si quieres”.
De igual forma sostuvo que el actual sistema gubernamental mexicano “no es factible sin el uso de las Fuerzas Armadas, no hay forma de sostener el neoliberalismo extractivista, como lo estamos viendo en estos momentos, sin una nueva militarización”.
“El Estado no nos ofrece nada más, nos están extorsionando y si logramos, nosotros, crear a mediano plazo estructuras autónomas lo vamos a lograr. Recuperación de agua, paneles de luz solar, por ahí son como un ejemplo chiquito por donde se puede empezar como a nivel personal, el huerto urbano propio. Sí, son pequeñísimos pasos para lograr eso y luego dejar de estarle dando bola al círculo mediático, porque más que nunca se puede definir a la política como pan y circo, y darle la espalda también”, ahondó con respecto a los caminos a tomar.
